Italia registra el mayor número de altas desde que empezó la crisis por el coronavirus

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Una trabajadora recolecta tulipanes en un campo de cultivo en Arese, cerca de Milán.

Italia llega a los días principales de la Semana Santa batiendo una marca positiva en su lucha contra la COVID-19. Este Miércoles Santo ha registrado, por segundo día consecutivo su mayor cifra de recuperados en las últimas 24 horas, con 2.099 altas, desde que estalló el brote del coronavirus SARS-CoV-2 a finales del mes de febrero, y lo ha hecho superando con holgura las 1.555 altas del martes.

En total, ya han superado la enfermedad 26.491 personas en Italia, aunque ello solo suponga el 19% de todos los casos. Según el jefe de Protección Civil, Angelo Borrelli, en los últimos diez días se han registrado "casi el 50 por ciento" de los pacientes curados desde el inicio de la pandemia.

Además, continúa la tendencia a la baja de los fallecimientos diarios. Aunque la tragedia continúa y son ya 17.669 las personas muertas con coronavirus en Italia, esta jornada la cifra de nuevos decesos ha sido de 542, cuando el martes, en uno de los días menos malos en este aspecto, fueron 604 los fallecimientos. Sin embargo, como recuerdan las autoridades, Italia sigue siendo el país del mundo con más fallecidos con COVID-19.

En total, el acumulado de casos de coronavirus en Italia es de 139.422, entre casos activos, recuperados y fallecidos, el tercer mayor registro dle mundo, por detrás de Estados Unidos e Italia. Pese al lado positivo de los anteriores datos, este miércoles se ha producido un crecimiento de casos nuevos (3.836 por los 3.039 del día anterior), del que destaca el aumento de los contagios activos (1.195 en las últimas 24 horas, por los 880 de la víspera).

Siguen bajando los pacientes en cuidados intensivos

De entre los casos activos, 32.178 (uno de cada tres) están hospitalizados, de los cuales 3.693 están en cuidados intensivos, 99 menos que la víspera, lo que supone el quinto día consecutivo de descenso diario, lo que alimenta las esperanzas de que el confinamiento decretado hace casi un mes en Italia, el pasado 9 de marzo, ha surtido efecto. El resto de los contagiados, 63.084, pasan la enfermedad en aislamiento domiciliario.

Protección Civil ha informado de que se han realizado hasta la fecha en Italia 807.125 test diagnósticos, 51.000 de ellos en las últimas 24 horas.

Hacia la "fase 2", la reapertura gradual

Ante la mejora de la situación y la contención de la epidemia, el Gobierno estudia cómo y cuándo dar paso a la esperada "fase 2", es decir, la vuelta gradual, y muy lenta, a la vida normal, una fase que no tiene fecha y que no será inmediata, pese a las expectativas de la población.

"Abrir o pensar en abrir en esta etapa es bastante difícil, no estamos en una disminución neta sino en una desaceleración en la velocidad (de propagación)", ha advertido el subdirector de la OMS, Ranieri Guerra. "Hay un reservorio de asintomáticos que continúa propiciando la circulación del virus", ha añadido. "No creo que el gobierno italiano quiera reabrir sin pensar en este riesgo".

Hasta el próximo 13 de abril, que en Italia es festivo y pone fin a la Semana Santa, está en vigor el actual decreto por el que están paradas todas las actividades productivas excepto las esenciales, cerrado el comercio no esencial y prohibidos todos los desplazamientos de personas si no es por motivos de urgencia o necesidad.

Según los medios italianos, la operación de "reapertura" gradual tendría dos etapas: a partir del día 14 se abrirán algunas empresas, pero los ciudadanos en general y el comercio no esencial tendrán que esperar al 4 de mayo, es decir, después del puente del Día del Trabajo. Y aun entonces, los hábitos cotidianos no serán como antes, y por ejemplo se impondrá el uso generalizado de mascarillas y el mantenimiento de distancias de seguridad entre la gente.

Reinicio de algunas actividades

El primer ministro, Giuseppe Conte, ha señalado en una reunión con el Comité Científico Técnico que asesora al Gobierno que "el cuidado de la salud está en el primer puesto, pero los motores del país no pueden estar apagados demasiado tiempo". Por ello, las esperanzas están puestas en que el próximo decreto de vía libre a la reapertura de algunas actividades.

Los expertos del Comité Científico Técnico estarían diseñando un mapa que incluiría tres índices de riesgo diferentes -bajo, medio y alto- de las diferentes actividades y profesiones, con sus correspondientes medidas de protección y distanciamiento social.

Desde el sector empresarial se presiona para que se pueda retomar la actividad. La Confindustria de Lombardía, Emilia Romagna, Piamonte y Véneto, las cuatro regiones principales del norte, y las más afectadas por la expansión del coronavirus, pero que también representan el 45% del PIB italiano, han firmado una agenda para la reapertura de empresas y la defensa de los puestos de trabajo. Afirman que si no se vuelve a funcionar a "corto plazo", el país corre el riesgo de apagar definitivamente su motor.

Y Confcooperative, una de las principales asociaciones de cooperativas del país, ha advertido de que un millón de pequeñas y medianas empresas de Italia corren el riesgo de quebrar como consecuencia de las medidas de confinamiento "con consecuencias indescriptibles en términos de facturación y empleo".

Mientras, el Gobierno italiano ha declarado que sus puertos no son seguros para el desembarco de migrantes rescatados en el Mediterráneo central por barcos de las ONG debido a la pandemia del coronavirus. La decisión se ha tomado después de recibir y rechazar una petición para desembarcar del barco Alan Kurdi de la ONG alemana Sea Eye, con 150 inmigrantes rescatados en el Mediterráneo.