Pamplona vive con resignación los 'Nosanfermines' con un pañuelo rojo en lugar del chupinazo
Pamplona presenta en las primeras horas de este 6 de julio un aspecto inusual. La pandemia del coronavirus ha motivado la suspensión de los Sanfermines, que deberían haber arrancado a mediodía con el tradicional chupinazo, y que muchos llaman ahora "Nosanfermines". Del balcón del Ayuntamiento de Pamplona cuelga un pañuelo rojo con el lema "los viviremos" que sustituye al disparo del cohete anunciador de las fiestas.
La mayoría de ciudadanos ha renunciado a vestirse de blanco, aunque en el centro de Pamplona sí puede verse a algunas personas ataviadas con la tradicional vestimenta festiva. Tampoco hay mesas en la calle para los almuerzos, una posibilidad que ha prohibido el Ayuntamiento. Del mismo modo, no se ven multitudes de vecinos ni visitantes camino del centro y los bares están tranquilos como cualquier otro día laborable.
En la plaza Consistorial hay presencia de la Policía Municipal de Pamplona para evitar aglomeraciones y se van a instalar controles de aforo en seis zonas del Casco Antiguo que cuentan con un mayor número de establecimientos de hostelería, así como en la plaza del Castillo.
Se habilitarán 14 puntos de controles en las entradas y salidas de las calles Jarauta (entre San Saturnino y el inicio de la calle Descalzos), San Nicolás, Pozoblanco-Comedias, Estafeta-Espoz y Mina, Calderería y la zona de la plaza de la Navarrería. En cada una se ha calculado un aforo permitido, teniendo en cuenta la superficie de la calle y las medidas de distanciamiento social.
Ningún acto festivo organizado
Las autoridades locales y regionales han realizado llamamientos reiterados en las últimas semanas para pedir a la ciudadanía que actúe con "prudencia" y "responsabilidad" y evite que se produzcan concentraciones masivas en las calles entre el 6 y el 14 de julio. Las peñas permanecerán cerradas al público y el Ayuntamiento no ha organizado ningún acto festivo en espera de los Sanfermines de 2021.
La Policía Municipal controlará que se cumplan los niveles de aforo. Se hace un llamamiento a bares y restaurantes para que si no pueden controlar el cumplimiento de esas normas (aforo, distanciamiento, uso de mascarillas, etc.) procedan a apagar la música, encender la luz, dejar de servir y avisar a los agentes a través del 092, que "acudirá inmediatamente para reestablecer la situación".
Se recuerda, además, que no se podrá superar el 75% del aforo máximo permitido en el interior del local o los 2,25 metros cuadrados por persona usuaria, en su caso, de las zonas autorizadas para uso público. Las terrazas al aire libre podrán ser ocupadas al 100% del aforo de las mesas permitidas en la licencia municipal.
Sin almuerzos en la calle
En el Casco Antiguo y entorno no se autorizarán almuerzos y comidas en la vía pública. Por lo tanto, queda prohibido sacar mesas para comer durante estos días. Quedan especialmente prohibidos los altavoces en fachadas, en exteriores o en ventanas y puertas orientados hacia el exterior. Atendiendo a la responsabilidad de cada establecimiento, se solicita y recomienda no emitir los días 6 y 7 de julio música sanferminera.
Los horarios de bares y restaurantes, así como la emisión de música, se corresponderán con la normativa habitual. Se deberá cumplir la distancia de seguridad interpersonal que será de al menos 1,5 metros o medidas alternativas de protección física con uso de mascarilla. Además, se limpiará y desinfectará el equipamiento, en particular mesas, sillas, barra, así como cualquier otra superficie de contacto, de forma frecuente.
Asimismo, se deberá proceder a la limpieza y desinfección del local por lo menos una vez al día. Los elementos auxiliares del servicio, como la vajilla, cristalería, juegos de cubiertos o mantelería, entre otros, se almacenarán en recintos cerrados y, si esto no fuera posible, lejos de zonas de paso de clientes y personas trabajadoras.