Italia suma 756 muertes con coronavirus en 24 horas y registra ya más de 97.000 contagios
El número de fallecidos con coronavirus en Italia volvió a subir, pero el aumento es inferior a días anteriores, pues este domingo ha registrado 756 muertes en las últimas 24 horas, con lo que el total desde que comenzó la pandemia asciende a 10.779, según datos de Protección Civil italiana.
Además, se registró un pequeño aumento de los contagiados y la preocupación se traslada ahora al sur del país, donde el impacto económico puede ser más grave y terreno fértil para las mafias.
El número total de personas infectadas actualmente son 73.880 y la cifra total de contagios desde que se inició la pandemia en el país transalpino el pasado 20 de febrero asciende a los 97.689 casos positivos.
En cuanto a los nuevos casos, el número de positivos ha aumentado en 3.851, 164 contagios más que este sábado, con lo que se rompe la tendencia de los últimos días cuando cada día se registraba menos positivos que el día anterior.
De los contagiados, 27.386 están ingresados en hospitales y 3.906 se encuentran en las UCI, mientras que 42.588 permanecen en aislamiento domiciliario, lo que supone el 58% del total de pacientes positivos. En cuanto a las altas médicas, hasta el momento se han curado 13.030 personas, 646 en el último día.
Hasta el momento, se han realizado 454.030 tests de coronavirus en Italia.
Mejora la situación en Lombardía
Y aunque Lombardía sigue siendo la región más afectada por el Covid-19, con más casos y más muertos con diferencia con respecto a otras regiones italianas, este domingo se ha producido un descenso de nuevos casos: 1.592 frente a los 2.117 de este sábado. El total asciende a 41.007 afectados en esta región italiana.
En cuanto a los fallecidos, de los 756 registrados en las últimas 24 horas en todo el país, 416 se ha contabilizado en esta región del norte de Italia, dato inferior al sábado y al del viernes. En total, se han registrado aquí 6.360 muertos con coronavirus.
"O estamos en lo más alto de la curva o estamos muy cerca. Por tercer día consecutivo, los números permanecieron constantes. Ya no vemos el crecimiento que nos ha acompañado en las últimas semanas", ha declarado el presidente de la región de Lombardía, Attilio Fontana. "No quiero decirlo en voz alta, pero ahora mismo tengo una esperanza más", ha añadido.
Preocupa la situación en el sur
La preocupación del Gobierno tras la alarma de algunos regidores se centra en el impacto económico que la pandemia está teniendo en el país y sobre todo la atención está en el sur.
"Tengo miedo de que las preocupaciones de amplias franjas de la población por la salud, la renta y el futuro, conforme se alargue la crisis se transformen en rabia y en odio. Hay áreas sociales y territorios frágiles", había advirtió el ministro para el Sur, Peppe Provenzano, en un entrevista.
Pocas horas después, el presidente del Gobierno italiano, Giuseppe Conte, anunciaba que anticiparía 4.300 millones de euros del fondo de solidaridad a los ayuntamientos y destinará otros 400 millones para que los municipios los dediquen a ayudar con vales de compra a las personas que debido a la pandemia están sufriendo problemas económicos.
El presidente de la región de Sicilia, Nello Musumeci, aseguró después de que se produjo un caso de un asalto a un supermercado que "no se están produciendo episodios de violencia generalizada", pero que después de que cientos de empresas, con trabajadores con contratos precarios, se han cerrado, es necesario "desactivar esta bomba".
"Hay una emergencia social, hay focos de sufrimiento con el riesgo de que la incomodidad se convierta en ira y la ira se convierta en violencia", afirmó por su parte el alcalde de Palermo, la capital siciliana, Leoluca Orlando.
El alcalde recordó que en los últimos días las familias pobres asistidas por la administración han pasado de 600 a 2200. "Es necesario que estos fondos se distribuyan inmediatamente a los municipios para no dejar a los alcaldes solos para enfrentar esta emergencia social", agregó.
Por su parte, el presidente de la región de Campania, cuya capital es Nápoles, Vicenzo De Luca, expresó en una carta a Conte que "se esperan una mayor contribución" porque "es indispensable conceder ayudas a los ciudadanos en dificultad y a los sectores a los que el prolongarse de la crisis pesa de manera dramática". "A veces se trata sólo de garantizar el pan a esta pobre gente", dijo De Luca.
Los 400 millones serán repartidos en vales de compra de 25 euros en alimentos entre las personas que lo pedirán a las diferentes asociaciones que se ocupan de solidaridad.