'Entremundos': dobles, superpoderes y mundos paralelos
- Un cómic de ciencia ficción de Eduardo Zaramella, Carlos Bañuelos y Nayla Novotny
Dicen que todos tenemos un doble en alguna parte pero… ¿Y si ese doble estuviera en un mundo paralelo y tuviera superpoderes? Ese es el punto de partida de Entremundos (Entrelíneas Editores) un interesante cómic que se basa en la existencia de un multiverso y las últimas teorías de la física cuántica. Sus autores son los guionistas Eduardo Zaramella y Carlos Bañuelos y la dibujante Nayla Novotny.
Eduardo Zaramella es un guionista con una larga trayectoria (fue cocreador de Al salir de clase) y nos comenta de dónde surgió la idea para la historia: “Carlos y yo somos aficionados, o más bien apasionados, de toda la vida de los cómics. Siempre quisimos, cada uno por su lado, crear una historia y llevarla a cabo. Cuando estaba en el instituto, dibujaba y tenía mi propia editorial amateur, pero con el tiempo me dediqué en exclusiva a la escritura, a nivel profesional. Y de repente leo un libro escrito por los físicos Jean-Pierre y Lucile Garnier-Malet, titulado Cambia tu futuro por las aperturas temporales, donde elaboran su teoría del desdoblamiento del tiempo y el espacio y en donde enseñan cómo contactar con tu doble del futuro, en fin que ese tema me pareció apasionante y tomándolo como punto de partida me puse a esbozar una primera idea. Se la pasé a Carlos y él se puso manos a la obra y así juntos fuimos creando toda la historia. Obviamente, mezclamos muchos otros referentes, del cómic, la literatura o el cine...”
Carlos Bañuelos es un actor y director hispano peruano (Anaconda, El especialista) que reside en España y nos cuenta por qué le interesó el proyecto: “Yo soy coleccionista desde pequeño, de esos que frecuentemente se ven tentados a quemar su coche para comprar un comic con el dinero del seguro (je, je, je). Me inicié como actor, pero luego estudié dirección y guion, y claro, siempre tuve por allí la idea de juntar ambas cosas. Cuando Eduardo me hizo la propuesta, no tardé mucho en decidirme a intentarlo, ya que había muchas historias rondándome la cabeza desde siempre, y el tema de los mundos paralelos, era una de ellas. Claro, no es un tema nuevo, pero sabíamos que hay que darle una vuelta de tuerca, y poner nuestra visión personal. Al fin y al cabo, el mundo ha cambiado mucho desde los tiempos en que Barry Allen cruzó caminos con Jay Garrick, originando las diferentes tierras de la DC...”
La historia
Carlos nos comenta el argumento del cómic: “Hace mucho, mucho tiempo, en lo que ahora es la comarca de Doñana, nacieron un grupo de personas con...mmmm... habilidades especiales. Víctimas de marginación y persecución, se las ingeniaron para anular esas habilidades y así pasar desapercibidas para el resto del mundo. Tanto es así que nuestra historia no las registra”.
“Ahora –añade Carlos-, damos un salto en el tiempo y espacio: estamos en el siglo XXI, pero en un mundo paralelo a la Tierra de nombre Terrax, el cual está a punto de desaparecer. Allí, las élites gobernantes descubren la existencia de esas personas "especiales" (sí, al ser un mundo paralelo, todo tiene su réplica), y la forma de activar su poder. Hecho esto, y gracias a la habilidad de teleportarse que manifiesta una de ellas, descubren casi por casualidad, la existencia de nuestra tierra y elaboran un plan para invadirnos con un ejército de poder sobre-humano. ¿Sus contrapartes terrestres, carentes de "habilidades especiales", podrán hacerles frente? Ese es el "quid" del asunto”.
Eduardo nos presenta a los protagonistas: “Aunque se trata de una historia coral, la protagonista principal es Luxia, una joven "de otro mundo" (el mundo paralelo de la Tierra) que crece sin embargo en este, el nuestro, con su doble a la que toma por su hermana gemela. Es atrevida, valiente y un poco arriesgada en sus decisiones, pero en el fondo se piensa bastante las cosas”.
“Adrián tiene también mucha importancia –continúa Eduardo-; es su amiguito de cuando eran niños, y que no vuelve a ver hasta que ya son adultos, en el presente, lo contamos en el cómic. Y hay más...”.
“También está Balaguer –añade Carlos-, un científico traidor a la causa de las élites de Terrax, que ejercerá como imagen paternal de nuestra protagonista, un enorme mandril cuyas ondas cerebrales están ligadas a un zoólogo limitado físicamente, un robot explorador del espacio con cabeza de ordenador, de nombre Fritz, una comandante suprema al servicio de las Élites aparentemente malvada pero que guarda un gran secreto, y un variopinto cast de personajes que ayudarán a que las diferentes líneas argumentales sean atractivas y tomen al lector por sorpresa”.
Física cuántica, agujeros de gusano…
Sorprende el aspecto científico del cómic, para el que sus autores se han documentado profusamente: “Aparte de lo que hemos contado al principio –asegura Eduardo-, nos encanta todo lo relacionado con la física cuántica, la teoría de las cuerdas, los agujeros de gusano, etc... ¡Yo incluso en una época de mi vida quise ser astrónomo! Sí, hasta que empecé en la Facultad de Físicas y me di cuenta de que era un inútil con las mates así que me cambié por algo más creativo, ja, ja, ja”.
“Pero –añade Eduardo- me sigue apasionando todo lo que tiene que ver con el espacio, los extraterrestres, la mística... Influencias muchas, desde Flash Gordon, a los 4 Fantásticos y en general el Universo Marvel, que es sobre todo con lo que me he criado en este mundo del cómic. El cine también, mucho, desde los clásicos a la ciencia ficción, y la literatura de Clarke, Huxley, etc…”
Una pasión que comparte Carlos: “Me encantan las historias tipo What if (qué hubiera pasado si...). No por nada, Marvel se dispone a producir una serie con ese tema. Es algo que nos preguntamos frecuentemente: ¿Qué hubiera pasado de haber aceptado ese trabajo y no éste? ¿Qué hubiera pasado de haber elegido otra universidad, otra carrera, otra esposa...?”
“También –añade Carlos- tiene mucho de "Efecto mariposa", otro tema que me encanta: ¿Qué hubiera pasado si esta mañana salía de casa 5 minutos más tarde que de costumbre? Quizá nada, o quizá... ¡todo! Lo del mundo paralelo con sus sutiles y grandes diferencias tiene mucho de eso. Recordemos que allí tenemos a nuestro doble, el cuál quizá tomó diferentes decisiones a las nuestras... ¡Tiene miga!”.
¿Un reflejo del mundo actual?
Como todas las buenas historias de ciencia ficción, el cómic refleja problemas actuales como los movimientos migratorios y la diferencia de culturas. “Ya se sabe –nos comenta Eduardo- que el género fantástico es una herramienta maravillosa para contar cosas que nos ocurren todos los días, solo que de una manera metafórica, o incluso, simbólica. Aquí tratamos las enormes diferencias que existen entre Terrax y la Tierra, dos mundos casi idénticos pero en el fondo, muy diferentes. Luxia por ejemplo no deja de ser una refugiada de otro mundo en la Tierra”
¿Y qué mayor movimiento migratorio que el de una humanidad entera que busca la manera de "emigrar" a otro planeta, como única salida para su supervivencia? –añade Eduardo-. De hecho, no tratan de buscar una vida mejor, sino de sobrevivir. Es una lucha por la vida, pero que podría conllevar la muerte de millones. Y eso es lo que nuestros protagonistas deberán evitar”.
“Superman fue el primer superhéroe –interrumpe Carlos-, y un inmigrante venido de otro planeta, creado por inmigrantes judíos (Shuster y Siegel). Eisner (Spirit), Kirby y Simon (Captain America), Kane y Finger (Batman), incluso Stan Lee; son todos inmigrantes judíos, así que el tema de la migración parece que está allí desde el principio. Se aprecia en los antecedentes traumáticos de los personajes y las identidades secretas, algo que está presente en nuestro comic. Dicho esto, me sorprende que Eduardo y yo, no seamos judíos, ja, ja, ja!”.
La imaginación en el cómic no tiene límites
Como os comentábamos ambos vienen del mundo audiovisual, por lo que les preguntamos qué diferencias hay entre trabajar para cine y televisión o para el cómic. “¡El presupuesto! –asegura Carlos- En un comic, da lo mismo dibujar un ataque alienígena con cientos de naves, que a dos tipos en una habitación de hotel. No es lo mismo en la televisión o el cine. Aquí la imaginación del guionista puede volar sin restricciones (que no me escuche Nayla). Por otro lado, hay muchas coincidencias: Este primer arco argumental, que esperamos tenga 12 números, por ejemplo lo veo como la primera temporada de una serie”.
Y Eduardo nos confiesa que: “Nuestra intención es convertir el cómic en una serie de televisión, ya sea de animación o de imagen real. Es algo que nos encantaría y por lo que daremos batalla... así que plataformas, ¡preparaos!”
Pero mientras surge esa posibilidad, continuarán con el cómic: “Tenemos pensado contar esta primera historia en 12 números, y luego todo depende, sobretodo de las ventas, como es lógico –asegura Carlos-. Pero más allá del aspecto económico, supongo que lo que nos mantendrá en ello será nuestra amistad, el deseo de seguir creando, y nuestro amor por el cómic”.
“La idea es seguir explorando el mundo de Entremundos, más allá de estos primeros 12 números, claro que sí –añade Eduardo-. Cuando yo empecé con Al salir de clase, pensamos en 70 capítulos, ¡e hicimos 1199! Más o menos por ahí van los tiros, je,je,je. Así que tranquilos, habrá Entremundos para rato, mientras haya ganas y disposición por parte editorial, y de momento la hay. Debo añadir que hemos encontrado una editorial, Entrelíneas Editores, que han acogido con entusiasmo el proyecto y nos apoyan de manera decisiva. Hacen un trabajo estupendo y las personas que forman el equipo editorial es de una calidad humana y profesional inimaginable. Sin ellos no estaríamos aquí”.
Creando un nuevo universo
La encargada de dibujar las ideas de Carlos y Eduardo es una joven artista argentino-española, Nayla Novotny, que actualmente trabaja en Londres haciendo ilustraciones y cómics, y desarrollando videojuegos concept arts.
Le preguntamos de donde sale el aspecto visual de la historia: “Con este primer cómic, el universo y el contexto de cada mundo es algo que todavía está por explorar. Siempre he estado atraída por la estética futurista y las historias de ciencia ficción, así que podríamos decir que tengo repertorio visual variado. Películas tipo Blade Runner, con esas escenas de colores intensos y saturados, mezclado con influencias de manga en el dinamismo, cómic europeo y animación americana”.
“Me gusta mezclar la expresividad europea y americana con la estética japonesa y planos de cámara de cine independiente –añade-. El cómic es un formato muy bueno para experimentar con la narrativa visual, no hay límites y cada autor puede expresar su visión”.
“El género webcomic coreano también ha sido una influencia grande en mi forma de organizar storyboards; sus encuadres y formatos de planos experimentan con el espacio en blanco, encuadrando no solo la imagen, sino el tiempo entre las escenas. Aún no he podido añadir el tiempo como elemento, ya que estoy limitada en espacio físico al ser un cómic impreso, pero algún día me gustaría poder incluirlo” –concluye-.
Emoción por encima de estética
En cuanto a su estilo e influencias, Nayla nos comenta: “Creo que tener influencias no es suficiente si no sabes asimilarlas y analizarlas para crear tu propio estilo, y me alegro de que estudiar Bellas Artes me haya enseñado a “ver” de verdad a través de estudio de cine, fotografía, tecnología y pintura. Bellas Artes te enseña a ver, pero también a saber analizar a quién mira tu obra y cómo presentar la información”.
“Diría –añade- que mi estilo no pretende imitar al de Marvel, por ejemplo, sino que explora todas las vertientes posibles con la intención de provocar alguna emoción en el lector. Intento elegir emoción por encima de estética”.
Destaca su diseño de los personajes: “Todos los personajes han sido un poco extraños de concebir –confiesa-, ya que no solo estoy creando personajes sino que estoy definiendo dos mundos altamente diferentes en cuanto a avances tecnológicos y experiencias. Deberían de ser diferentes, y a la vez, tampoco pueden destacar demasiado cuando visitan el otro mundo. En un futuro me gustaría poder explorar más esas diferencias y asentar esas vivencias en la forma en la que visten y actúan como sociedades alternativas”.
Por último destacamos su fantástico uso del color. “El color en esta obra es parte de la estética, pero también es una atmósfera -confiesa Nayla-. En el cómic podemos ver una narrativa que mantiene el mismo tono y los mismos tratamientos de color. Esto produce una saturación visual que cuando se rompe consigue una sensación de calma. La saturación de los colores representa esa sensación agresiva de inseguridad, violencia, miedo, adrenalina, confusión… y es todo lo que Luxia experimenta a lo largo de la historia. Así que en este caso, los colores son las emociones de los personajes”.