Identifican los restos de uno de los 43 jóvenes desaparecidos de Ayotzinapa

• En 2014, 43 jóvenes fueron detenidos por policías municipales y entregados al cártel Guerreros Unidos
• La versión oficial sostiene que fueron incinerados en un vertedero mientras las familias claman justicia

Fotografía de un mural con la imagen de los estudiantes desaparecidos en la Normal "Raúl Isidro Burgos" de Ayotzinapa en el municipio de Tixtla, estado de Guerrero (México). EFE/Sáshenka Gutiérrez

La Fiscalía General de la República (FGR) de México ha informado de la identificación de los restos de Christian Alfonso Rodríguez, uno de los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa en septiembre de 2014.

El titular de la Unidad para el caso Ayotzinapa de la FGR, Omar Gómez Trejo, ha detallado que la Universidad de Innsbruck (Viena), había identificado genéticamente a este estudiante mediante unos restos encontrados en el municipio de Cocula pero lejos del basurero donde, según la criticada versión oficial, fueron quemados los jóvenes.

Además, los restos fueron analizados también por el Equipo Argentino de Antropología Forense y los resultados coincidieron también en que los restos pertenecían a una "extremidad inferior" del joven.

La noche del 26 de septiembre de 2014, 43 jóvenes fueron detenidos por policías municipales y entregados a integrantes del cártel Guerreros Unidos, que los asesinaron e incineraron sus restos en un vertedero de basura, según la versión oficial.

No estaban en el vertedero

Según ha explicado Gómez Trejo, tras recibir información sobre el paradero de los estudiantes y comprobar su veracidad del 21 al 29 de noviembre de 2019, llevó a cabo una búsqueda en un punto conocido como Barranca de la Carnicería, en el municipio de Cocula, en estado de Guerrero al sur del país.

"Este lugar no es el Basurero de Cocula", ha precisado, refiriéndose al vertedero donde la versión oficial del Gobierno anterior asegura que se encontrarían los restos. "La Barranca se encuentra a más de 800 metros de distancia de donde se crea la narrativa de la 'verdad histórica'", ha continuado Gómez Trejo.

Christian Alfonso Rodríguez es el tercer estudiante identificado por la Universidad de Innsbruck. Antes, durante la investigación del Gobierno anterior, los restos de Alexander Mora y de Jhosivani Guerrero, dos de los estudiantes desaparecidos, también fueron hallados.

Restos óseos y otros indicios

En las investigaciones actuales se recuperaron 15 indicios que fueron analizados en un primer momento por peritos de la FGR acompañados de familiares. Se hallaron también restos humanos que se enviaron para ser analizadas por el Instituto de Genética de la Universidad de Innsbruck.

"Después de realizar los análisis respectivos a las piezas óseas enviadas, una de ellas corresponde al estudiante Christian Alfonso Rodríguez Telumbre, uno de los jóvenes normalistas desaparecidos el 26 de septiembre de 2014", ha expuesto Gómez Trejo sobre los resultados y ha añadido que las pruebas del Equipo Argentino de Antropología Forense coinciden en sus conclusiones.

Una versión oficial basada en testimonios de "detenidos torturados"

Un grupo de expertos nombrado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) investigó el caso y sostuvo la imposibilidad de que los 43 cuerpos fueran quemados en el basurero y desveló que parte de la versión oficial se basaba en testimonios de detenidos torturados.

Hace apenas una semana, la FGR ordenó la detención de 46 funcionarios del sureño estado de Guerrero por su presunta relación con la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, en una nueva "etapa" de la investigación que pretende tumbar la versión oficial del gobierno pasado.

El Gobierno de López Obrador reabrió en diciembre de 2018 el caso y estableció la llamada Comisión Presidencial para la Verdad y Acceso a la Justicia en el caso Ayotzinapa.

Sin embargo, los padres de los familiares decidieron organizar una caravana por 16 escuelas normales en mismo número de estados ante los nulos avances del Gobierno en la investigación a la vez que actos de protesta.

Familiares y activistas han acusado a los jueces y a los fiscales de defectos en las investigaciones y sentencias que han dejado libres a presuntos responsables del crimen y han entorpecido la búsqueda del paradero de los desaparecidos.