Fermín Solís: "En 'Harry y Cerdon' mezclo la mitología con el mundo de los chavales"
- El autor de Buñuel en el laberinto de las tortugas presenta una nueva colección infantil
- Las aventuras de un pequeño cíclope y su amigo, un cerdo-dragón
El dibujante Fermín Solís (Madroñera, 1972) sigue disfrutando del éxito, en todo el mundo, de Buñuel en el laberinto de las tortugas (Salvador Simó, 2019), la adaptación cinematográfica de su famosa novela gráfica (2009). Pero también acaba de publicar Las colosales aventuras de Harry y Cerdon (Montena), una colección de libros ilustrados, en los que narra el día a día de un pequeño cíclope y un cerdo-dragón en la isla de Colossa.
“Es una idea que tenía desde hace muchos años –nos comenta Fermín-, quería contar la historia de dos personajes que viven en el mundo creado por Ray Harryhausen (el maestro de los efectos especiales, famoso por películas como Furia de titanes o Simbad y el ojo del tigre) porque es un creador que marcó mi niñez”.
“Por eso –continúa Fermín- Harry y Cerdon, viven en Colossa, una isla en medio del mar, en donde habitan todas esas criaturas fantásticas, muchas de la mitología griega. Pero la sociedad en la que viven es moderna, con la que se pueden identificar los chavales de hoy. Los protagonistas viven aventuras cotidianas, pero ambientadas en ese mundo mitológico y fantástico que viene de esas películas”.
Una curiosa mezcla entre la mitología clásica y el mundo de los chavales de hoy. “No es que quiera enseñar enseñar mitología pero si metemos cosas que pueden excitar la curiosidad de los chavales, como el vellocino de oro. Creo que esa mezcla de lo cotidiano actual y la mitología clásica es lo que hace tan especial a los cuentos”.
Harry y Cerdon, los protagonistas
Fermín nos presenta a Harry y Cerdon: “Harry es un pequeño cíclope, que solo tiene un ojo y es pariente del mismísimo Polifemo (el cíclope más famoso de la mitología, que se enfrentaba a Odiseo en La Odisea, de Homero). Y Cerdon es su compañero inseparable, una criatura que es mitad cerdo y mitad dragón”.
“En el primer tomo –añade- encontramos a Harry con unos 12 años, en su último año del cole. En el segundo transcurre en el verano después de las clases y en el tercero ya irá al instituto. Porque mi intención es que vaya creciendo junto a sus lectores, que no se quede estancado siempre en la misma edad. Es un chaval con los problemas de los chavales de esa edad en el entorno del colegio y la sociedad. Y al ser un cíclope también seremos testigos de cómo tiene otros problemas añadidos, desde no encontrar gafas para él hasta tener que enfrentar a seres mitológicos”.
En cuanto a Cerdon, no es su mascota. “Es un personaje completamente independiente, el compañero de Harry, que está ahí para acompañarle en sus aventuras y aconsejarlo, a veces bien y a veces mal. Desciende de las criaturas mitológicas y es una mezcla de cerdo y dragón. Yo quería que se llamase Hausen, para homenajear al citado Ray Harry-hausen, pero a la editorial no le convenció. Y al final me he acostumbrado a ese nuevo nombre. Es el que pone el punto humorístico y las situaciones escatológicas que les gustan a los chavales. Por ejemplo, cuando estornuda sale fuego”.
Un homenaje a Steve Ditko, creador de Spider-Man
Además de a Harryhausen, el libro también homenajea a Steve Ditko, el creador gráfico de Spider-Man. “Ditko murió el año pasado, junto cuando estaba dibujando esa parte –asegura Fermín- y me pareció bonito incluir un homenaje con ese personaje, el dibujante del cómic que busca Harry y que es un “Ditkosaurio”, un dibujante retirado, que vive alejado del mundo y es un poco huraño”.
Tampoco falta un personaje femenino, Medusa. “Es la chica de la que está enamorado Harry -confiesa-. Es una chica fuerte y decidida que en vez de pelo tiene serpientes, como el personaje mitológico”.
Dos volúmenes publicados
La colección ha comenzado con dos volúmenes, especialmente indicados para lectores entre 7 y 12 años pero que, según Fermín, “Son para lectores de todas las edades. Aunque esa franja también es indicativa. No son libros para los primeros lectores ni tampoco para adolescentes. Pero lo que intento es que los adultos también disfruten de la lectura, que sean para todos los públicos, porque hay dobles lecturas, homenajes, juegos de palabras… ”.
En cuanto a los títulos publicados: “El primero es Una misión mítica–nos comenta Fermín-; cuento que se va a estrenar la nueva película del superhéroe más popular y Harry le quita el valioso número 1 de la colección a su padre para llevárselo al colegio a fardar. Con tan mala suerte de que el profesor se lo rompe”.
“Y en el segundo -continua-, que se titula Misterio en la isla, Harry quiere conseguir unas zapatillas superchulas y no sabe de dónde sacar el dinero. Como véis son cosas que les pueden ocurrir a cualquier chaval de ahora”.
Como vemos, Fermín cambia los objetos mitológicos por otros más asequibles para los niños. “Paso un poco de puntillas por los objetos mitológicos y los cambio por otros más cercanos a los niños, como el cofre del tesoro del abuelo, el cómic o las zapatillas que todo el mundo quiere conseguir. Es un poco lo que buscan los chavales de hoy en día, que están más pendientes de su móvil que de saber qué son las ruinas de Mérida”.
“Me gusta más dibujar para los niños”
A los que solo conozcáis a Fermín por Buñuel en el laberinto de las tortugas, quizá os sorprenda su cambio de estilo. “No es fácil porque hay que cambiar completamente la mentalidad -confiesa-. Confieso que me costó mucho dibujar Buñuel porque necesitaba un dibujo más oscuro y más realista y yo disfruto mucho dibujando para niños”.
“Buñuel –continúa- me exigió mucho trabajo de documentación, muchas horas de dibujo… y con Harry se me va la mano sola. Disfruto mucho porque es un dibujo muy sencillo. El primer libro lo dibujé con pincel, pero el segundo es casi todo digital”.
“Además –confiesa- esta es la primera vez que dedico más espacio a la escritura que a las ilustraciones. De hecho, cuando se lo presenté a la editorial se pensaron que era escritor, me dijeron que tenía un tono ideal para llegar a los niños, que era muy difícil de conseguir. Me ha salido de forma natural y me ha encantado”.
Sobre el diseño del libro: “Ha sido cosa de la editorial –nos comenta Fermín-. Yo le mandé el texto por un lado y las ilustraciones por otro y ellos lo montaron. Y estoy encantado con el resultado. La tipografía, la maquetación, la portada, todo lo han acabado ellos”.
Sus proyectos
En cuanto a sus proyectos, Fermín Solís espera continuar con Harry y Cerdon. “La editorial ha apostado muy fuerte y a mí me encantaría continuar porque tengo muchas ideas para sus aventuras. Y ya os he comentado que quiero que vayan creciendo. Y espero que se hagan un hueco en el mercado a pesar de la enorme cantidad de novedades”.
Además, Fermín ya ha acabado una nueva novela gráfica con la que espera repetir el éxito de Buñuel: “Acabé hace unos meses la novela gráfica Medea a la deriva, una variación del mito de Medea, a la que he llevado al futuro, cuando ya es una anciana y está en una situación extrema. Espero que Reservoir Books lo edite para el próximo Salón del Cómic de Barcelona”.
Hablando de Buñuel en el laberinto de las tortugas, aunque la Academia de Cine prefiriese a Almodóvar para representarnos en los Oscar, la película de Salvador Simó todavía tiene una oportunidad: “En Extremadura todo el mundo está volcadísimo con la película y yo sigo haciendo promoción por todas partes. Me encanta el éxito que está teniendo. Además, aunque los académicos prefiriesen a Almodóvar, todavía tenemos una oportunidad de ir a los Oscar en la categoría de película de animación. Esa es nuestra categoría natural y lo disfrutaremos más. Así que, crucemos los dedos”.