La OMS advierte de un riesgo "muy real" de volver al confinamiento si no se ordenan las desescaladas
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha advertido de que el riesgo de volver al confinamiento por el coronavirus "es muy real" en los países que actualmente están relajando sus medidas de distanciamiento social, si no llevan a cabo adecuadamente los llamados 'planes de desescalada'.
El riesgo existe "sobre todo si los países no consiguen gestionar con sumo cuidado la transición y no lo hacen utilizando un enfoque por fases", ha advertido este miércoles el director general de la organización, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
En su rueda de prensa diaria, el responsable de la agencia de la ONU para la salud ha dicho que se han superado los 3,5 millones de casos confirmados de COVID-19 en el mundo mientras las muertes rozan la barrera de las 250.000.
La OMS insiste en que durante la fase de desconfinamiento debe garantizarse que los contagios están controlados, que el sistema sanitario puede afrontar la transición, que está minimizado el riesgo de rebrotes y que se han tomado medidas preventivas en escuelas y lugares de trabajo, informa Efe.
En su alocución [texto íntegro en inglés], Adhanom no ha hecho referencia a ningún país en concreto, aunque ha abordado este punto justo antes de hacer un repaso por regiones; y ha señalado que si bien en Europa Occidental la transmisión del virus está remitiendo, en el este de ese continente, en África, el sureste asiático, el Mediterráneo oriental y en América el número de casos está creciendo.
[Compara los planes de desescalada de los países]
España es uno de los países que está en estos momentos empezando a retirar restricciones a la movilidad, un proceso todavía en fase de concreción y negociación con las comunidades autónomas (que tienen la mayoría de competencias de sanidad).
Servicios básicos más allá de la crisis
Además, el etíope ha dicho que la pandemia "ha puesto de relieve la importancia de los sistemas de salud a nivel nacional y subnacional, claves de la cobertura universal", que no tiene garantizada toda la población. De hecho, ha advertido de que si continúa la tendencia actual, en 2030 más de 5.000 millones de personas no tendrán acceso a algunos servicios sanitarios esenciales, como ver a un médico o disponer de medicamentos.
En ese sentido ha dicho que en todo el mundo se gastan cada año unos 5,7 billones de dólares en sanidad, lo que equivale aproximadamente al 10% del PIB global. "Pero las mejores inversiones son en los sistemas de salud primaria, que salvan vidas y ahorran costes. La prevención no solo es más barata que la curación, es más barata", ha añadido.
"La historia nos juzgará a todos", ha continuado antes de finalizar su exposición repitiendo otra jornada más su llamamiento a la "unidad nacional y la solidaridad internacional".