El nuevo presidente de Guatemala rompe sus relaciones diplomáticas con el gobierno de Maduro
- Al acto de investidura de Giammattei sí asistió una delegación venezolana, pero en representación de Juan Guaidó
- Durante el gobierno de Jimmy Morales ya se solicitó la retirada de la embajadora venezolana por "injerencia"
El recién investido mandatario de Guatemala, Alejandro Giammattei, ha tomado este jueves la decisión de romper todo tipo de relación que le vincule con el gobierno de Nicolás Maduro, además del cierre de su embajada en Venezuela.
Giammattei ha revelado este movimiento en un encuentro con varios medios de comunicación guatemaltecos tras una reunión en el Palacio Nacional de la Cultura con el secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro. En ese encuentro conversaron sobre distintos temas, entre ellos los vínculos que mantenían con el país venezolano.
"Hemos girado órdenes al canciller para que la única persona que queda en la embajada en Venezuela proceda a su retorno y cerramos definitivamente relaciones con el Gobierno de Maduro", ha indicado Giammattei. "Vamos a cerrar la embajada".
Giammattei asumió el poder el pasado martes tras reemplazar en el cargo al mandatario saliente, Jimmy Morales, quien se mantuvo el ejecutivo desde 2016. En el acto de investidura, que tuvo lugar en el Teatro Nacional Miguel Ángel Asturias, sí asistió una delegación venezolana, pero en representación de Juan Guaidó.
El propio Almagro ha dejado claro posteriormente en Twitter que tanto él como Giammattei estaban de acuerdo "en la necesidad de apoyar las acciones" del jefe del Parlamento de Venezuela, en este caso Guaidó -a quien más de 50 países reconocen como presidente encargado-, así como "continuar ejerciendo presión" a Maduro para "lograr la redemocratización del país".
Una decisión de un conflicto antiguo
El nuevo gobernante de Guatemala trató de entrar en Venezuela en octubre de 2019. Sin embargo, las autoridades de ese país no le permitieron el acceso ya que, al parecer, no presentaba "credenciales y documentos de identidad" de su país. El incidente radicaba en que portaba su pasaporte italiano.
"El hecho de que un presidente electo de una República independiente, pretendiese ingresar a otro país bajo una ciudadanía distinta a la del país donde ejercerá la Presidencia, llamó la atención de los funcionarios correspondientes, quienes procedieron a aplicar el protocolo de verificación de identidad", según explicó en octubre la cancillería venezolana.
Giammattei iba acompañado en aquel momento por su secretario privado, Giorgio Bruni, y por el recientemente designado canciller, Pedro Brolo. El viaje, no obstante, no se dio a conocer por los habituales canales de información.
Mucho antes, durante el Gobierno de Jimmy Morales, en mayo de 2018, Guatemala ya solicitó a Venezuela la retirada de su embajadora, Elena Salcedo, por "injerencia" en asuntos internos.
La respuesta desde Venezuela no ha tardado en llegar. Su canciller, Jorge Arreaza, ha lanzado un mensaje claro, afirmando que el Gobierno del nuevo presidente "se convertirá en otro chiste de mal gusto".