La 'Virgen Quemada' de la Catedral de Urakami, símbolo del Nagasaki víctima de la bomba atómica
- El papa se hará eco de los "llamamientos proféticos al desarme nuclear" en su visita a Nagasaki e Hiroshima
En la Catedral de Urakami se encuentra uno de los símbolos del Nagasaki víctima de la bomba atómica, la cabeza de la que llaman la 'Virgen Quemada', cuyo rostro representa el estigma del ataque. La imagen se caracteriza por sus cuencas vacías, está ennegrecida por la radiación y presenta una rotura que cruza su cara como si fuese una lágrima.
"La llevaron a Nueva York, a Roma y a Guernica, allí también sufrieron bombardeos en la Guerra Civil, es un icono de la paz", ha señalado Fukahori, que este domingo entregará un ramo al papa Francisco en calidad de superviviente, y que ha recordado que la bomba solo dejó la fachada de la que era la catedral más grande de Asia, porque Nagasaki fue la cuna del catolicismo en Japón.
"Han pasado muchos años de aquel impulso misionero cuya realización se hizo esperar. Hoy, el Señor me regala la oportunidad de estar entre ustedes como peregrino misionero tras los pasos de grandes testigos de la fe", ha dicho el papa Francisco, quien ha recordado que se cumplen 470 años de la llegada del jesuita español san Francisco Javier a Japón, que marcó el comienzo de la difusión del cristianismo en esta tierra y a los "mártires" que dejó la posterior represión contra los cristianos.
En el Museo de la Bomba Atómica de Nagasaki se encuentra una recreación de cómo quedó la fachada de la Catedral de Urakami, que estaba situada a tan solo quinientos metros del hipocentro de la explosión.
74 años después, en ese mismo lugar se suceden los preparativos para recibir al papa, en el que será uno de los actos más simbólicos de su visita a Japón, ya que el pontífice podría pedir un desarme nuclear total.
No obstante, el mensaje del papa podría no coincidir con el del primer ministro de Japón, Shinzo Abe, más militarista que sus antecesores por la amenaza que representa en la zona Corea del Norte. A pesar de ello, el papa volverá a recordar este domingo en Nagasaki e Hiroshima que en el mundo sigue habiendo nueve mil armas nucleares.
El papa estará tres días en Japón
El papa Francisco ha iniciado su visita de tres días a Japón con un primer contacto con los obispos del país, donde ha dicho que se hará eco del "llamamiento profético al desarme nuclear" y mostrará su cercanía a las víctimas del desastre de Fukushima.
Después de su visita de tres días a Tailandia, el papa ha aterrizado este sábado a las 17.25 hora local en el aeropuerto internacional de Tokio y se ha dirigido inmediatamente a la nunciatura, donde dormirá estos días, para encontrar a los 29 obispos del país.
En su primer discurso ha adelantado que en su visita este domingo a Nagasaki e Hiroshima rezará "por las víctimas del bombardeo catastrófico de estas dos ciudades", y se hará eco de los "llamamientos proféticos al desarme nuclear".
"Deseo encontrar a aquellos que aún sufren las heridas de este trágico episodio de la historia humana, así como a las víctimas del "triple desastre" de Fukushima, el terremoto que provocó un tsunami y causó daños a la central nuclear.
Francisco ha añadido que el sufrimiento de estas personas "es un recordatorio elocuente a nuestro deber humano y cristiano de ayudar a los que sufren en el cuerpo y en el espíritu, y de ofrecer a todos el mensaje evangélico de esperanza, curación y reconciliación".