Francia supera los 25.000 muertos con coronavirus mientras su Senado rechaza el plan de desescalada

• El 'no' de la Cámara Alta no detiene la agenda del Gobierno, que sufre desgaste por la gestión de la crisis
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El centro de París, este lunes

La pandemia de coronavirus deja ya más 25.000 muertos con esa enfermedad en Francia, donde el Senado ha rechazado de forma simbólica el plan de desescalada del Gobierno.

La votación de este lunes en la Cámara Alta no tiene un efecto práctico, aunque refleja el desgaste del Ejecutivo en esta crisis en un momento en el que la situación sanitaria va mejorando.

En esta jornada, las autoridades han informado de que se han alcanzado los 25.201 fallecidos con diagnóstico confirmado de COVID-19 desde el 1 de marzo, 306 de los cuales en las últimas 24 horas.

El país ha entrado en su última semana de cuarentena estricta (iniciada el 17 de marzo) con más de 130.000 casos confirmados. A partir del 11 de mayo está prevista el desconfinamiento progresivo de la población, en un plan que chocó este día con la oposición de los senadores.

El partido gubernamental, La República en Marcha (LREM), solo tiene 23 escaños en el Senado y esa debilidad quedó en evidencia en el resultado final que fue de 81 votos a favor, 89 en contra y 174 abstenciones, informa Efe.

Con todo, la agenda no se va a ver afectada. En la Asamblea Nacional, donde la LREM se impone con 297 de los 577 diputados, esa hoja de ruta sí obtuvo el pasado martes un respaldo mayoritario con 368 votos a favor, 100 en contra y 103 abstenciones.

"Ya no podemos seguir creyendo en vuestra palabra porque esta ha caído en muchas contradicciones", le ha dicho al primer ministro, Édouard Philippe, el jefe de filas del partido conservador Los Republicanos, Bruno Retailleau.

El presidente, Emmanuel Macron, había subrayado este lunes que la desescalada debe llevarse a cabo con mucha organización, tranquilidad, "pragmatismo y buena voluntad", y Philippe profundizó en esa consigna alegando que Francia se encuentra en un "momento crítico", siempre según la misma agencia.

Los test, las clases y las mascarillas

"El éxito de la desescalada se basa en nuestra capacidad para hacer test y aislar a las personas enfermas de COVID-19", ha precisado Philippe, cuyo objetivo es poder hacer 100.000 pruebas virológicas al día a partir de la semana que viene.

Pese a la apertura entonces de los comercios, no todo cambiará a partir de ese día: la situación de los bares, restaurantes, cines y teatros se revaluará a finales de mayo, y los actos que reúnan a más de 5.000 personas seguirán prohibidos hasta finales de agosto, al tiempo que el Gobierno quiere que el teletrabajo continúe mientras sea posible para favorecer la distancia social, especialmente en los transportes públicos.

El Gobierno de Francia anuncia una desescalada progresiva, reversible y adaptada a cada territorio

Uno de los temas más polémicos sigue siendo la reapertura progresiva de las escuelas a partir del 11, con mascarilla obligatoria, limitación a 5 alumnos por aula y asistencia a las clases voluntaria, explica la corresponsal de TVE en París, Almudena Ariza.

En una carta abierta dirigida a Macron este domingo, 329 alcaldes de la región parisina, incluida la alcaldesa de la capital, Anne Hidalgo, pidieron aplazar esa fecha al considerar que el calendario de la desescalada se ha hecho "a marchas forzadas" y no les ha dado tiempo a preparar el protocolo sanitario necesario, informa Efe.

Otro punto conflictivo es la disponibilidad de mascarillas para la población. La gran distribución comenzó a venderlas este lunes y sus anuncios de que disponen de hasta 175 millones de mascarillas desechables, en el caso de Carrefour, recibió críticas por supuestamente haber constituido sus reservas a escondidas en un momento de penuria de esos productos para el personal sanitario, añade la agencia.