Sánchez defiende la legalidad del estado de alarma y promete a las comunidades mayor capacidad de decisión
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El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha defendido ante el Congreso de los Diputados que el estado de alarma, que es "plenamente legal" y ha calificado como "falso" que se pueda sustituir "por un rosario de leyes ordinarias concebidas para situaciones ordinarias".
"El estado de alarma ha sido efectivo para todos los territorios y ha beneficiado al conjunto de la ciudadanía", ha defendido Sánchez en el debate de la quinta prórroga de esta herramienta constitucional. En este sentido, ha asegurado que, de no haber seguido esta vía, "se hubiesen contagiado dos tercios de la población y sumaríamos más de 300.000 muertes o probablemente muchas más, porque se hubiera colapsado el Sistema Nacional de Salud".
Se abre a reformar las leyes sanitarias
Así, ha afirmado también que "es necesario garantizar el plan de desescalada dejando el menor espacio posible a rebrotes" porque "nadie tiene derecho a derrochar lo conseguido estas semanas".
Sánchez renunció este martes a buscar la prórroga de un mes y llegó a un acuerdo con Ciudadanos para lograr el 'sí' de la formación a cambio de una serie de medidas económicas y de buscar en estos 15 días una salida al estado de alarma.
En su discurso, ha rebatido los argumentos de partidos como PP y Vox que aseguran que hay alternativas jurídicas a esta herramienta constitucional. "El estado de alarma es plenamente legal y parte del núcleo principal del sistema legislativo, que es la Constitución", ha afirmado, incidiendo después en que las leyes ordinarias "contienen vacíos imposibles de cubrir, como la posibilidad de limitar la movilidad o la libertad de reunión".
Aún así, Sánchez ha abierto la puerta a modificar algunas leyes para dar un seguimiento a la pandemia una vez levantado el estado de alarma: la Ley General de Salud, la Ley de Cohesión del Sistema de Salud, la Ley General de Salud Pública, y la Ley de Seguridad Nacional.
Las CC.AA. tendrán más capacidad para decidir
Sánchez ha recalcado que el estado de alarma para las próximas dos semanas tendrá como único mando delegado el Ministerio de Sanidad -ya no el de Transportes, Interior y Defensa-.
A su juicio, es un mando "necesario", pero "esto no excluye la cogobernanza con las comunidades autónomas" ya que Sanidad y las regiones trabajarán de forma coordinada y serán quienes "marquen los ritmos de desescalada".
"Además de seguir ejerciendo todas las competencias de gestión, irán recuperando capacidad de decisión y la atención primaria irá ganando más protagonismo en la gestión de la desescalada". Así, ha deseado "todo el acierto" a las autonomías en esta misión. Esta es precisamente una cuestión que llevaban exigiendo formaciones como ERC, PNV, JxCat o EH-Bildu.
Sánchez ha incidido, sin embargo, que el proceso de desescalada "no es un examen ni una competición entre las comunidades autónomas", sino "un ejercicio de ciencia y de prudencia". Así, ha sentenciado: "Saldremos a distintas velocidades, pero unidos. No hay salida en el desorden y tampoco en la división".
Por último, ha terminado su intervención inicial con un reconocimiento a los representantes públicos de todos los partidos y territorios, a quienes ha trasladado la "comprensión hacia los errores que hayan podido cometer" y a quienes ha pedido disculpas por los "errores propios".