¿Qué tipos de mascarillas hay y quiénes tienen que utilizarlas?

• El filtro de las mascarillas FFP2 es un 6% inferior al de las FFP3 aunque "sigue siendo eficaz", según Fernando Simón
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Una joven cubre su boca y nariz con una mascarilla quirúrgica.

El uso de la mascarilla se ha vuelto indispensable para limitar y reducir el contagio del coronavirus. Con la última intervención de Fernando Simón, las FFP3 se han popularizado hasta el punto de que se han agotado en muchas farmacias. Sin embargo, existen otras mascarillas que, aunque sean menos eficaces, siguen siendo una opción válida y "sobradamente eficaz" según el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias.

Las FFP3 se utilizan en la actualidad en los hospitales o centros de salud donde los sanitarios están más expuestos al coronavirus. Es decir, se utilizan en el trato directo con pacientes infectados de coronavirus para garantizar la máxima protección posible. Aún así, las mascarillas FFP2 también se usan en centros sanitarios dado que la efectividad de las mismas es similar al modelo superior.

La FFP2 sigue siendo eficaz

La diferencia entre las mascarillas FFP2 y las FFP3 está en su capacidad de filtración. Las primeras son un 92% eficaces mientras que las FFP3 garantizan seis puntos más. Sin embargo, los expertos mantienen que todas las mascarillas con una eficacia de filtración superior al 90% ofrecen una seguridad óptima tanto en espacios cerrados como al aire libre.

Las mascarillas FFP2, así como las FFP3, tienen un tiempo de uso recomendable de ocho horas. Cuanto mayor sea el tiempo de uso o exposición, la capacidad de filtrado de esta mascarilla disminuye hasta el punto de no garantizar una protección correcta.

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Aunque el precio de las mascarillas quirúrgicas está regulado en España, las mascarillas FFP2 y las FFP3 no están sujetas a un precio regulado de venta al público. Por eso, dependiendo del fabricante o de la cantidad de mascarillas que incluya el lote, el coste de estas mascarillas oscila entre los dos y los seis euros.

Otros tipos de mascarilla

En líneas generales, existen tres tipos predominantes: higiénicas, quirúrgicas y filtrantes. Además, Fernando Simón ha recomendado evitar el uso de mascarillas caseras si no se garantiza que el material utilizado sea el adecuado para que sea efectiva. Estas son las características que cumplen con los estándares mínimos para que sean válidas:

[Cómo colocar, retirar y desechar las mascarillas higiénicas

Mascarillas higiénicas: también conocidas como "de barrera", son las que menor protección ofrecen. También son las más comunes y baratas, y están destinadas a personas sin síntomas que no sean susceptibles de utilizar mascarillas quirúrgicas o filtrantes. Dentro de esta categoría hay a su vez dos tipos: mascarillas higiénicas no reutilizables, de un solo uso, y mascarillas higiénicas reutilizables, que están fabricadas con materiales específicos que permiten su reutilización, una vez lavadas y desinfectadas. No obstante, estas últimas pueden perder propiedades con el tiempo o si se reutilizan en exceso.

Las mascarillas higiénicas forman parte de la nueva categoría que el Gobierno ha autorizado recientemente. La Asociación Española de Normalización publicó la especificación UNE 0064, que establece los requisitos mínimos que deben cumplir estas protecciones en cuanto a los materiales que se utilizan para su elaboración, marcado y uso.

Mascarilla higiénica.

Mascarillas quirúrgicas: ofrecen un nivel de protección mayor y, como su propio nombre indica, son las que se utilizan en cirugías y otros procedimientos sanitarios. Igual que ocurre con las mascarillas higiénicas, protegen más al resto que a quien la lleva puesta, sobre todo al estornudar o toser, pues evitan la emisión de gotículas respiratorias que transporten posibles virus. Son las únicas que tiene precio máximo de venta al público (0,96 euros IVA incluido).

Mascarillas quirúrgicas.

Mascarillas filtrantes (también llamadas autofiltrantes): son las que mayor nivel de protección ofrecen a quien la lleva. Contienen un filtro de micropartículas cuya finalidad es proteger al usuario frente a la inhalación de contaminantes ambientales, en este caso del agente patógeno.

En función de su grado de protección, las mascarillas autofiltrantes se clasifican en tres tipos:

- FFP1 (filtro de partículas tipo P1): tienen una eficacia de filtración mínima del 78% y un porcentaje de fuga hacia el interior máximo del 22%. Suelen emplearse frente a partículas de material inerte, y sus aplicaciones más comunes están relacionadas con industriales textiles, mineras, de la construcción, madereras...

Mascarilla FFP1. 3M

- FFP2 (filtro de partículas tipo P2): tienen una eficacia de filtración mínima del 92% y un porcentaje de fuga hacia el interior máximo del 8%. Se utilizan frente a aerosoles de baja o moderada toxicidad.

Mascarilla FFP2. 3M

- FFP3 (filtro de partículas tipo P3): tienen una eficacia de filtración mínima del 98% y un porcentaje de fuga hacia el interior máximo del 2%. Se utilizan frente a aerosoles de alta toxicidad.

Mascarilla FFP3. 3M

¿Son reutilizables?

En general, las mascarillas quirúrgicas y las filtrantes deben ser desechadas tras su utilización, debido a que no es posible mantenerlas en buenas condiciones higiénicas más allá de unas pocas horas de uso. Cada vez que se manipula o se retira de la cara con las manos se expone el filtro al virus.

Las mascarillas higiénicas reutilizables, fabricadas con materiales específicos, pueden ser reutilizadas una vez lavadas y desinfectadas. Para este tipo de mascarillas la guía de Sanidad recomienda dos métodos de desinfección. El primero es lavar en la lavadora con detergente normal y agua a temperatura de entre 60 y 90 grados. El segundo consiste en sumergir las mascarillas en una dilución de lejía 1:50 (una parte de lejía por 50 de agua: 20 ml de lejía por 980 ml de agua) con agua tibia durante 30 minutos. Después se recomienda volver a lavar con agua y jabón para eliminar cualquier resto de lejía.

¿Para qué sirve la válvula que llevan algunas mascarillas filtrantes?

Las mascarillas filtrantes pueden tener o no una válvula de exhalación para reducir la humedad dentro de la mascarilla y proporcionar una mayor comodidad al usuario, aunque en ningún caso influye en el nivel de seguridad, ya que la capacidad de filtrado es la misma.

Las mascarillas con válvula no deben utilizarse en ambientes estériles, especialmente si se puede estar contagiado de coronavirus. Ante cualquier duda al respecto, es preferible que se utilicen máscaras sin válvula.

La mascarilla, obligatoria por el momento

Aunque en un principio el uso de la mascarilla fue una recomendación, el avance de la pandemia ha forzado a que su uso sea obligatorio. El Ejecutivo publicó una Orden en el BOE que regulaba su uso para minimizar los riegos de la población tanto en espacios cerrados -públicos o privados-, como en la vía pública.

Todas las personas estarán obligadas a llevarla a partir de los seis años de edad, aunque recomienda también llevarla puesta a partir de los tres años. Asimismo, se exime de su uso a las personas que tengan algún tipo de dificultad respiratoria o enfermedad que se pueda ver agravada con el uso de una mascarilla. La policía o las fuerzas del orden podrán pedir la documentación que pruebe por qué no se lleva la mascarilla puesta.

El texto publicado en mayo del año pasado también exime de llevar puesta la mascarilla cuando se esté comiendo o tomando una bebida, aunque se deba volver a colocar en su posición correcta al haber terminado la ingesta. No obstante, las comunidades autónomas o los municipios pueden haber endurecido las medidas del uso de la mascarilla en entornos como las terrazas de un bar, por ejemplo.