Podemos concluye que su fracaso electoral el 12J se debe a su "debilidad organizativa" por las "peleas internas"

• Iglesias reúne a su Ejecutiva, sin voces críticas ni prensa, tras el descalabro de las elecciones gallegas y vascas
• "Estamos a tiempo de recuperarnos sobre los resultados actuales", ha concluido la formación

Podemos achaca su fracaso en las elecciones del 12J a su "debilidad" territorial

El Consejo de Coordinación Estatal de Podemos ha determinado, en su primer análisis de la "derrota sin paliativos" que sufrieron en las elecciones gallegas y vascas del domingo, que los malos resultados se deben a "la debilidad organizativa en los territorios debido a las peleas internas de la etapa anterior", según informan fuentes del partido morado, ya que el partido de Pablo Iglesias no ha convocado a los medios para informar del análisis y las decisiones de la dirección.

Iglesias ha convocado este viernes el Consejo de Coordinación estatal para analizar junto a los máximos dirigentes de su formación la "derrota sin paliativos", en palabras del líder 'morado' el pasado 12J, que sufrieron en las elecciones gallegas y vascas, tras las que se quedaron sin representación en el Parlamento gallego -tras haber sido segunda fuerza con 14 escaños en 2016- y redujeron casi a la mitad su presencia en la cámara vasca -de 11 escaños, se quedaron con seis-. En esta reunión han participado también los candidatos, Antón Gómez-Reino y Miren Gorrotxategi.

Es el segundo encuentro de la Ejecutiva designada por Iglesias con nombres íntegramente afines, con lo que el volumen de críticas está muy atenuado. Y también es una convocatoria sin la presencia de medios de comunicación ni rueda de prensa, que Podemos ha justificado en que estrena una nueva sede del partido en Madrid (en Ciudad Lineal) y no tiene habilitada una sala para medios. No obstante, no convoca a la prensa tras las reuniones de coordinación del partido desde noviembre del año pasado, informa Efe.

En cuanto a las soluciones para esta crisis de resultados del Podemos, la Ejecutiva considera que los cambios en el modelo organizativo que ya se aprobaron en la Tercera Asamblea Ciudadana Estatal de mayo -en la que Iglesias fue reelegido con amplia mayoría, pero con una de las participaciones más bajas de la historia de Podemos- son la clave para afrontar este problema. Asimismo, defienden que todavía "están a tiempo" de recuperarse.

Las fuentes consultadas señalan "la necesidad de poner en marcha cuanto antes lo aprobado en la Asamblea Ciudadana para poner el partido en dirección al próximo ciclo electoral". "Estamos a tiempo de recuperarnos sobre los resultados actuales", añaden.

Reflexión interna y silencio en la última semana

Esta debacle ha tenido a la dirección del partido morado en un silencio casi absoluto toda esta semana, más allá de la valoración en forma de tuit que Iglesias realizó el domingo, tras confirmarse los resultados, y de las escuetas declaraciones al respecto realizadas, por un lado, por la portavoz de la Ejecutiva, Isabel Serra, y por la secretaria de Coordinación ejecutiva, Ione Belarra, en una entrevista en RNE.

Hasta ahora, la autocrítica del partido solo ha señalado como posible causa de estos resultados a los "problemas internos" de la organización desde hace años y que, según señaló Belarra el miércoles, "se han acrecentado desde los medios de comunicación", y que en el escenario concreto de las elecciones han hecho que los partidos nacionalistas, BNG y EH Bildu, sean quienes hayan capitalizado el voto a la izquierda del PSOE.

Más que a la dirección del partido en Madrid, se achaca el descalabro a la situación territorial del partido. Se interpreta que el vertiginoso ciclo electoral que Podemos ha afrontado en sus seis años de vida, con cuatro elecciones generales, dos europeas, dos municipales, y autonómicas, es otro factor de la pérdida de apoyos, debido a la falta de una estructura de partido con cuadros medios, algo que se viene acusando desde las elecciones andaluzas.

Duras críticas de exdirigentes de Podemos

Las críticas más duras esta semana han venido de exdirigentes de Podemos críticos con la cúpula, como el exsecretario general de Podemos en Aragón, Nacho Escartín -ahora miembro de la dirección autonómica-, o ex miembros destacados del partido morado como el exsecretario general en Madrid Ramón Espinar, o el exnúmero dos y ahora líder de Más País, Íñigo Errejón, que señalan como posibles factores del descalabro el excesivo centralismo del que, a su juicio, peca Podemos, la persecución al que opina diferente y a la crítica interna, o el abandono, a su parecer, de la apuesta por la plurinacionalidad.

El más duro fue Espinar, quien culpó a la dirección estatal del batacazo, por haber convertido el partido "en un solar sin nadie que les moleste", con su "sectarismo" y su "endogamia". A su vez, Errejón concluyó que el Podemos que crearon en 2014 "ya no existe". "Existe una cosa que se llama UP y que tiene los resultados de siempre de IU", afirmó en un mensaje en Twitter.