Profesionales y familiares piden seguridad en la reapertura de los centros de día de mayores: "Si no, sería una imprudencia"

• El Gobierno permite su reapertura en Fase 1 pero las comunidades están estudiando cómo hacerlo con seguridad
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Imagen de recurso de una persona mayor siendo atendida por una cuidadora.

El Gobierno permite la reapertura de los centros de día para mayores de los territorios en la Fase 1 de la desescalada, que ha ido instaurándose desde hace tres semanas en distintas regiones y afecta ahora mismo al 70% de la población. Sin embargo, las comunidades autónomas que ya están ahí no han ordenado todavía la apertura de estos centros y en la orden ministerial que las habilita no se establece un protocolo claro para garantizar la seguridad de los mayores que acuden a estos centros y que conforman la población más vulnerable.

Ante esta cuestión, el sector de la dependencia exige más claridad y garantías, como también las asociaciones de familiares de estos mayores, que a medida que avanza la desescalada ven con más dificultad hacerse cargo de estas personas.

El presidente de la Asociación de Directores y Gerentes en Servicios Sociales, José Manuel Ramírez, califica de “barbaridad”, “temeridad” e “inconsciencia” la orden publicada en el BOE que permite que los centros de día puedan abrir en Fase 1. “El Gobierno está tomando decisiones que desconoce absolutamente, el Ministerio de Sanidad necesita escuchar a los especialistas de servicios sociales”, ha aseverado a RTVE.es.

Sin embargo, desde la Vicepresidencia de Derechos Sociales aseguran que la competencia de estos centros la tienen las comunidades autónomas, así como la “soberanía” de sus territorios y que la orden permite abrir los centros a aquellas comunidades que “así lo consideren oportuno”.

En concreto, la orden del BOE del sábado 9 de mayo dispone “la apertura de todos los centros recogidos en el Catálogo de Referencia de Servicios Sociales (...) con el fin de que en los mismos se pueda llevar a cabo la atención presencial de aquellos ciudadanos que lo necesiten, prestando especial atención a los servicios de terapia, rehabilitación, atención temprana y atención diurna para personas con discapacidad y/o en situación de dependencia”. Respecto a las condiciones, establece que estarán abiertos siempre que sea necesario “y sin perjuicio de que se adopten las medidas de prevención e higiene establecidas por las autoridades sanitarias”, aunque no fija más criterios.

Según ha podido saber RTVE.es, el Imserso está ultimando un protocolo con recomendaciones para las comunidades autónomas relativo a la apertura de los distintos centros de servicios sociales que podría estar disponible esta misma semana.

Algunos centros de día están asociados a residencias

Precisamente, el Círculo Empresarial de Atención a las Personas (CEAPs) remitió la semana pasada al Ejecutivo, a la Dirección General del Instituto de Mayores y al Imserso, dos propuestas de protocolo que diferencian entre dos tipos de centros de día. Uno, son los asociados a residencias de mayores, entre las más afectadas por el coronavirus, ya que algunas de ellas “comparten personal o entrada a las instalaciones” y hay que prestar especial atención, según ha explicado CEAPS a RTVE.es.

Luego, están los centros independientes, en los que también hay que garantizar la seguridad: “En localidades pequeñas los servicios son compartidos, el peluquero va a la residencia de ancianos, al centro de día y también puede tratar a todo el pueblo”.

Entre otras cuestiones, CEAPs pide en su propuesta que se asegure el suministro de Equipos de Protección Individual (EPIs), pruebas PCR y test serológicos a profesionales y a los usuarios. También determinar el grado de participación de los servicios de salud en la dinámica de los centros. Para ello, contempla tres fases para "una incorporación progresiva de usuarios según criterios de necesidad social, gravedad, vulnerabilidad y grado y nivel de dependencia".

“Estas personas no tienen mejores condiciones en sus casas, es razonable que vuelvan en condiciones de seguridad“

El Consejo General del Trabajo Social ha recibido por su parte con esperanza la orden ministerial. “Tenemos que ir intentando normalizar los ritmos de vida de los familiares y de las personas que necesitan una atención diaria continua”, afirma a RTVE.es su presidenta, Emiliana Vicente González, porque “estas personas no tienen mejores condiciones estando en sus casas y es razonable que vuelvan a los centros si se cumplen las medidas de seguridad”.

En este sentido, ha criticado que haya habido “falta de comunicación del Gobierno con los profesionales a la hora de tomar decisiones” y ha exigido que el Ejecutivo garantice los medios necesarios -incide en los test- para cumplir con las recomendaciones sanitarias en términos de seguridad: “Si no se disponen de esos medios, sería una imprudencia abrir”.

Los familiares están “sobrecargados” pero también piden garantías

Los familiares de personas con Alzheimer son algunos de los que más están notando la ausencia de centros de día donde sus mayores puedan estar atendidos. “En casa, nuestros pacientes no reciben un cuidado profesional y las familias no tienen el respiro adecuado, están sobrecargados tras dos meses cuidando 24 horas al día de una persona y es extremadamente agotador y estresante”, afirma a RTVE.es la presidenta de la Confederación Española de Alzheimer (CEAFA), Rosa María Cantabrana.

Sin embargo, incide en que nunca van a pedir “que los centros se abran de cualquier manera ni a cualquier precio”, por lo que además de medios, pide una supervisión constante por parte de las autoridades competentes e ir abriendo “muy paulatinamente” para “no dar un paso atrás”. Y exige también que se avance en la Ley de Dependencia para que se otorguen con mayor agilidad las ayudas necesarias.

Madrid fue una de las comunidades que optó por el cierre de los centros de día antes del estado de alama, el 6 de marzo, para prevenir contagios entre este colectivo. Sin embargo, ha sido la región más castigada por el coronavirus, especialmente en las residencias de ancianos, donde han muerto casi 6.000 personas por coronavirus o síntomas compatibles desde el inicio de la pandemia. En este contexto, y aunque la región no ha pasado aún a la Fase 1, los familiares tienen miedo de que la reapertura de los centros de día pueda suponer un riesgo para sus allegados.

“Tenemos miedo pero la situación de las familias es muy grave“

“Tenemos mucho miedo porque son población de alto riesgo. Pero vemos que la situación de las familias que tienen a sus mayores enfermos en casa, a veces incluso en situaciones de agresividad por enfermedades como el alzheimer, es muy grave. Está claro que necesitan la apertura de estos centros pero nadie nos asegura que se vaya a hacer de forma segura”, explica a RTVE.es Sheila Moreno, psicóloga y miembro de la Federación Alzhéimer de la Comunidad de Madrid, quien incide en la dificultad para la conciliación familiar de personas que vuelven estos días al trabajo pero tienen a su cargo una persona con alzhéimer.

Las CC.AA. diseñan sus propios protocolos

Pese a que muchas están ya en Fase 1, las comunidades autónomas no han reabierto aún sus centros de día. Sin embargo, son muchas las que están estudiando las condiciones para hacerlo con seguridad. Así, por ejemplo, la Comunidad de Madrid confirma a RTVE.es que Salud Pública está trabajando “en las distintas fases de la desescalada y en los protocolos específicos para centros sociosanitarios”, aunque fuentes de la región no dan más detalles.

La Generalitat de Cataluña trabaja también en un documento que establece como algunas de las condiciones para la reapertura de los centros que las personas atendidas no hayan tenido sintomatología en los últimos 14 días y que los profesionales se sometan a test que certifiquen que no tienen COVID-19.

La Consejera de Familia de Igualdad de Oportunidades de Castilla y León, Isabel Blanco, ha considerado que los centros de día deberían retrasar su apertura a la Fase 2 de la desescalada, al tiempo que el Plan de Transición del Gobierno establece que las residencias de personas con discapacidad inicien su desescalada.

Y en Murcia, la Dirección General de Personas con Discapacidad del IMAS, en coordinación con el CERMI, ha constituido varios grupos de trabajo con la finalidad de elaborar propuestas de medidas para la reactivación presencial del servicio de atención temprana y los diferentes servicios de atención a personas con discapacidad.

Por último, Galicia y Cantabria tampoco prevén abrir en Fase 1 los centros de día sociales, aunque están estudiando, como otras regiones, los procesos de desescalada en las residencias de mayores. Mientras tanto, el sector de la dependencia y los familiares piden al Gobierno que se agilicen los trámites para la teleasistencia y que se disponga de mayores ayudas a domicilio.