Muere Hosni Mubarak, el expresidente egipcio derrocado por la primavera árabe
- Mubarak ha fallecido a los 91 años después de haber permanecido un mes en cuidados intensivos tras una operación
- El expresidente del país gobernó con mano de hierro Egipto durante 30 años hasta que fue derrocado
Hosni Mubarak, el militar que gobernó Egipto con mano de hierro durante 30 años y fue derrocado por su pueblo al calor de la primavera árabe, ha muerto este martes a los 91 años tras haber sido sometido a una operación en el mes de enero por dolencias en su aparato gastrointestinal, ha informado la televisión estatal egipcia.
El canal público ha anunciado la muerte de Mubarak con una breve alerta y sin ofrecer más detalles sobre las causas de su defunción, aunque miembros de su familia y su abogado habían dicho recientemente que el dictador se encontraba en cuidados intensivos en un hospital de las Fuerzas Armadas.
Según fuentes militares consultadas por Reuters, Mubarak será enterrado en un funeral, pero aún no se ha confirmado cuándo tendrá lugar.
Tras conocer la noticia, la presidencia de Egipto ha lamentado a través de su cuenta de Twitter la muerte de Mubarak, al que han calificado como un "líder militar y héroe de guerra" y han ofrecido sus condolencias a la familia. En la misma línea se ha pronunciado un portavoz de las Fuerzas Armadas del país, quien se han referido al dictador como "uno de sus hijos y un líder de guerra".
Por su parte, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha calificado a Mubarak como un líder que trabajaba por la "paz" y la "seguridad". Mientras, el líder palestino, Mahmoud Abbas, ha destacado el compromiso del expresidente egipcio con la causa palestina.
30 años de mandato
Mubarak fue el primer dirigente en ser juzgado tras las revueltas de 2011 y en 2017 fue absuelto de la muerte de manifestantes en las revueltas que pusieron fin a sus 30 años de mandato en Egipto.
Mubarak fue condenado en 2012 a cadena perpetua por conspirar para matar a 239 manifestantes en el marco de las primaveras árabes. Un tribunal ordenó la repetición del juicio y, en 2014, el expresidente logró salir absuelto. Tras el recurso presentado por la Fiscalía, el caso llegó a la máxima instancia de apelaciones de Egipto, que absolvió en 2017 de forma definitiva a Mubarak.
Su puesta en libertad representó para muchos revolucionarios y activistas el final de los intentos de que se hiciera justicia por los abusos y la corrupción durante los 30 años de dictadura (1981-2011) y por la violencia durante la revolución del 25 de enero.
Seis años en prisión
Después de alrededor de seis años en prisión hasta su puesta en libertad, que pasó casi en su mayoría en el hospital debido a su delicado estado de salud, Mubarak llevó una vida muy discreta alejado de los focos de los medios de comunicación, aunque la prensa local consiguió captar alguna imagen del expresidente junto a su familia y, a pesar de su avanzada edad, aparecía sano y sereno.
Su última imagen con vida fue publicada por su nieto, Omar Alaa Mubarak, en la red social Instagram a principios de febrero y en ella aparecía acostado en una cama, con el pelo completamente cano y muy desmejorado.
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