Canadá quiere un papel importante en la investigación del avión estrellado en Irán
- Canadá lleva desde 2012 sin tener vínculos con Irán por su programa nuclear y su apoyo al Gobierno sirio de Bachar Al Asad
- Trudeau no ha hecho declaraciones sobre las posibles causas del accidente: "Estamos en los primeros días de la investigación"
El primer ministro de Canadá, Justin Trudeu, ha reafirmado que espera que su país tenga un representación destacada en la investigación que se ha iniciado tras el accidente aéreo en accidente aéreoIrán. En la aeronave ucraniana, de las 176 personas a bordo -incluido personal y viajeros-, 63 de ellas eran canadienses.
Lo característico de este incidente es que entre estos dos países no existen relaciones diplomáticas en la actualidad. Sin embargo, el mandatario afirmó que en el Boeing 737 de Ukraine International Airlines (UAI) 138 de los 176 pasajeros hacían escala para volver a Canadá.
La nación que preside Trudeu lleva desde 2012 sin tener vínculos con Irán, a causa del programa nuclear de este último y por su apoyo al Gobierno sirio de Bachar Al Asad. El presidente francés afirmó que el ministro de Exteriores, Francois-Philippe Champagne, llamaría este miércoles a su homólogo iraní, Mohammad Javad Zarif, para subrayar la necesidad de desarrollar una investigación profunda sobre el accidente.
"Canadá es uno de los pocos países con un alto nivel de experiencia cuando se trata de este tipo de accidentes, y por lo tanto, tenemos mucho que aportar", recalcó Trudeau. "Estoy seguro de que en nuestro compromiso a través de nuestro aliados y directamente nos aseguraremos de que somos un contribuyente fundamental a esta investigación", mencionó en una rueda de prensa en Ottawa.
En circunstancias anteriores Italia actuaba como intermediario entre Canadá e Irán, mientras que el embajador de Ucrania confirmó a la Corporación Canadiense de Radiodifusión que desde su gobierno estaban dispuestos a ayudar en lo que fuera necesario.
Una catástrofe para la ciudadanía canadiense
El incidente aéreo ha supuesto un duro golpe para los canadienses, pues se trata de una de las peores tragedias vividas en los últimos años. Mientras tanto, Trudeau no quiso hacer declaraciones sobre las posibles causas que habrían motivado esta catástrofe. "Obviamente estamos en los primeros días de la investigación. Es peligroso especular sobre las posibles causas", recalcó.
La mayoría de las víctimas provenían de la comunidad iraní de Canadá. Entre los muertos había dos profesores de la Universidad de Alberta y una pareja de recién casados que había viajado al país precisamente para contraer matrimonio. El presidente de Canadá tuvo unas palabras para los familiares de los fallecidos: "Vuestra pérdida es indescriptible y se trata de una tragedia desgarradora. Aunque las palabras no borrarán el dolor, quiero que sepáis que tenéis a todo un país con vosotros. Compartimos vuestro dolor".
Trudeau afirmó haber manteniendo conversaciones telefónicas con varios homólogos internacionales, incluido el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, que le expresó sus condolencias.