La Justicia investiga si el dueño de DIA lideró una trama para provocar la caída en bolsa de la empresa y hacerse con ella
- El Supremo alude en un auto a un informe policial que apunta a ello y precisa que el caso lo llevará la Audiencia Nacional
- Fridman está siendo investigado por la quiebra del grupo ZED: habría propiciado su asfixia para comprarla a un precio menor
La Justicia española investiga si el multimillonario ruso Mijaíl Fridman actuó a través de un "entramado societario criminal" para provocar la caída del precio de las acciones del grupo DIA y hacerse así con el control de la compañía a un menor coste. Así figura en un auto emitido por la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo y al que ha tenido acceso Efe.
Este no es el primer caso por el que se investiga a Fridman. El juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón acordó citar como investigado al empresario ruso este lunes en la causa que investiga supuestas irregularidades en la caída del grupo tecnológico ZED a petición de la Fiscalía Anticorrupción, que lo había solicitado por supuestos delitos contra el mercado, administración desleal e insolvencia punible.
El documento sobre DIA, según Efe, alude a un informe policial que apunta que Fridman -hoy mayor accionista de DIA con el 69,76% de los títulos, tras lanzar una oferta pública de acciones (OPA)- es el máximo responsable de una trama que generó en la empresa "una situación de conflicto, provocó situaciones de bloqueo y falta de liquidez a corto plazo para que su cotización cayera".
“Según la policía, la estrategia pretendía mantener una elevada tensión financiera sobre DIA para que la acción estuviera baja“
En el auto se plantea que la estrategia apuntada pretendía mantener "una elevada tensión financiera" para que el precio de la acción siguiera bajo, hasta acabar lanzando una oferta de compra por la compañía una vez depreciada a través de la sociedad LetterOne.
DIA cotizaba en torno a los cinco euros cuando el magnate ruso se hizo con una participación del 10%, en julio de 2017; desde entonces su precio cayó con fuerza. Fridman lanzó una opa sobre DIA en febrero a 0,67 euros por acción (con una prima del 56,1%) que acabó cerrando con éxito en mayo. La compañía está ahora en el entorno de los 45 céntimos tras una grave crisis que colocó al grupo al borde de la quiebra.
El informe policial señala que la trama "mezcla personas físicas y jurídicas de diversas nacionalidades -entre ellas, mercantiles noruegas-, lo que acrecienta la complejidad de las labores de investigación". Además, advierte de que "en países como EE.UU., Reino Unido y Holanda las operaciones por este empresario están supervisadas intensamente, lo que no ocurre en España".
El caso se investigará en la Audiencia Nacional
El auto precisa que el caso será competencia finalmente del Juzgado Central de Instrucción número cuatro de la Audiencia Nacional. El Supremo justifica su decisión por, entre otros factores, la "sospecha" de que se haya producido "un perjuicio patrimonial" que afecte a accionistas y trabajadores de DIA en diferentes regiones españolas, con un impacto aún por calcular, pero superior a 7 millones de euros.
Considera que "la complejidad de los hechos y de la futura instrucción", en caso de que finalmente se produzca, hace conveniente que sea la Audiencia la responsable de un expediente cuyo origen radica "en una denuncia anónima", según el documento.
El Juzgado Central número cuatro decidió no admitir a trámite la denuncia por falta de competencia el 5 de marzo y se inhibió a favor de los juzgados de Madrid, que rechazaron hacerse cargo el día 29 de ese mismo mes, por considerar que era competencia de la Audiencia. La disputa acabó en el Supremo, que ha dado la razón a los juzgados de Madrid y deja el expediente en manos de la Audiencia Nacional.
La trama podría haber afectado a la economía del país
En su auto, los magistrados del Supremo recuerdan que DIA cotizaba en el momento de los hechos en el IBEX 35, el principal selectivo de la bolsa española, por lo que la trama podría haber afectado a la economía nacional, alterando el precio de una firma "importante en un sector básico como es el de la alimentación".
De hecho, señalan que la evolución de los precios en el sector del comercio alimentario es "vital" para las personas con menos recursos, por lo que "hay en este caso una afectación de la economía más intensa" que en casos como el de Afinsa, instruido en su momento por la Audiencia Nacional.