Arte desconfinado: el Centro Botín, primer espacio artístico nacional que abre sus puertas

• Dadas las restricciones de movilidad, solo los cántabros podrán acceder a sus exposiciones por el momento
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El Centro Botín en Santander marca la pauta de la apertura de museos y centros culturales

Los dos grandes ventanales de la entrada principal del Centro Botín lo dicen todo: "Estamos Abiertos". Con grandes letras anuncia la reapertura de sus salas en la Fase 1 del desconfinamiento. Es el primer centro cultural de referencia nacional que puede ser visitado, aunque con las limitaciones y cautelas que impone la situación.

Por el momento, solo los cántabros podrán acceder a sus exposiciones, dadas las restricciones de movilidad. Se ha limitado el aforo a un tercio de su capacidad, establecido un circuito único que se debe seguir obligatoriamente, y en los accesos a las diferentes salas hay alfombrillas para el calzado y gel desinfectante.

Precauciones que tendremos que asumir como normales a partir de ahora, con el fin de poder disfrutar del arte sin ningún temor ni preocupación. Al menos, ese es el objetivo de los responsables del Centro. Entre las cautelas frente al coronavirus se incluye también el fomento de la compra de entradas por vía telemática y la supresión de folletos y dispositivos de audioguía.

Una chica con mascarilla visita la repertura del Centro Botín BELÉN DE BENITO

“Necesitamos el arte”

“La Fundación Botín ha querido abrir el centro de arte en cuanto ha sido posible, para contribuir a la reactivación de la actividad y de la economía, convencida de que, ahora más que nunca, las artes pueden jugar un papel fundamental en el desarrollo personal y social”. Así resume el director general de la Fundación Botín, Iñigo Sáenz de Miera, el espíritu que ha impulsado la reapertura.

“Si hay un momento de la historia en el que debemos aprender a mirarnos, es ahora“

"Necesitamos el arte, lo hemos descubierto en estos dos meses de confinamiento” afirma. “Nos ayuda a mirar a la realidad de forma diferente, y si hay un momento de la historia en el que debemos aprender a mirarnos, es ahora. Estamos convencidos de que el arte puede ayudarnos a hacerlo”.

Los condicionantes de movilidad que impone la crisis sanitaria, que hoy limitan a Cantabria la posibilidad de visitar el Centro Botín, no han supuesto un obstáculo a la hora de plantearse la reapertura. “Es una oportunidad para reforzar la vocación local que tenemos los centros de arte y las instituciones culturales”, afirma Sáenz de Miera.

“La capacidad de influencia en la vida de las personas es mayor con aquel que te puede venir a visitar siete u ocho veces al año. El objetivo es ayudar a desarrollar la creatividad de las personas y contribuir al desarrollo. Eso es más fácil hacerlo con la población local”.

Una visita tranquila, sin miedos

Todo se ha organizado para conseguir, según el director de la Fundación Botín, “que sea una visita tranquila. Que la seguridad esté detrás, por supuesto, pero como que no se vea. Hemos organizado los espacios expositivos para evitar que los visitantes se acerquen demasiado entre sí. Hemos eliminado los elementos didácticos que son para tocar, los folletos, que pueden darte reparo por si alguien los ha tocado antes, una cortina que hay a la entrada de una exposición… Se trata de organizarlo para estar relajados, no puedes venir con miedo. Que quien venga disfrute de una experiencia bonita, tranquila y segura”

Sus salas son amplias. El Centro Botín ya contaba con un sistema de control de aforos, y en ese sentido la adaptación a la nueva realidad social ha sido más fácil. Ya preparan la programación de verano, e incluso la del año próximo, convencidos de que poco a poco se podrá retomar la normalidad en sus actividades.

Tres exposiciones

Las exposiciones que en este momento se muestran son tres, las mismas que cuando el coronavirus obligó a cerrar sus puertas. En la segunda planta la muestra 'AS YOU GO (Châteaux en Espagne)', del artista albanés Anri Sala, y en la primera la muestra 'Coleccionando Procesos. 25 años de Itinerarios', que conmemora el vigésimo quinto aniversario de la serie Itinerarios. La sala permanente acoge 'Retratos: Esencia y Expresión' con los retratos de grandes maestros del siglo XX cedidos por Jaime Botín, Patrono de la Fundación Botín.

Una chica con mascarilla visita la repertura del Centro Botín BELÉN DE BENITO

'Coleccionando procesos' fue inaugurada a finales de 2019, y conmemora el vigésimo quinto aniversario de la serie Itinerarios, realizando para ello una cuidada selección de veinticinco artistas, antiguos beneficiarios de las Becas de Artes Plásticas de la Fundación.

La exposición permanente está integrada por una selección de ocho obras. Cronológicamente, el conjunto refleja casi en su totalidad el arte del siglo XX, iniciándose con Figura de medio cuerpo, creada por Isidre Nonell en 1907, y cerrándose con Self Portrait with Injured Eye, pintada por Francis Bacon en 1972.