El grito feminista contra las violaciones y 'manadas' que se convertirá en ley
- El caso de 'La Manada' hizo ver el desdoblamiento entre abuso sexual y agresión sexual y trasladó la preocupación a las calles
- Consignas como "No es abuso, es violación" o "Yo sí te creo" se han convertido en iconos de la lucha contra la violencia sexual
Han pasado más de tres años desde que el caso de La Manada, pero el eco de tantas voces gritando “Yo sí te creo” sigue resonando cada vez que se cuestiona el testimonio de una víctima de violencia sexual, como ocurrió posteriormente con otros casos como el de la violación múltiple de Manresa.
Esa conciencia social se ha medido en las calles, donde en los últimos años se han congregado miles de personas en numerosas ocasiones para protestar contra este tipo de delitos de carácter sexual y también para criticar la doble victimización que sufren las mujeres afectadas.
Sus peticiones han llegado de manera indirecta al Consejo de Ministros, que este martes ha dado luz verde al anteproyecto de Ley Orgánica de Garantía Integral de la Libertad Sexual impulsada por el Ministerio de Igualdad liderado por Irene Montero. El texto plantea una reforma del Código Penal para eliminar la diferencia entre abuso y agresión sexual y pone en el centro de los delitos sexuales el consentimiento expreso de la víctima.
Las calles pidieron una reforma del Código Penal
Antes de que el Supremo dictase sentencia firme por el caso de ‘La Manada’, confirmando que se trató de una violación múltiple -agresión sexual- y no de abusos sexuales en julio de 2019, dos sentencias vinculadas al mismo caso despertaron la indignación entre la ciudadanía.
La sentencia de la Audiencia de Navarra en abril de 2018 primero y la del Tribunal Superior de Justicia de Navarra calificaron los hechos de abusos sexuales al entender que no había existido ni la violencia ni la intimidación que el Código Penal establece para el delito de violación. Todo, a pesar de que se consideró probado que los acusados se habían valido de su superioridad para “acorralar” a la víctima y usarla como “un mero objeto”, penetrándola en repetidas ocasiones.
Fue entonces cuando se abrió con fuerza el debate sobre una posible reforma del Código Penal para tipificar de otro modo los delitos contra la libertad sexual.
La decisión de la Audiencia de Navarra provocó también una ola de indignación en el ámbito político y hubo numerosos líderes de partidos de diferente signo que coincidieron en criticar la sentencia.
Multitud de asociaciones, grupos y fundaciones que defienden los derechos de las mujeres lideraron las protestas y las calles de toda España arroparon a la víctimaacogiendo diferentes manifestaciones que hicieron que frases como “Tranquila, hermana, aquí está tu manada” diesen la vuelta al mundo.
"Yo sí te creo", una consigna icónica en la lucha contra la violencia sexual
También se leyeron infinidad de pancartas con lemas como “No es abuso, es violación” o el simbólico “Yo sí te creo”, una consigna ya icónico en la lucha contra la violencia sexual que ha servido para apoyar a otras víctimas de violencia sexual.
Ocurrió tras conocerse la sentencia que condenó a penas de entre 10 y 12 años de cárcel a cinco hombres por violar por turnos a una menor de 14 años en Manresa (Barcelona) en octubre de 2016.
La Audiencia de Barcelona los condenó por un delito de abuso sexual y no de agresión sexual, lo que nuevamente llevó a miles de personas a concentrarse en más de 40 ciudades españolas para protestar y defender a la menor.
Esta solidaridad con las víctimas de violencia sexual también se percibió en la calle a finales del pasado año mientras se desarrollaba el juicio por el caso Arandina, por el que se ha condenado a 38 años de cárcel a tres exjugadores de ese equipo de fútbol por las supuestas agresiones sexuales contra una menor perpetradas en noviembre de 2017.
La abogada de la joven señaló a los medios que varios grupos que defienden a los exjugadores están “criminalizando a la víctima” desde que se conoció la sentencia, que ha sido recurrida.
Y en Burgos, donde presuntamente se cometió esa agresión, se llevaron a cabo varias manifestaciones en apoyo de la menor en las que se volvieron a leer y escuchar muchas de esas frases que sirvieron para defender a la víctima de ‘La Manada’ y que forman parte de un mismo grito feminista que pide al unísono el fin de la violencia sexual.