Alemania trata de imponer restricciones locales frente al coronavirus mientras la tasa de contagio se dispara
Varias regiones de Alemania tratan de imponer medidas ante los brotes de coronavirus con dificultades e, incluso, han recurrido a la intervención de la policía para lograr el cumplimiento de la cuarentena por la fuerza. Mientras, este domingo, la tasa de contagio se ha disparado a 2,88, lo que dificulta el control de su expansión.
Las autoridades sanitarias han necesitado el refuerzo de la policía para mantener el aislamiento en un bloque de torres en la región de Goettingen después de que 200 de las 700 personas que debían cumplir cuarentena trataran de salir. Algunos de los residentes que protagonizaron el motín usaron botellas, fuegos artificiales y barras de metal, con lo que ocho agentes resultaron heridos.
También en Renania del Norte-Westfalia se ha obligado a 7.000 empleados y sus familias a entrar en cuarentena a principios de esta semana después de más de 1.300 empleados de una empresa alemana de procesamiento de carne dieran positivo en el test de coronavirus. Las autoridades han denunciado la poca colaboración de la empresa para facilitar los datos de sus empleados y poder llevar a cabo un seguimiento de sus contactos.
Armin Laschet, ministro presidente del estado, ha recurrido a los funcionarios consulares de Polonia, Bulgaria y Rumania para movilizar a traductores y persuadir a los trabajadores de la planta local de procesamiento de carne para que cumplan las normas de cuarentena. Se han cerrado guarderías y escuelas cercanas, aunque no se descartan más medidas si fuera necesario.
La tasa de contagio, por encima de 2,8
La tasa de reproducción de la infección del virus en el país se ha disparado a 2,88, basado en un promedio de 4 días, según ha informado el Instituto Robert Koch (RKI) para la salud pública este domingo, frente al 1,79 del día anterior.
El nivel actualmente está muy por encima de 1, nivel que se considera necesario contener la expansión de la pandemia. El valor actual supone que de cada 100 personas que contraigan el virus, otras 288 se contagiarán.
En total, el país ha notificado hasta el momento casi 190.000 infecciones y más de 8.880 muertes con COVID-19.
Economía en marcha y fronteras abiertas
Desde este pasado lunes, Baleares ha comenzado a recibir a los primeros turistas alemanes como parte de un programa piloto para poner a prueba el sector turístico antes de que toda España abra sus fronteras a los socios europeos.
Los rebrotes traen consigo la posibilidad de que la mayor economía de Europa tenga que volver a imponer restricciones a la actividad para proteger la salud pública, pese a que hasta ahora había conseguido frenar la expansión de la pandemia con solvencia en comparación con otros países europeos.
La canciller Angela Merkel había defendido mantener algunas medidas de confinamiento, aliviando gradualmente las restricciones como pedían los responsables políticos regionales. Renania del Norte-Westfalia fue una de las regiones que más insistió en la necesidad de reactivar la economía.
A los brotes de las ciudades de Guatersloh y Warendorf, en dicho länder, se suman otros en la región de Sajonia Anhalt y en el distrito belinés de Neukoelln, según ha informado el RKI.
En una entrevista publicada el domingo en el periódico Frankfurter Allgemeine Sonntagszeitung, el presidente del Bundesbank, Jens Weidmann, celebró que la economía había pasado lo peor de la crisis causada por el brote de coronavirus y que ahora se esperaba que una recuperación gradual.