El VIH desaparece en un paciente en Brasil tratado solo con medicación, pero los investigadores piden cautela
- Tras un tratamiento de antiretrovirales y nicotinamida hasta marzo de 2019, el virus no se ha detectado en su ADN y ARN
- Solo dos pacientes han conseguido eliminar el virus de forma definitiva y se consideran curados después de complejas cirugías
Un paciente con VIH (virus de la inmunodeficiencia humana) en São Paulo, Brasil, podría ser la primera persona en haber eliminado el virus a partir de un tratamiento únicamente con medicación y sin haber requerido agresivos trasplantes de células madre, según los resultados de una investigación presentados este martes.
Los responsables del estudio, liderado por el doctor Ricardo Diaz de la Universidad Federal de São Paulo, alertan de que no se dispone de resultados lo suficientemente definitivos ni ha pasado el tiempo necesario para confirmarlo. Por ello, han pedido cautela en la presentación de los resultados en el marco de la XXIII Conferencia Internacional del Sida que se celebra estos días de forma virtual a causa de la pandemia de COVID-19, pero que originalmente debía haber tenido lugar en San Francisco.
Según un artículo publicado en la revista Science, el bautizado como “paciente de Sao Paulo” tiene 35 años y fue tratado durante años con una combinación agresiva de antiretrovirales y nicotinamida, un tratamiento que fue interrumpido en marzo de 2019.
Desde entonces, quince meses después, el VIH sigue sin haberse detectado tanto en su ADN como en su ARN.
Solo dos pacientes han conseguido eliminar el virus
Hasta la fecha, solo se tiene constancia de dos personas que hayan sido curadas oficialmente del virus, que en la etapa más avanzada de la infección se denomina síndrome de inmunodeficiencia adquirida o sida: Timothy Ray Brown, conocido como "el paciente de Berlín", y Adam Castillejo, conocido como "el paciente de Londres".
Ambos se sometieron a operaciones quirúrgicas muy complejas y agresivas como parte de sendos tratamientos contra el cáncer que implicaron el trasplante de médula ósea con células madre resistentes a la infección por VIH, lo que permitió que sus cuerpos creasen nuevos sistemas inmunitarios libres del virus.
Pese al éxito de estos dos casos, se trata de operaciones muy complicadas, extremadamente caras y que conllevan peligros para el paciente, por lo que su uso a gran escala resulta impracticable.