Cerca de 170 cruceristas españoles desembarcan en Barcelona tras más de un mes sin tocar tierra por el Covid-19

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Cerca de 170 turistas españoles desembarcan de un crucero en Barcelona tras más de un mes sin tocar tierra

El Gobierno ha facilitado este lunes el desembarco de 168 españoles y de otros pasajeros europeos que llevaban navegando en un crucero desde el mes de enero y que, debido a las severas restricciones por la pandemia de coronavirus han estado confinados en la embarcación.

La operación, que ha comenzado desde primera hora de esta mañana en el Puerto de Barcelona, gracias a una autorización especial del Ministerio de Sanidad que exceptúa al buque de la prohibición general de atraque en puertos españoles, ha facilitado que los españoles puedan regresar a sus domicilios, de los que salieron a principios de año para disfrutar de un crucero cuyo destino final era Venecia.

El desembarco de los españoles, que no han podido tocar tierra desde el pasado 14 de marzo, va acompañado, además, por el de pasajeros de otras nacionalidades, a los que se les ha ofrecido todas las posibilidades y para los que se han dispuesto diversos medios de transporte para poder llegar a sus respectivos países desde el propio puerto marítimo hasta su destino final si lo desean.

La operación va acompañada de los preceptivos controles sanitarios para garantizar el desembarco de cada una de las personas que bajan en el Puerto de Barcelona. El resto del pasaje seguirá rumbo hacia Génova.

"Una experiencia increíble"

La compañía italiana de cruceros 'Costa Crociere' ha informado en un comunicado de que el barco Deliziosa, que zarpó con 1.831 pasajeros y 898 miembros de la tripulación, ha llegado al Mediterráneo occidental sin casos de COVID-19 a bordo.

"Estar semanas a bordo del crucero durante la pandemia no ha sido una experiencia surrealista, sino increíble. Las noticias que llegaban del país nos preocupaban y afligían bastante, para nosotros fue un golpe de buena suerte estar donde estuvimos " ha declarado el pasajero Carlos Payá que viaja con su mujer en un mensaje de texto a la agencia The Associated Press

“Para nosotros fue un golpe de suerte estar donde estábamos. Desde Perth (Australia) dado el crecimiento de la pandemia, y por supuesto para aquellos de nosotros que tenemos hijos en España, hubiéramos preferido regresar” ha agregado Payá, aunque para otros pasajeros no era lo más adecuado, ha añadido “otros, dada su vejez, querían permanecer a bordo sabiendo que el barco estaba a salvo y seguro “.

Los pasajeros han afirmado que los puertos de Omán, a lo largo del Canal de Suez, así como los de los puertos de Seychelles y del Océano Índico, se negaron a dejar que el barco atracara. Tampoco permitió Francia que 400 de sus ciudadanos desembarcara en el puerto de Marsella, lo que les “encolerizó” ya que tendrán que volver a sus casas desde Génova.

Colaboración con otros países europeos

El 'Deliziosa' tenía programado desembarcar en un principio el 26 de abril en Venecia. Después de la alerta de pandemia de la Organización Mundial de la Salud en marzo, el crucero, que había hecho un llamado a puerto en Fremantle, Australia, sólo pudo realizar desembarcos por cuestiones técnicas y para recargar combustible, antes de regresar por el Mediterráneo.

Así, en el operativo del desembarco, en el que han participado el Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación; el de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana; el de Interior, y el de Sanidad, ha puesto de manifiesto la estrecha colaboración con los diferentes países europeos implicados para facilitar el retorno de sus respectivos ciudadanos.

Además, cuenta con la participación de la Delegación del Gobierno en Cataluña, en contacto permanente con todos los implicados. En este sentido, el subdelegado del Gobierno en Barcelona, Carlos Prieto, sigue el dispositivo desde el Puerto de Barcelona para cerciorarse de su correcto desarrollo y seguir ofreciendo la colaboración de la Delegación del Gobierno en Cataluña en todo lo que se considere oportuno.