La conciliación asimétrica de la vuelta al cole: "Hay que pensar en las familias con hijos mayores de seis años"

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Aula vacia en Villanueva del Río Segura, Murcia, con la fecha de la última clase en la pizarra: 13 de marzo.

El 25 de mayo es la fecha en la que se inicia la fase 2 en aquellas provincias o islas que hayan superado las etapas precedentes. Con vista a ese día trabajan ya centros educativos y universidades: hay que desinfectar y acomodar las instalaciones para el trabajo de profesores, administrativos y personal auxiliar.

La docencia presencial de este curso ha concluido salvo tres excepciones: niños del ciclo de infantil (hasta 6 años) cuyos padres no puedan teletrabajar; clases voluntarias para alumnos de 4º de ESO, 2º de Bachillerato y de FP Media y Superior y último curso de Enseñanzas de régimen especial; y actividades de recuperación para alumnos en situación vulnerable. Todo, con un aforo máximo de 15 alumnos por clase.

¿Cómo se organizará esta pequeña vuelta al cole? La comunidad educativa coincide en que hay que trabajar los detalles entre Sanidad, Educación y las consejerías de Educación de cada autonomía. La Consejería de Educación de la Comunidad de Murcia ha emitido un comunicado tachando el plan de desescalada como “discriminatorio tanto para el alumnado como para el profesorado”, ya que “no se entiende por qué un alumno de 5 años sí puede asistir y uno de siete, no”.

La casuística –como dijo Pedro Sánchez- es numerosa, pero sobre todo depende de la necesidad de trabajo presencial que los padres tengan según avancen las fases. Las situaciones problemáticas están ahí: desde padres que pueden dejar a su hijo de 6 y no a su hermano de 7, hasta qué hacer con hijos de los propios profesores, obligados ahora a trabajar en los centros.

¿Por qué solo reabre el ciclo de infantil (hasta 6 años, un ciclo educativo no obligatorio)? Se trata, indican desde Educación, del grupo menos numeroso. Son 1,6 millones de alumnos, si bien las clases tienen un máximo de 25 alumnos (ampliables a veces en 3 más) y ahora el máximo sería de 15 niños. Es una cifra sensiblemente inferior a los tres millones de Primaria y los 2,5 millones de Secundaria.

Familias: buscar la plaza o adaptarse durante un mes más

Para las familias que quieran que su hijo vuelva el 25 de mayo hay un punto principal: la limitación de aforo a 15 alumnos. ¿Qué criterio se aplicará si hay más demanda? Las llamadas de padres a los centros educativos todavía no encuentran respuesta. Lo único que se conoce es que los “los progenitores tienen que acreditar que realizan un trabajo presencial sin posibilidad de flexibilización”, según comunicó el Gobierno.

“No entendemos este punto, ya que el mismo problema para compatibilizar el cuidado con la vuelta al trabajo presencial también lo sufre una familia con hijos mayores de seis años”, sostiene Leticia Cardenal, presidenta de la Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres del Alumnado (CEAPA).

Cardenal reclama no limitar las medidas de conciliación a la educación infantil y pide su ampliación al alumnado de primaria y primeros cursos de secundaria. “Será necesario facilitar medidas de conciliación pensando en todo el alumnado. Y aunque en Secundaria gozan de mayor autonomía, hay que tener en cuenta que los menores de 12 a 14 también necesitan estar atendidos mientras su familia trabaja”.

Pero precisamente el volumen de alumnos es la principal razón de esta pequeña desescalada, que tiene mucho de ensayo para una vuelta presencial en septiembre llena de incógnitas. “La desescalada de la vuelta al cole de los niños me parece bastante acertada”, opina en TVE Quique Bassat, pediatra y epidemiólogo. “Se respeta la opinión mayoritaria de los expertos de que la vuelta tiene que ser en septiembre”.

Las mañanas de RNE con Íñigo Alfonso - La educación especial, un problema añadido en esta crisis sanitaria - Escuchar ahora

Colegios: garantizar la seguridad y doble carga para el profesorado que regresa

Los colegios, cuyos profesionales han pasado el estado de alarma teletrabajando en las clases telemáticas, apuntan -además de la cuestión de garantizar la seguridad de alumnos y profesores- a la doble ocupación del profesorado. “Es un problema organizar actividades lectivas de refuerzo y teletrabajo al mismo tiempo”, afirma Esteban Álvarez, vicepresidente de directores de colegios de Madrid.

Los sindicatos insisten en que la seguridad es lo primero. “La decisión siempre tiene que estar supeditada a garantizar la seguridad y salud tanto de profesores como alumnado y habrá que dotar con equipos de protección individual, garantizar distancias, etc.”, señala Francisco García, de la Federación de Enseñanza de CC.OO.

Profesores de infantil consultados por RTVE.es coinciden: está todo en el aire. “Todo lo que sabemos por ahora es por las noticias”, explica una profesora de infantil que se pregunta, quizá, el principal reto todavía por diseñar: “¿Cómo puedo mantener las distancias de niños y que no compartan juegos y, por tanto, el virus?”.