La pista de hielo de Majadahonda se habilita como tercera morgue para los muertos por coronavirus

• El alcalde de Madrid plantea incinerar a los difuntos fuera de Madrid con el consentimiento de las familias
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Pista de hielo de Majadahonda cerrada al público.

La pista de hielo de Majadahonda se pone a disposición de las autoridades sanitarias para acoger fallecidos por el coronavirus, según ha informado la Comunidad de Madrid que está trabajando con el ayuntamiento de la localidad.

Este recinto sería la tercera morgue que se habilita con tal fin en la región después del Palacio de Hielo de Madrid y del edificio ubicado en la futura Ciudad de la Justicia. El alcalde de Majadahonda, José Luis Álvarez Ustarroz, ha indicado que "nos encontramos en una situación absolutamente extraordinaria" y que en los próximos días podrá empezar a funcionar.

Añade que esta instalación puede ser últil por sus "grandes dimensiones" y puede ser acondicionada como morgue ya que "se trata de facilitar la labor de los servicios funerarios, mitigar el dolor de las familias y la situación de los hospitales de la región".

La pista de hielo de Majadahonda es una infraestructura acondicionada, frente al Hospital Universitario Puerta de Hierro, que cuenta con una superficie de 1.800 metros cuadrados. El espacio se va a adaptar, de forma temporal y extraordinaria, para acoger a estas víctimas del COVID-19.

En la Comunidad de Madrid han muerto 4.483 personas por coronavirus, 308 en las últimas 24 horas. Según los datos ofrecidos este viernes por el Ministerio de Sanidad, los casos ascienden a 34.188, es decir, 2.033 contagiados más que ayer (6,33 %); los curados suben a 13.850, 1.450 altas más, un 11,69 %; y los ingresos en UCI bajan por primera vez, con 22 personas menos (1,43%) respecto al jueves.

Almeida se plantea trasladar a los difuntos

El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha manifestado su intención de llegar a "acuerdos con funerarias de otras provincias" para que, "en el caso de que haya un posible desborde" de la funeraria municipal, pueda darse "una respuesta en un tiempo razonable a las personas que han perdido a sus seres queridos".

En una visita a las instalaciones de la Empresa Municipal de Servicios Funerarios, ha subrayado que si bien "todavía no se ha producido" dicha saturación, espera poder contar con la posibilidad de trasladar los difuntos, con el "previo consentimiento" de las familias, a las provincias colindantes. En esos casos los fallecidos serían incinerados "con todas las garantías" y luego se devolverían sus restos a los familiares.

El regidor ha subrayado que la funeraria municipal ofrece "el triple de servicios que ordinariamente", hasta 150 diarios, y "aquellos que pierden a sus seres queridos" pueden inhumarlos o incinerarlos "en apenas dos días". Ha destacado el "esfuerzo logístico", así como "la sensibilidad y la humanidad" de sus trabajadores, a quienes ha agradecido su "extraordinaria" labor en estos momentos "tan dramáticos y tan difíciles".