Lo mejor de... 'Zipi y Zape' y 'La familia Ulises'
- Dos tomos recogen las mejores aventuras de dos de las series más famosas de Bruguera
- Coinciden con el 25 aniversario de la muerte de Escobar y el 75 de La Familia Ulises
La editorial Penguin Random House sigue publicando su sello Bruguera, dentro del que recupera las joyas de la añorada editorial. Entre sus lanzamientos destaca la serie Lo mejor de... que son tomos dedicados a las series más recordadas. Los últimos lanzamientos son dos joyas que, además, coinciden con fechas muy señaladas: Lo mejor de Zipi y Zape, que coincide con el 25 aniversario de la muerte de su creador, Josep Escobar (1908-1994), y Lo mejor de la famillia Ulises, de Benejam, una serie que ha cumplido 75 años este 2019.
Lo mejor de Zipi y Zape
El pasado 31 de marzo se cumplieron 25 años de la muerte de Josep Escobar, uno de los mejores historietistas españoles, creador de clásicos como Carpanta, Petra, criada para todo y, sobre todo, Zipi y Zape, que siguen siendo los niños más traviesos de la historia del cómic español, como demuestra las dos exitosas películas que protagonizaron en 2013 y 2016 (Zipi y zape y el club de la canica y Zipi y Zape y la isla del capitán).
Además, este mismo año, el sello Bruguera ha comenzado a recuperar las 16 historias largas que dibujó Escobar, empezando por las dos primeras: La vuelta al mundo y El tonel del tiempo. Cada año, la editorial quiere lanzar 3 o 4 álbumes, hasta completar la serie.
Pero hoy os recomendamos Lo mejor de Zipi y Zape (Bruguera), en el que se recuperan mejores historias de los gemelos. Un libro que cuenta con un prólogo de Sergi Escobar i Sastre, hijo de Escobar, en el que nos recuerda que Zipi y Zape siguen divirtiendo a las nuevas generaciones.
El libro comienza con la primera aventura de Zipi y Zape, que se titulaba La caseta de baños y se publicó en el nº 57 de la revista Pulgarcito, en 1948. Una historieta en blanco y negro en la que ya aparecían los gemelos y sus progenitores, y que se enmarca en la tradición de niños revoltosos del cómic, que comenzó con Max und Moritz (1865) y llegó a su máxima expresión en The Katzenjammer Kids (1897), ambos referentes directos de Zipi y Zape. De hecho, el propio Escobar ya había hecho alguna página de temática similar.
Lo curioso es que, en esta primera historia, Zipi y Zape era muy diferentes a los que conocemos, tenían un aspecto mucho más espigado y parecían casi adolescentes. Sus padres, curiosamente, se parecen más físicamente, pero Don Pantuflo no tiene ese nombre, sino que se le conoce como Don Raguncio Feldespato.
En el libro podemos comprobar cómo, enseguida, los personajes fueron adquiriendo el físico con el que los reconocemos actualmente. Pero también nos chocan otras cosas curiosas. por ejemplo, los castigos con los que don Pantuflo obsequiaba a Zipi y Zape por sus travesuras, y que nos sorprenden por su crueldad (desde atarlos a un poste con dos bombas debajo hasta tirarlos al fondo del mar atados y con un peso... pasando por la hoguera, la guillotina o atarlos a las vías del tren).
Castigos más propios de Mortadelo, que se fueron suavizando con los años (y la censura), hasta la creación del famoso cuarto de los ratones (del que Zipi y Zape se pasaron entrando y saliendo más de una década). Al final, simplemente solían ser perseguidos por sus coléricos progenitores.
Otra curiosidad es que, en las últimas páginas del libro, Zipi y Zape se encuentran con el propio Escobar (al que piden que los haga mayores); y con otras de las famosas creaciones del dibujante, como Carpanta, Petra, Blasa...
Pero, por muy traviesos que fueran, Zipi y Zape siempre ayudaban al prójimo, peleaban contra los malos e intentaban aprender, aunque a su manera. Porque en el fondo eran los niños que todos queríamos ser: traviesos pero con un gran corazón.
Un libro ideal para los padres, que recordarán las divertidas travesuras de Zipi y Zape, y para sus hijos, que descubrirán que los gemelos siguen siendo tan divertidos como siempre.
'Lo mejor de la familia Ulises'
Como os comentábamos, este año también se cumple el 75 aniversario de La familia Ulises, la serie más popular y comercial del TBO. Fue creada por Marino Benejam Ferrer (1890-1975), más conocido como Benejam.
En este álbum recopilatorio, Lo mejor de la familia Ulises (Bruguera), nos encontramos con una divertida selección de aventuras de esta entrañable familia, desde su primera aparición, en 1944, con una historieta titulada La posada de los asnos veloces, que sirvió de prólogo a la serie que comenzaría a publicarse en 1945. Al contrario de lo que comentábamos con Zipi y Zape, la familia ya presentaba su estilo humorístico y estilístico desde la primera página.
Un maravilloso testimonio de cómo eran las familias de clase media de la posguerra y que triunfó durante años, hasta el punto de que otros autores continuaron la serie cuando Benejam la dejó en 1969. El más recordado fue Josep María Blanco, fallecido en mayo de este 2019. Y aunque no apareceies acreditado, el guionista Joaquín Buigas, fue responsable de muchos de los guiones de la serie.
La familia Ulises, toma su nombre del padre de familia Ulises Higueruelo, un hombre bueno y trabajador, que comparte todas las aventuras con su mujer Sinforosa, ama de casa, su hija adolescente Lolín y sus hijos pequeños Merceditas y Policarpito, además de la abuela (madre de Sinforosa), doña Filomena, una mujer de pueblo sin estudios pero con una sabiduría popular de recursos ilimitados. Les acompaña un pequeño perrito llamado Treski, que es uno más de la familia.
Destacar lo formalitos que son los niños, nada que ver con Zipi y Zape, y es que la familia siempre obedece al padre y va junta a todas partes.
Un cómic tan divertido como las mejores sitcom de la actualidad y que es un estupendo barómetro para comprobar cómo cambió la sociedad española entre los años 40 y los 70 del Siglo XX. Destacar esas maravillosas viñetas de Benejam, repletas de personajes y en las que cada uno de ellos tenía su frase. Un caos organizado en el que las buenas intenciones de la familia acababan siempre en desastres tan surrealistas como divertidos.
Dos joyas de Bruguera que ahora recuperamos gracias a estas estupendas ediciones.