Gobierno y sindicatos firman un acuerdo para desarrollar la igualdad salarial en las empresas sin la CEOE

• La ministra de Trabajo ha lamentado su ausencia, ya que "han trabajado mucho y parte de sus contribuciones están en los textos"
• Las patronales sostienen que se trata de una "cuestión política" y "una reforma laboral encubierta" que les aparta del acuerdo

Las ministras de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, e Igualdad, Irene Montero), durante la presentación del acuerdo este jueves

La ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, y la titular de Igualdad, Irene Montero, han firmado este jueves con los sindicatos el 'Acuerdo para el Desarrollo de la Igualdad Efectiva entre Hombres y Mujeres en el Trabajo', un texto que desarrolla, en dos reglamentos, la igualdad retributiva y los planes de igualdad en las empresas y que establece, entre otras medidas, la obligación de tener un registro para verificar que no existen diferencias salariales por cuestión de género.

Dichos reglamentos son el fruto de un acuerdo suscrito entre el Ministerio de Trabajo y Economía Social, el Ministerio de Igualdad y los sindicatos UGT y CC.OO. , que también han participado en la rúbrica del mismo tras un proceso de consulta, participación y diálogo desde el pasado 4 de junio. Por ello, Díaz les ha agradecido estar "nuevamente a la altura de las circunstancias" al comprender "que este tema era central" y también por "dejarse la piel" en trabajar para tener los textos".

“Siento lástima, han trabajado mucho y parte de sus contribuciones están en los textos“

La ministra de Trabajo ha lamentado la ausencia de la patronal empresarial en el acuerdo, ya que tanto la CEOE como CEPYME han mostrado reparos en algún punto de la regulación.

"Siento lástima, han trabajado mucho y parte de sus contribuciones están en los textos y quiero agradecérselo, pero es difícilmente comprensible que, sobre una de las materias centrales del siglo XXI, la patronal española no firme estos acuerdos", ha recalcado Díaz. No obstante, ha dicho, "seguramente" se incorporarán en los trabajos que quedan pendientes durante las próximas semanas.

"Es nuestra obligación garantizar la presencia de las mujeres en el trabajo asalariado en condiciones de igualdad", ha dicho Montero tras la firma del acuerdo, quien también ha recordado que las mujeres cuentan en España con una mayor tasa de paro que los hombres, una mayor tasa de temporalidad y que ganan 6.000 euros menos que el género opuesto.

24 horas - Un pacto por la igualdad laboral

Obligación de un registro retributivo

El reglamento de igualdad retributiva establece para todas las empresas la obligación de tener un registro retributivo, con el objetivo de "advertir si existe hipervaloración o infravaloración del puesto según el género", explican desde el departamento que dirige Montero.

El registro deberá contar con información retributiva desagregada por sexos de toda la plantilla, incluido el personal directivo y los altos cargos, desglosada y promediada por clasificación profesional y por trabajos de igual valor, e incluyendo salario base, complementos salariales y percepciones extrasalariales.

Auditoría salarial entre uno y tres años

Las compañías que elaboran plan de igualdad, además, deberán realizar una auditoría retributiva, lo cual supone un diagnóstico de la situación retributiva y un plan de acción para corregir diferencias y prevenirlas.

El decreto con el reglamento para la igualdad retributiva entrará en vigor a los seis meses de su publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE), una vez aprobado por el Consejo de Ministros, y a partir de ahí las empresas de entre 150 y 250 personas empleadas tendrán un año de plazo para completar la auditoría salarial. Las empresas de entre 100 y 150 tendrán dos años y las de 50 a 100 empleados tendrán hasta tres años.

Inclusión del diálogo social

Se establece, además, que las comisiones negociadoras de los convenios colectivos "deben asegurarse de que se respetan" los criterios para una adecuada valoración de los puestos de trabajo, tal como recoge el artículo 22.3 del Estatuto de los Trabajadores. Además, se inserta el diálogo social dentro del procedimiento, lo cual "refuerza y asegura que los planes de igualdad sean negociados".

Asimismo, establece que en el plazo de seis meses desde su publicación los Ministerios de Trabajo e Igualdad desarrollarán por orden ministerial herramientas modelo que podrán ser utilizadas por las empresas para el registro y para la valoración de puestos por las empresas.

Según Díaz, "es un acuerdo para la efectividad" ya que se concreta en procedimientos y herramientas que pretenden establecer "una verdadera conciencia de la igualdad real y efectiva en las empresas". Además, ha dicho, el acuerdo establece una transparencia retributiva que es "prioritaria" para la Unión Europea.

La CEOE rechaza el acuerdo por trastocar la negociación colectiva

Las patronales CEOE y Cepyme aseguran que no han rubricado el acuerdo para los reglamentos de igualdad suscrito este jueves por Gobierno y sindicatos, porque incluyen una reforma encubierta de la negociación colectiva para garantizar la penetración de los sindicatos en empresas donde no tienen representación.

CEOE y Cepyme afirman en un comunicado que la Ley de Igualdad no emplazaba al desarrollo de esta cuestión que, sin embargo, "el Ministerio de Trabajo y los sindicatos han abordado, cercenando la capacidad de negociación de las personas trabajadoras en beneficio exclusivamente sindical".

Para las patronales se trata de una "cuestión política" y "una reforma laboral encubierta" que les aparta del acuerdo.

Según la nota, las diferencias han surgido cuando el Ministerio de Trabajo ha introducido, a través del artículo 5.3 del reglamento relativo a los planes de igualdad en las empresas, elementos que tienen que ver con la ordenación de la representación de los trabajadores en las empresas.

Además, dicen que el texto incorpora cuestiones que pueden "comprometer seriamente la viabilidad futura de muchas empresas en un momento especialmente difícil de la economía".

En este sentido, señalan que se obstaculiza el acceso a licitaciones públicas a las empresas que no han negociado los planes de igualdad con los sindicatos, lo que considera "una muestra más de la escasa relevancia que para los firmantes tiene la igualdad y sí, en cambio, la prioridad de garantizar la penetración de los sindicatos en las empresas donde no tienen representación".

No obstante, aclaran que las cuestiones relativas a la igualdad no han sido motivo de discrepancia entre los interlocutores sociales y el Gobierno, puesto que comparten el compromiso por avanzar hacia la igualdad real entre hombres y mujeres.