Las emisiones de gases de efecto invernadero en España bajaron un 2,3% en 2018

• Se trata del cuarto nivel más bajo desde 2008, por detrás del año 2013, según el INE
• El mayor descenso se dio en el suministro de energía eléctrica, gas, vapor, aire acondicionado y agua (-11,6%)

El uso de energías renovables ayuda a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.

Las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) disminuyeron en España un 2,3% en 2018 con respecto al año anterior, hasta las 340,7 millones de toneladas, y se situaron en el cuarto nivel más bajo de los últimos diez años, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).

El dióxido de carbono es el principal gas de efecto invernadero, pero la estadística del INE, hecha pública hoy, refleja también cómo han evolucionado otros gases responsables del calentamiento global del planeta, como el metano o el óxido nitroso. Así, las emisiones de dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera se redujeron en 2018 un 1,9%, las de óxido nitroso (N2O) cayeron un 2,8% y sólo aumentaron las de metano, un 0,1%.

Se trata del cuarto nivel más bajo desde 2008, por detrás del año 2013, en que se emitieron a la atmósfera 332,2 millones de toneladas de GEI; 2016, en que las emisiones alcanzaron los 334,4 millones de toneladas, y 2014, en que se midieron 337,4 millones.

La rama de actividad que más disminuyó sus emisiones de GEI en 2018 fue el suministro de energía eléctrica, gas, vapor, aire acondicionado y agua (-11,6%), mientras que la de transporte y almacenamiento fue la que más aumentó (2,6%).

También crecieron las emisiones de los hogares, hasta dos puntos porcentuales con respecto a 2017, y concentraron, con 71.404 toneladas de gases de efecto invernadero, el 21% del total de emisiones.

Dos sectores concentran casi la mitad de los GEI

El sector de la industria manufacturera emitió el 23,9% de la totalidad de GEI en 2018 y suministro de energía eléctrica, gas, vapor, aire acondicionado y agua fue el sector responsable del 20,9% de las emisiones.

Por contaminantes, las mayores emisiones de CO2 correspondieron a la industria manufacturera (76,1 millones de toneladas), hogares (69,0 millones) y suministro de energía eléctrica, gas, vapor, aire acondicionado y agua (59,7 millones), que representaron en conjunto el 72,2% de todas las emisiones de CO2 a la atmósfera.

En cuanto a Metano y N2O, el sector de la agricultura, ganadería, selvicultura y pesca emitió las mayores cantidades, con un 62,7% del total equivalente al primero y el 78,8% del segundo.

Las emisiones de GEI en 2017 habían experimentado un repunte del 2,6% respecto al año anterior, hasta situarse en 344 millones de toneladas, y también en ese ejercicio casi el 21% de esas emisiones correspondieron a los hogares.