¿Cómo ha logrado Vox entrar en la Mesa del Congreso sin pactar con el PP?

• Los populares responsabilizan al PSOE de que la ultraderecha consiga una vicepresidencia
• Populares y Vox se reprochan mutuamente que la derecha no cuente con un puesto más

Vox consigue un puesto en la Mesa del Congreso entre reproches mutuos con el PP

Vox ha logrado entrar en la Mesa del Congreso con una vicepresidencia para su diputado Ignacio Gil Lázaro pese al cordón sanitario que querían imponer los partidos de izquierda y a su rechazo a la oferta del PP. Un ofrecimiento de votos con el que pretendían lograr cuatro de los nueve puestos en la Mesa para el bloque de derecha -dos para el PP, uno para Vox y otro para Ciudadanos-. No ha sido así, algo por lo que se PP y Vox han abierto una grieta en su relación con sendos reproches. Además, los populares responsabilizan al PSOE de que la formación de Abascal tenga una vicepresidencia.

"Vox ha impedido que Ciudadanos entre en la Mesa y el PSOE ha permitido que Vox entre", ha sentenciado el líder popular, Pablo Casado, en comparecencia posterior a la sesión constitutiva de las Cortes Generales, que ha tenido lugar este martes. Ninguno de los tres partidos ha quedado satisfecho con la composición final de la Mesa del Congreso. Iván Espinosa de los Monteros (Vox) culpa al PP de facilitar que los "comunistas" -por Podemos- tengan mayor presencia en este órgano por su empeño de incluir a Ciudadanos y consideran que el partido de Pablo Casado "no es de fiar".

En la sesión constitutiva de las Cortes Generales de este martes, los diputados han votado quiénes son los nueve miembros que componen la Mesa -el presidente, los cuatro vicepresidentes y los cuatro secretarios-. Además de Meritxell Batet como presidenta del Congreso, el PSOE se ha llevado una vicepresidencia y dos secretarías, al igual que ha hecho Unidas Podemos. El PP, por su parte, se ha quedado con una vicepresidencia y una secretaría, mientras que Vox entra en el órgano con una vicepresidencia.

El PP, que ofreció un pacto a Vox y Ciudadanos para ceder sus votos y que ambos tuvieran representación en este órgano, advertía este martes por la mañana a la formación de Santiago Abascal de que, si rechazaba su oferta, no obtendría por sí mismo ningún puesto en la Mesa. El pacto requería, sin embargo, que Vox también cediera parte de sus votos a Ciudadanos, que cuenta solo con 10 diputados.

Sin embargo, los de Abascal consideraban que le correspondían dos puestos en proporción a sus 52 parlamentarios y rechazaron ceder uno a Cs. Finalmente, el partido ultraderechista ha logrado una vicepresidencia gracias exclusivamente a sus votos, en contra de lo que pronosticaba el PP.

Con los candidatos propuestos, Vox tenía garantizada la vicepresidencia

Lo cierto es que Vox tenía garantizada su elección después de que solo fueran cuatro candidatos propuestos para las cuatro vicepresidencias de la cámara -uno del PSOE, otro de Unidas Podemos, otro del PP y uno de Vox-.

Aún así, el secretario general del PP, Teodoro García Egea, asegura que la única fórmula por la que ha entrado Vox en la Mesa ha sido gracias a la izquierda.

Los cargos de la Mesa han sido designados en función del número de votos obtenidos por la Cámara. Así, como vicepresidente primero de la Mesa ha resultado elegido el diputado del PSOE Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, con 108 votos; la segunda será Ana Pastor, del PP, con 101 votos; y la tercera la ocupará Gloria Elizo, de Unidas Podemos, que obtuvo 77 apoyos en la sesión constitutiva del Congreso. El cuarto ha sido para Ignacio Gil, de Vox, con 52.

La única forma de que los partidos de izquierda hubieran conseguido vetar a Vox sin el apoyo del PP pasaba por que el PSOE renunciara a la vicepresidencia primera presentando, en lugar de uno, a dos candidatos, dividiendo así el voto de sus 120 diputados en dos.

Con 60 votos del PSOE para cada uno de sus dos candidatos, se habrían garantizado dos de las cuatro vicepresidencias, aunque la primera hubiera sido para la popular Ana Pastor. Además, la cuarta habría sido para la candidata de Unidas Podemos Gloria Elizo, ya que contaba previamente con el apoyo de JxCat y ERC. Todos estos candidatos habrían obtenido más de los 52 votos de Vox, cuyo candidato se habría quedado fuera de la Mesa en quinta posición. De esta forma, la izquierda hubiera tenido tres vicepresidencias y el PP, una.

Sin embargo, tal y como han ido las votaciones, el bloque de izquierda se queda con seis puestos- tres para el PSOE y tres para Unidas Podemos-, mientras que el PP logra dos y Vox, uno.

Tras la constitución de las Cortes, el diputado socialista, Rafael Simancas, ha defendido que ha ofrecido al PP y a Ciudadanos, "hasta hoy mismo", una fórmula de cordón sanitario para excluir a Vox de la Mesa del Congreso y lo ha hecho "de manera reiterada, en público y en privado", rechazando así que su partido tuviera ninguna responsabilidad.