Altamira vuelve a abrir para todos
- La Neocueva y las exposiciones permanente y temporal tendrán acceso limitado pero gratuito hasta agosto
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El reencuentro con la cultura es sus máximas expresiones sigue avanzando. El Museo de Altamira ha vuelto a abrir sus puertas, casi tres meses después, para poder disfrutar de la Neocueva, la réplica exacta de la que se conoce como “La Capilla Sixtina del Arte Cuaternario”. También están a disposición de los visitantes la exposición permanente del museo y dos exposiciones temporales.
Como en todos los entornos de nuestra actual vida cotidiana, están presentes en Altamira elementos con los cuales ya nos hemos acostumbrado a convivir –hidrogeles, mascarillas- para asegurar la salud de visitantes y de los propios trabajadores del museo. También se han impuesto otras limitaciones en la visita, con el mismo objetivo. Se ha limitado a un tercio del aforo el acceso a la neocueva, en concreto 66 visitantes por hora.
No hay guías, y se han retirado todos los elementos táctiles o de contacto, como auriculares, botoneras, y han sido eliminadas las pantallas táctiles. Tampoco se facilitarán folletos en la visita y se informará a los visitantes que los tienen disponibles en la página web del museo. La tecnología nos compensa estas carencias, y facilita conocer los detalles de la visita mediante códigos QR y nuestro teléfono móvil. El reencuentro con la máxima expresión del arte paleolítico tiene además un aliciente extra: la entrada será gratuita hasta el 31 de julio. Por otro lado, no es necesaria la cita previa, aunque se respetará el aforo máximo por hora.
A la reapertura del Museo de Altamira ha asistido la delegada del Gobierno en Cantabria, Ainoa Quiñones, que ha expresado el compromiso del Gobierno de España de “relanzar” este espacio museístico, por el que pasan cada año más de 250.000 personas. Quiñones ha señalado además que “el arte rupestre es uno de los patrimonios más importantes que aporta Cantabria al conjunto de España. Estamos en una región estandarte del primer arte de nuestra civilización, hace más de 15.000 años, y del que la cueva de Altamira es un testigo y protagonista principal”.
La cueva original, cerrada
En esta primera fase de reapertura del museo no se celebrarán actividades educativas ni culturales y, por tanto, no se realizarán tampoco las visitas a la cueva original que, hasta la declaración del Estado de Alarma y desde febrero de 2014, se estaban realizando un día a la semana, con acceso de cinco personas elegidas por sorteo entre los visitantes del museo, durante unos 35 minutos.
La directora del Museo de Altamira, Pilar Fatás, ha destacado que las medidas implementadas permiten una visita “cómoda y segura”. Con la reducción a menos de un tercio del aforo, “son 66 personas a la hora, frente a las 120 que podrían acceder antes a la neocueva cada hora”. Fatás ha recordado que además de la exposición permanente “Los tiempos de Altamira” y la mencionada neocueva, es posible visitar también “todo el recinto exterior del museo, que se puede recorrer libremente, hasta la proximidad de la cueva original. Incluso, hemos abierto el acceso al primer edificio que se construyó, en 1929, una casa de estilo montañés muy bonita”.
La directora del museo ha recomendado también la visita a las exposiciones temporales, una dedicada al arte rupestre de Sudáfrica, incluida en la lista de patrimonio mundial, y una instalación del artista local Andrea Juan titulada “Quien”.
El confinamiento beneficia a las cuevas
“Absolutamente todas las cuevas con arte rupestre están mejor que antes, gracias al confinamiento”. Así de categórica se ha mostrado la directora del museo respecto a la valoración de la influencia en la cueva original de Altamira de la ausencia de visitantes. “Todo este período en el que solo se han hecho las visitas necesarias de control, pero no visitas públicas, suponen una mejora para las condiciones medioambientales de la cueva y, por ende, para su conservación”.
Pilar Fatás ha señalado que están en fase de estudio, tanto la fórmula para retomar las visitas a la cueva original, como la fecha en que las mismas podrían recuperarse. La alerta sanitaria hizo que se aplazara la reunión del Patronato que forman Gobierno de España, Gobierno de Cantabria y Ayuntamiento de Santillana del Mar. Pilar Fatás ha indicado que el permanente contacto con las tres instituciones ha permitido avanzar en la gestión cotidiana, por lo que la próxima reunión, para la cual aún no hay fecha, será de carácter informativo.