Vino ecológico y solidario en la localidad navarra de Lumbier

• Ante el excedente de stock por el coronavirus sus bodegas han decidido donar los vinos.
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Vino ecológico y solidario en la localidad navarra de Lumbier

Las bodegas y las cooperativas vitivinícolas navarras viven momentos de incertidumbre. Obviamente no han vivido ajenas a la crisis sanitaria provocada por el coronavirus y están sufriendo sus consecuencias económicas. Dependen de la vuelta a una relativa normalidad y de la recuperación de los hábitos de consumo de la población para salir adelante.

Con la llegada del otoño se producirá una nueva vendimia y será entonces cuando deban de enfrentarse a un más que previsible exceso de stock. Se juntará la nueva remesa de vinos a la que no se haya podido sacar por la caída de consumo desde el pasado mes de marzo.

Dos jóvenes bodegueros toman la iniciativa

Para hacer frente a esa previsible eventualidad, dos bodegas de la localidad navarra de Lumbier, centradas además en la producción de vinos ecológicos, han decidido poner en marcha una iniciativa solidaria en la que los destinatarios son sus propios vecinos.

Ante el descenso de venta directa, que los jóvenes bodegueros que las regentan han calificado de brutal, han decidido donar los caldos que estiman que no van a tener salida antes del próximo otoño.

Los protagonistas de esta acción solidaria son Ibón Ollo, de 26 años y propietario de Bodegas Aristu y Gorka Pérez, de 22 y máximo responsable de Bodegas Azpea.

Ibón y Gorka han decidido regalar su vino para ayudar a los hosteleros de la zona que, como ellos, se han visto perjudicados por la grave alteración de la actividad económica durante la pandemia y la declaración de consiguiente estado de alarma.

El pueblo brinda con los caldos locales por sus imaginativos vecinos

La iniciativa ha sorprendido y emocionado a partes iguales a los vecinos y a los comerciantes de Lumbier, máxime cuando conocen del esfuerzo empresarial de estos jóvenes que además llevan tiempo trabajando por incentivar el producto local y ecológico.

En total han repartido más de 400 botellas de sus vinos ecológicos y con este gesto tratan de recalcar el valor del producto de cercanía y el esfuerzo realizado por los pequeños comercios rurales y los de barrio en la localidad.

La realidad ha cambiado para todos durante estos tiempos de crisis y lo que estos jóvenes emprendedores han querido dejar claro es el respeto que tienen por su trabajo, su gente y su zona. Y como ellos mismos dicen, las cosas, o se hacen bien, o es mejor no hacerlas. Desde hace ya unos días Lumbier brinda más que nunca con un buen vino del pueblo.