La cancelación de las procesiones pone en jaque al sector del arte sacro: "Si dura mucho más iremos a la quiebra"

• El 60% de las empresas que se dedican a esta industria artesana en Andalucía han presentado un ERTE
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Los talleres de arte sacro de Sevilla sufren las cancelaciones de Semana Santa por el coronavirus

El estado de alarma sorprendió a orfebres, bordadores, escultores, pintores y cereros con trabajos terminados a medio cobrar o con trabajos en marcha. Sus talleres ahora están cerrados. El tipo de tareas que realizan les impide guardar la distancia de seguridad. Son artesanos de Semana Santa como Francisco Carrera que preside la asociación gremial de arte sacro de Sevilla. "El 60 por ciento de los artesanos teníamos empleados. Hemos presentado un ERTE pero todavía no nos han contestado", cuenta.

Ésta es su temporada por excelencia. Sus clientes son las hermandades que este año tienen menos ingresos ya que no podrán cobrar el alquiler de sillas en la carrera oficial y algunas tampoco han recibido el donativo de las papeletas de sitio, de la salida en procesión. "Esta situación la podremos aguantar un mes o dos meses. Pero si dura mucho más, tendremos que irnos a la quiebra" confiesa José Ramón Paleteiro al que encontramos entre puntadas, confinado.

Este bordador sevillano le pone palabras al drama de muchos. Con el taller cerrado, su negocio es insostenible. "De aquí al día 20 tenemos que pagar el IVA , tenemos que pagar el IRPF... Si a nosotros no nos entra dinero, ¿Cómo lo vamos a pagar?", se pregunta el artesano, Francisco Carrera.

Sus reivindicaciones

El sector pide al gobierno una especial protección porque se calcula que en Sevilla viven unas 700 familias de estas actividades artísticas y artesanales vinculadas a la Semana Santa. Familias como la de María de la O Domínguez que regenta 'La Casa del Nazareno'. Hace un año, por estas fechas, no se podía ni entrar de lo lleno que estaba su establecimiento. Hoy no visten nazarenos pero hacen lo que pueden para plantarle cara al virus. "Con los medios que tenemos y con los utensilios de las túnicas y demás, llevamos repartidas más de 800 mascarillas", explica a RTVE.es.

Sin actividad están, sólo en la capital hispalense, un centenar de empresas que viven de las cofradías. Los trabajos de este año están listos aunque algunos no han llegado a entregarse. Desde el agobio que supone no haber podido cobrar en esta Semana Santa, los artesanos ya piensan en próximas entregas, en abrir sus talleres, en seguir creando porque imagineros, orfebres, modistas, bordadores cobran sobre todo ahora pero trabajan todo el año.