Turquía impone cadena perpetua a 121 militares por el fallido golpe de 2016 contra Erdogan
- El coronel Erkan Öktem, considerado uno de los organizadores, ha sido condenado a 10 perpetuas agravadas
- Otros 85 agentes han recibido penas de perpetua agravada y otros 35 han sido condenados a perpetua simple
Un tribunal turco ha condenado a cadena perpetua a 121 miembros de la Gendarmería, un cuerpo de policía adscrito al Ejército de Turquía, por su participación en el fallido golpe de Estado contra el presidente Recep Tayyip Erdogan de julio de 2016.
En el marco de un macrojuicio contra 245 miembros de este cuerpo, el coronel Erkan Öktem, condenado por atentar contra el orden constitucional y por la muerte de nueve personas y considerado uno de los principales organizadores del golpe fallido, ha recibido una pena de 10 cadenas perpetuas agravadas.
Además, el tribunal de Ankara ha condenado a otros 85 agentes a cadena perpetua agravada por el delito de conspirar contra el orden constitucional y a otros 35 a la perpetua simple por el mismo delito.
Hay 17 personas que han recibido sentencias de entre 12 y 15 años de cárcel por "colaborar con el golpe" y otros 23 gendarmes han sido condenados a penas de entre 7 y 12 años por "formar parte de una organización armada", en referencia a la cofradía del predicador exiliado Fethullah Gülen, a la que Turquía considera responsable de la asonada. Por último, hay otros diez acusados que están siendo buscados con orden de arresto. Los 74 restantes han sido absueltos.
Desde el fallido golpe, hace tres años, los tribunales turcos han juzgado a miles de supuestos involucrados. Además, cada semana se detiene a otros supuestos "gülenistas" bajo lo acusación de implicación en el levantamiento. En total, más de 19.500 miembros de las Fuerzas Armadas turcas han sido expulsados por sus presuntos vínculos con la red de seguidores de Gülen, más de 120.000 funcionarios del Estado han sido destituidos y unas 50.000 personas se encuentran encarceladas