El Drogas: "Europa es un continente asesino y el Mediterráneo es su pena de muerte"
- El músico navarro publica Solo quiero brujas esta noche sin compañía, un quíntuple disco de temática muy variada
- "Necesito sentirme transgresor, me gusta reflejar lo que sucede a mi alrededor", asegura en una entrevista a RTVE.es
Enrique Villarreal 'El Drogas' (Pamplona, 1959) es una institución en el rock español. Durante casi tres décadas lideró Barricada, banda con la que alcanzó la gloria gracias a sus ritmos contundentes y sus letras descarnadas y reivindicativas.
Tras una polémica salida del grupo, que apenas sobrevivió un par de años a su marcha, 'El Drogas' se centró en su carrera en solitario, primero como Txarrena y luego con su nombre artístico.
Plenamente consolidado en esta etapa y con una banda estable a su alrededor, este viernes ve la luz su nuevo trabajo, Solo quiero brujas esta noche sin compañía (Warner Music) -el título lo toma prestado de un verso de Leopoldo María Panero-, un quíntuple disco en el que ha invertido más de tres años y que incluye un total de 42 canciones de temática y ambientación diversa.
La apuesta de Enrique Villarreal ha sido la de que cada uno de los discos tenga una sonoridad propia -timbres, los denomina-, para lo cual ha contado con productores diferentes, buscando conseguir una personalidad reconocible, algo con lo que ya experimentó en su anterior trabajo, el triple Demasiado tonto en la corteza, y cuyo origen se puede rastrear en su última producción con Barricada, La tierra está sorda.
"Hay una media de ocho canciones por disco, que era algo que tenían antes los vinilos. Eso me da una comodidad para no tener que hacer 12 o 14 canciones con la misma ambientación musical y pienso que el resultado final no le va a aburrir a la gente", cuenta 'El Drogas' en una entrevista a RTVE.es
Lo más potente de Solo quiero brujas... es precisamente eso, la posibilidad de escuchar cada uno de sus cinco discos de forma independiente, aunque el artista puntualiza que "la primera canción de cada disco tiene un punto que recoge el ambiente del anterior", lo que otorga al trabajo cierta continuidad.
La pena del mar 'Muerteterráneo'
Con la base de rock'n'roll habitual, pero también con detalles de blues, tango, hardcore o música industrial, sin duda uno de los puntos fuertes de la música de Enrique Villarreal son sus textos, en muchos casos reivindicativos y de temática social. Especial importancia tiene en este trabajo el drama de los migrantes que mueren en el Mediterráneo y la posición que Europa tiene hacia este asunto, al que dedica el segundo de los discos, Europa (Timbre oxidado).
"Yo considero que Europa, que va de democrática, es un continente asesino y el mar 'Muerteterráneo' es su pena de muerte. Es el timbre oxidado que no se deja tocar pero donde la puerta está abierta para exportar las armas que van a destrozar las casas, hogares y vidas de esa gente que luego viene a buscar algo de esperanza para salir adelante. Me parece una sinvergonzonería de la que tú y yo formamos parte", afirma.
El músico cuenta que "mi nieto mayor tenía la misma edad que aquel niño que apareció ahogado en la playa -se refiere al caso de Aylan Kurdi, el niño refugiado sirio de tres años que murió en Turquía tras naufragar la embarcación en la que viajaba con sus padres en 2015-; qué suerte he tenido, mi único problema es comprarle una bicicleta que esté a su altura", ironiza.
“ Ante el imbécil procuro tener la mano abierta y en tensión por si hay que soltar un tortazo, que es un acto de autodefensa legítimo“
El compromiso político ha sido una marca de la casa en la música de 'El Drogas', tanto en su época en Barricada como ahora en solitario. "Yo necesito sentirme una persona transgresora", argumenta. "Vivo una serie de historias que suceden a mi alrededor y me gusta reflejarlo", añade.
Para ello procura "abrir los oídos para que la gente me cuente sus cosas, y aprendo muchísimo de esa manera. Procuro mantenerme callado y escuchar. Al que no le dejo sitio en las orejas es al imbécil, procuro tener la mano abierta y en tensión por si hay que soltar un tortazo, que es un acto de autodefensa totalmente legítimo", cuenta.
Timbre a timbre
En los tiempos que corren, en los que vender como antaño discos a miles es casi una utopía, lanzar un producto como el que acaba de poner en circulación 'El Drogas' -un quíntuple, con una presentación muy cuidada en su envoltorio y más de 40 canciones- necesita, sin duda, un apoyo importante de la compañía de discos, Warner en este caso.
"Lo entendieron enseguida, estaba bastante claro por dónde iba y la idea que tenía era hacer cada uno de los discos con un productor diferente". El artista acordó con la discográfica un presupuesto para hacer la grabación en el local de ensayo de 'El Drogas' y, posteriormente, hacer las mezclas en distintos estudios.
El disco se abre con Timbre acústico, siete temas en los que, como indica su título, están construidos con instrumentos acústicos: contrabajo, batería con escobillas y un piano "que he metido yo sin ningún tipo de vergüenza", dice 'El Drogas', quien añade que también a la hora de escribir pretendía "darle luminosidad, porque yo suelo ser más oscuro".
Le sigue el ya citado Timbre oxidado, en el que predomina un sonido hardcore en el que Villarreal buscó "la incomodidad en las melodías, no me apetecía que fuera lo evidente".
Timbre canalla y de bullanga está compuesto por ocho temas que "compongo sobre todo por la lírica, me apetecía meter expresiones del idioma lunfardo (jerga argentina) y del rollo tanguero". En la maqueta inicial esas canciones con sabor a tango se convirtieron en cortes con sonido rhythm and blues tras pasar por el tamiz de sus músicos.
Timbre fundido está inspirado en los cuentos del peruano Julio Ramón Ribeyro, sobre todo 'Fénix', ambientado en un circo, de donde 'El Drogas' saca sus personajes: el dueño, el oso, el forzudo... "Lo que sucede bajo la carpa es la propia vida: una persona en la calle puede ser el forzudo, pero en casa puede ser el dueño. Pasa en muchos casos, un maltratador fuera de casa es muy simpático pero luego en casa es un monstruo". Para la vestimenta musical, en este disco se centró en el estilo industrial y en su pasión por Nine Inch Nails, encargándose de grabar la gran mayoría de instrumentos y, además, del arte de la portada y de esta parte del libreto.
“ En muchos casos, un maltratador fuera de casa es muy simpático pero luego en casa es un monstruo“
Timbre equivocado cierra el disco y es el más heterogéneo de todos ellos. "Eran canciones que iba componiendo cuando necesitaba descansar del resto, de manera sencilla, con dos, tres o cuatro acordes", cuenta.
De gira desde noviembre
Ahora queda la complicada tarea de llevar todo este material a los escenarios. Durante este mes de octubre, 'El Drogas' y su banda están acompañando a La Polla Records en su gira de reunión 'Ni descanso ni paz'.
Pero el 22 de noviembre arranca en Barcelona su propia gira, que les llevará hasta el mes de marzo por las principales ciudades españolas. La idea del músico navarro es presentar en directo los tres primeros discos de Solo quiero brujas... , un total de 25 temas, más otros 15 de anteriores etapas, para conformar un repertorio de 40 canciones. "Siempre me gustó eso de cantar las 40", bromea.
Y a finales de 2020, preparar una nueva gira, "si podemos por las mismas salas", con los dos discos restantes. Un proyecto muy ambicioso que da la medida de un artista como 'El Drogas', que tiene aún mucho que contar y muy poco que demostrar.