'Hijos del Mediterráneo', una recreación de la obra maestra de Serrat
- Jorge Drexler, Calamaro o Amaral, entre otros artistas, reinterpretan un disco capital de la música española
- Amaro Ferreiro, impulsor de la idea, cuenta a RTVE.es los detalles de un proyecto que reproduce obsesivamente el original
Si hay un disco que destaca en la obra de Joan Manuel Serrat ese es Mediterráneo. Editado en 1971, cuando el cantautor catalán tenía 27 años, está considerado como su obra maestra y uno de los discos más importantes de la música en castellano, capaz de influir a las distintas generaciones.
Ese es el sentido que subyace tras Hijos del Mediterráneo, un trabajo que acaba de ver la luz y en el que intérpretes de distintos estilos recrean, con asombrosa –y casi obsesiva- fidelidad al original, la obra capital del ‘Noi del Poble Sec’, entre ellos Andrés Calamaro, Jorge Drexler o Eva Amaral.
El artífice de esta iniciativa es el músico y compositor Amaro Ferreiro, quien cuenta en una entrevista a RTVE.es que la idea surgió en un viaje por carretera de Madrid a Vigo escuchando Discópolis, de Radio 3, que emitió íntegro el Mediterráneo de Serrat: “Me descubrí escuchándolo entero por primera vez en mi vida. De hecho no sabía que esas canciones formaban parte del mismo disco, había otras que no había oído nunca. Y me obsesioné”, afirma.
El resultado de esa experiencia le llevó a intentar reproducir su contenido tal y como fue concebido en la época, pero con voces actuales, con la intención de “aprender del pasado”. Para ello, Ferreiro echó mano de su amigo Ricky Falkner, músico y productor de artistas como Love of Lesbian, Sidonie, Lory Meyers, Quique González o Iván Ferreiro –de cuya banda forma parte, igual que Amaro-.
“Falkner, un Juan Carlos Calderón moderno”
La tarea no era sencilla ya que Joan Manuel Serrat contó para Mediterráneo con la labor de un gigante de la música como Juan Carlos Calderón, quien junto a Gian Piero Reverberi ejerció como productor y arreglista. “En esta época de ordenadores uno se puede grabar un disco en su casa; pero cuando piensas en un disco del año 71, con orquesta, con músicos, te das cuenta de lo importante que es ponerlos todos juntos a tocar”, dice Ferreiro.
Por esa razón considera esencial la labor que ha realizado en esta producción Ricky Falkner, al que considera “un Juan Carlos Calderón moderno por su conocimiento musical y su forma de tratar a los músicos, no conozco a otra persona que hubiera podido hacer esto como él”.
Una tarea importante fue la de elegir a los cantantes que debían interpretar los temas del disco, que aparecen en el mismo orden que en la grabación de Serrat. “No fue muy difícil –señala Amaro Ferreiro-; yo iba escuchando el disco original y me iban saltando los nombres directamente. Creo que la selección es muy natural”.
Así, la obra se abre con el tema “Mediterráneo”, interpretado por Jorge Drexler. “Me gustaba ese juego de que fuera un latinoamericano quien dijera “yo nací en el Mediterráneo” porque al final el Mediterráneo es una cosa cultural, es lo que nos une con todos los pueblos latinoamericanos pero también con Francia o con Italia”, afirma Ferreiro.
Eva Amaral se encarga de la melancólica “Aquellas pequeñas cosas”; Xoel López hace suya “La mujer que yo quiero”; Jairo Zabala (Depedro) pone su sello característico a “Pueblo Blanco”; Iván Ferreiro, hermano de Amaro, da unos matices inéditos a “Tío Alberto” mientras que Andrés Calamaro consigue con “Lucía” dar una nueva dimensión a uno de los temas más legendarios de Serrat. “Solo con la voz, transforma lo que hay debajo. Y creo que es algo que hacen todos los participantes en el disco”, asegura Amaro Ferreiro.
Visto bueno de Serrat
Miren Iza (“Qué va a ser de ti”), Santi Balmes (“Vagabundear”), Silvia Pérez Cruz (“Barquito de papel”), y Josele Santiago (“Vencidos”) completan la nómina de participantes en un disco al que Joan Manuel Serrat ha dado su visto bueno. “Un día Ricky y yo estábamos comiendo y Serrat estaba en la mesa de al lado. Nos acercamos y le dijimos lo que habíamos hecho y él nos respondió: “Lo sé, ya lo tengo y me encanta”. Creo que lo hemos hecho con mucho respeto a Serrat y él también ha sabido lo que estábamos haciendo y no ha querido molestarnos”, asegura el artífice de Hijos del Mediterráneo’.
Amaro Ferreiro no tiene claro si existe otro disco en la historia de la música española que merezca un trabajo de arqueología musical como el que han realizado con Mediterráneo. “Hemos pensado mucho en ello y no se nos ocurre. Lo que hace grande a Mediterráneo son, por supuesto, las canciones; pero también la gente que, a base de escucharlo generación tras generación, lo ha convertido en ese tótem que es actualmente”, dice.
La ilusión del músico es que Hijos del Mediterráneo sirva para que las nuevas generaciones redescubran el disco original y viceversa y que ambos trabajos “de algún modo se retroalimenten”.
El otro reto es poder llevarlo al escenario, una posibilidad que sus artífices se están planteando y que podría dar lugar “a algunas fechas el próximo verano en algún festival”. Una tarea complicada pero, visto el resultado que Ferreiro y Falkner han logrado con esta grabación, no es un imposible.