Johnson aplaza la última fase del desconfinamiento ante el repunte de contagios en el Reino Unido
- El primer ministro pide "echar el freno" en la recuperación de la actividad para contener la transmisión del virus
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El repunte de contagios de los últimos días en el Reino Unido ha llevado al Gobierno a aplazar la tercera y última fase del desconfinamiento, según ha anunciado el primer ministro en rueda de prensa. "Estamos viendo una preocupante luz de alerta en el panel. Nuestra valoración es que ahora debemos apretar el freno para poder controlar el virus", ha señalado Boris Johnson. El país ha detectado hasta la fecha más de 302.000 casos de COVID-19 (846 en el último día, la cifra más alta en un mes), y se acerca a las 46.000 muertes desde el inicio de la pandemia.
El Ejecutivo aplaza durante al menos dos semanas la reapertura de casinos, pistas de patinaje y pequeños banquetes de boda, entre otras medidas, pero sigue permitiendo acudir al lugar de trabajo "si se cumplen las condiciones de seguridad". Además, el uso de mascarillas en espacios cerrados como museos, cines y lugares de culto será obligatorio a partir del 8 de agosto, una medida que se aplica desde hace una semana en tiendas.
La decisión de Johnson coincide con la valoración de la Oficina Nacional de Estadísticas, que ha detectado un repunte en el país, con una prevalencia de un contagio por cada 1.500 personas. En este sentido, los científicos británicos confían cada vez menos en que el número reproductivo de la enfermedad se pueda mantener inferior al 1, uno de los principales criterios para avanzar en el desconfinamiento. "Todos sabemos que lo que tenemos que intentar es llegar al límite de lo que podemos hacer en cuanto a la reapertura de la sociedad y la economía sin llegar al punto en el que virus vuelva a despegar otra vez. Probablemente estemos cerca del límite", ha advertido el médico que asesora al Gobierno, Chris Whitty.
Restricciones sociales en el norte de Inglaterra
El jueves, el Gobierno anunció en Twitter nuevas restricciones en Manchester y su área metropolitana, los condados de East Lancashire y parte de West Yorkshire, al norte del país. En concreto, se prohíben las visitas en domicilios y jardines de otros ciudadanos, aunque los ciudadanos sí podrán acudir a restaurantes y pubs siempre y cuando lo hagan con personas convivientes.
Mientras, la localidad de Leicester sigue confinada desde hace un mes por el repunte de contagios. En el resto de Inglaterra y los territorios de Irlanda del Norte, Escocia y Gales hay un desconfinamiento relativo, si bien las autoridades advierten de la necesidad de mantener la alerta ante un posible segundo brote del virus en Europa a pesar de que la Organización Mundial de la Salud considera que el mundo se enfrenta a una "gran ola". "Algunos de nuestros amigos europeos están teniendo dificultades para controlar el virus", ha asegurado Johnson, que la pasada semana volvió a imponer la cuarentena obligatoria para los viajeros procedentes de España.