Un tribunal absuelve a tres ejecutivos de Tepco procesados por el desastre de la planta de Fukushima
- El juez les considera "inocentes" y no aprecia negligencia porque no se pudo prever la magnitud del tsunami
- Tsunehisa Katsumata (79 años), Sakae Muto (69) e Ichiro Takekuro (73) se enfrentaban a cinco años de prisión
Tres antiguos altos cargos del grupo Tepco, encargado de la gestión de la central nuclear de Fukushima, han sido absueltos por un tribunal de Tokio. La sentencia afirma que no son culpables de las consecuencias de la catástrofe nuclear provocada por el tsunami del 11 de marzo de 2011.
Ante la sala, el juez ha leído el veredicto: "Los acusados son todos inocentes". Entre el público se ha escuchado "increíble", pero el magistrado ha continuado con la sentencia: "Las deliberaciones se han mantenido sobre el hecho de saber si hubo un cierto nivel de predición" del gigantesco tsunami para establecer si la acusación de negligencia con consecuencia de muerte era o no pertinente.
Durante la lectura de las conclusiones de la sentencia, los cientos de asistentes como público y los tres acusados se han mantenido en silencio. Los imputados se enfrentaban a cinco años de prisión, tanto el expresidente del consejo de administración de Tokyo Electric Power (Tepco), Tsunehisa Katsumata (79 años), como los dos ex vicepresidentes en el momento del accidente, Sakae Muto (69 años) et Ichiro Takekuro de 73.
No tomaron ninguna medida
La acusación sostenía que estos altos ejecutivos sabían antes del accidente que el riesgo de tsunami superaba la capacidad de resistencia de la central de Fukushima pero que no tomaron ninguna medida.
Estos tres antiguos responsables de la empresa que gestionaba la planta nuclear de Fukushima Daiichi son las únicas personas físicas juzgadas por el desastre, el peor accidente nuclear de la historia después de la tragedia de Chérnobil en 1986 en la extinta URSS.
Se les acusaba de que, por su negligencia, 44 pacientes del hospital de Futaba, a unos kilómetros de la central, no pudieron ser evacuados en autobus y fallecieron. La Fiscalía había rechazado en dos ocasiones perseguir penalmente a los ejecutivos de Tepco argumentando que los elementos del informe eran insuficientes pero un panel de ciudadanos reexamino el caso y lo envió a la jurisdicción penal, en un procedimiento poco usual en Japón.
Greenpeace lamenta la sentencia
En un comunicado Greenpeace ha lamentado que la Justicia japonesa "ha fracasado una vez más a la hora de defender los derechos de decenas de miles de ciudadanos afectados por el desastre de Fukushima".
Durante el proceso, Katsumata ha declarado que no tomaba en el día a día decisiones sobre la seguridad de la central y que delegaba ese trabajo a sus subordinados encargados de esas cuestiones. Tepco no realizó ningún trabajo para proteger la planta antes del sismo de magnitud 9 que anegó los grupos electrógenos de la central, paró el enfriamiento del combustible nuclear y provocó su fusión.
El tsunami causó la muerte de 18.500 personas en la zona nororiental de Japón, pero el accidente nuclear no desencadenó ninguna víctima mortal en aquel momento. Sin embargo, es responsable de miles de "fallecimientos indirectos", reconocidos por las autoridades por la degradación de las condiciones de vida de las personas evacuadas.
Condenas simbólicas
El maremoto obligó a decenas de miles de habitantes del entorno de la central a abandonar sus casas, muchos siguen instalados en otras regiones del país por miedo a la radiación.
Este es el primer juicio penal contra responsables de Tepco pero el Estado japonés y la compañía ya han sido sancionados por negligencia tras el fallo de varias demandas colectivas, aunque en ambos casos las condenas han sido simbólicas. Tepco ha indemnizado a las víctimas, gracias a un fondo creado por el Estado y al que contribuyen todas las eléctricas japonesas.
Tras conocerse la sentencia, los mercados han reaccionado con una subida de las acciones de Tepco del 2,5%.