Melilla lucha contra la brecha digital con tablets para los estudiantes sin recursos
- Entre el 30 y el 35% del alumnado melillense no puede seguir las clases a distancia por falta de medios
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La Dirección Provincial del Ministerio de Educación en Melilla y la Consejería del ramo han firmado un convenio de colaboración para repartir 95 tablets y 499 tarjetas SIM a estudiantes con dificultad para acceder a material tecnológico.
El objetivo es que la crisis sanitaria provocada por el COVID-19 no se cebe con el alumnado más vulnerable, en una ciudad en la que se estima que entre el 30 y el 35% del alumnado no cuenta con las herramientas digitales adecuadas acceder a la educación a distancia.
“Ningún estudiante debe quedarse descolgado del sistema”, ha recordado la consejera de Educación, Elena Fernández Treviño.
Para facilitar el acceso a las clases ‘online’, el área de Educación ha cedido 85 tablets y 499 tarjetas de datos en calidad de préstamo. A esta cantidad se le va a sumar un total de 10 tablets que ha prestado la Consejería de Admistraciones Públicas de la Ciudad Autónoma.
Reparto de tablets y tarjetas de datos
Asimismo, la Dirección Provincial de Educación va a ser la encargada de determinar cómo se va a proceder al reparto del material. Su máximo responsable, Juan Ángel Berbel, ha explicado que se va a dar prioridad al alumnado con unas necesidades “más acuciantes”.
También se va a tener en cuenta el rendimiento académico y el nivel en el que el alumno se encuentre matriculado. Todo ello se está haciendo con el apoyo de los equipos directivos de los centros, que están elaborando un listado con el nombre de las familias receptoras de esta ayuda.
Por su parte, la Federación de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos de Melilla (FAMPA) considera que la cantidad anunciada no es suficiente en una ciudad tan marcada por la desigualdad a nivel tecnológico.
Además, muchas familias no sólo se enfrentan a la brecha digital, sino también a la socio-cultural. “Aquí muchos de los padres no manejan el castellano o no lo hablan perfectamente, por lo que es otro hándicap a añadir a la problemática actual”, ha puntualizado Guillermo López, presidente de la FAMPA.