Los trabajadores de Nissan vuelven a manifestarse en Barcelona contra el cierre de la planta
- Cientos de trabajadores se concentran en la Avenida Reina Cristina
Reprochan a la compañía que deje a 25.000 familias sin trabajo en plena pandemia
Centenares de trabajadores de Nissan han vuelto este jueves a salir a la calle en Barcelona para protestar por decisión de la multinacional japonesa de cerrar sus plantas de Cataluña y exigir la continuidad de la actividad.
La manifestación han comenzado a las 18.30 horas en la avenida Reina Maria Cristina de Barcelona, donde media hora después se ha leído un manifiesto en japonés dirigido al presidente de Nissan, Makoto Uchida, y otro en francés destinado a la dirección de Renault, socio de la alianza automovilística con la marca nipona y que se encargará de gestionar el mercado europeo.
A Uchida le han reprochado que deje a 25.000 familias "sin trabajo en plena pandemia por el COVID-19", lo que tachan de no ser "ético ni moral" y lo instan a reconsiderar el cierre anunciado. "Somos competitivos, lo hemos demostrado, somos una plantilla flexible y altamente cualificada. Tan solo necesitamos una apuesta decidida de la compañía que usted lidera", señala el comunicado.
“Somos competitivos, lo hemos demostrado, somos una plantilla flexible y altamente cualificada“
Los manifestantes le han recriminado, además, que la decisión sobre el cierre haya sido "totalmente premeditada, planificada y maquillada intencionadamente por directivos europeos, dejando a Nissan fuera de la Unión Europea" y han insistido en que la compañía "tiene futuro" en Cataluña.
A Renault le han pedido que no permita "que Nissan abandone la Unión Europea" porque, han asegurado, "la red de fábricas creada en el entorno de la Factoría de Zona Franca en Barcelona funciona y con una pequeña apuesta por nosotros se puede sacar una rentabilidad muy grande".
Se trata de la segunda manifestación que convocan los trabajadores de Nissan esta semana, después de que el martes más de un millar de personas recorriera el centro de Barcelona con una marcha nocturna y ataúdes simulando a los directivos de la compañía, como el encargado de desmantelar las plantas y antiguo director de operaciones, Frank Torres.