Corinna Larsen asegura a la BBC que Juan Carlos I debe tener "cientos de cuentas" en el extranjero
- La empresaria alemana denuncia que fue acosada por parte del servicio de inteligencia español
- Describe cómo fue la relación con el rey emérito en una extensa entrevista en la cadena pública británica
La empresaria alemana Corinna Larsen ha afirmado en una entrevista concedida a la BBC que Juan Carlos I "debe tener cientos de cuentas en otras jurisdicciones" y ha denunciado una campaña de acoso por parte del servicio de inteligencia español y señala directamente al entonces jefe del CNI, Félix Sanz Roldán: "La primera advertencia era que no hablara con la prensa. Dijo que si no seguía las instrucciones, no podía garantizar mi seguridad física ni la de mis hijos".
"Lo que me parece extraordinario es que estén convirtiendo 40 años de modus operandi de una empresa familiar en un foco sobre una persona. Y esa persona soy yo. Porque habrá cientos de cuentas en otras jurisdicciones", sostiene a la cadena pública británica.
Larsen también ha mantenido que los 65 millones de euros que el que fuera jefe del Estado español le regaló -hechos, entre otros, por los que está siendo investigada por la justicia Suiza -fueron en "reconocimiento" a lo que significó para él por la relación que ambos mantuvieron durante varios años.
Larsen tendrá que declarar el próximo 8 de septiembre como imputado por la Audiencia Nacional en la pieza que investiga las grabaciones de las conversaciones que mantuvo con el excomisario José Villarejo, en las que la empresaria hablaba de las presuntas cuentas de Juan Carlos I en Suiza.
De un campo de tiro a la cacería de elefantes
La Fiscalía helvética sospecha que Juan Carlos I "ocultó cerca de 100 millones de dólares en Suiza" que podrían proceder del pago de comisiones por la adjudicación del AVE a la Meca (Arabia Saudí) en 2011 e investiga un posible delito fiscal y otro de blanqueo de capitales. En España, la Fiscalía del Tribunal Supremo es quien ha asumido la investigación sobre este caso.
En una extensa entrevista, Larsen relata que la relación amorosa con don Juan Carlos duró de 2004 a 2009 aunque luego siguieron siendo buenos amigos. Todo empezó, asegura, en una fiesta de tiro en febrero de 2004. Allí se conocieron y tras varios meses de conversaciones telefónicas Desde ese día, estuvieron hablando por teléfono "durante meses" y no tuvieron una primera cita hasta el verano.
"Conectamos de inmediato en muchas cosas -afirma Larsen- y teníamos muchos intereses en común, como la política, la historia, la buena comida o los vinos. Yo vivía entonces en Londres, acababa de emprender mi propio negocio de consultoría. Y era madre soltera de dos niños. Así que nos encontrábamos en Madrid en una casita de campo dentro de la finca y viajábamos juntos".
Y sobre cómo encajaría la reina Sofía la relación que mantenían, Larsen asegura que el rey le aseguró que "habían llegado a un acuerdo para representar a la Corona", pero que tenían vidas totalmente "diferentes e independientes".
La empresaria destaca la buena relación del rey con sus hijos y asegura que incluso visitó a su padre para confesarle que "pretendía casarse" con ella. También describe que la ruptura se produjo porque el emérito mantenía una relación con otra mujer, aunque eso no impidió que mantuvieran contacto y que hicieran el polémico viaje a Botswana a cazar elefantes, el acontecimiento que precipitó el fin del reinado de Juan Carlos I.
Acoso del servicio de inteligencia español
"Desde el momento en que regresé de ese viaje quedé bajo una vigilancia total", ha afirmado Larsen. "Fue el principio de una campaña para pintarme como una Wallis Simpson, una Lady Macbeth, una suerte de personaje maligno que llevó a este maravilloso hombre por el mal camino en este viaje durante una gran crisis económica".
Después del viaje africano, Larsen alega que empezó a recibir "una atención no deseada" del Centro Nacional de Inteligencia, y que el primer objetivo fue su apartamento en Mónaco. "El apartamento fue ocupado mientras yo estaba de viaje", relata, y asegura que, al parecer buscaban documento "de forma muy exhaustiva". "Se quedaron allí semanas y semanas".
"De repente recibí mensajes de una compañía de seguridad que decía: 'Nos han contactado sus amigos en España'. Y le mandé mensajes de texto al rey del tipo: '¿Quiénes son esas personas?, ¿qué está pasando?'. Me dijo que estaban allí para protegerme de los paparazzi".
Larsen denuncia que la siguieron durante un viaje de negocios a Brasil. Y que recibió una amenaza anónima de muerte en la que le decían que hay muchos túneles entre Mónaco y Niza, una alusión al choque en el que murió la princesa Diana de Gales en París.
En 2012, según Larsen, recibió una visita en Londres del entonces jefe de inteligencia española, Félix Roldán: "La primera advertencia era que no hablara con la prensa. Dijo que si no seguía las instrucciones, no podía garantizar mi seguridad física ni la de mis hijos".
El rey emérito comunicó el 3 de agosto su traslado fuera de España ante la "repercusión pública" de la investigación de sus finanzas y desde entonces se encuentra en Emiratos Árabes Unidos.
Sobre esa investigación, este jueves El Confidencial publica una carta en la que Juan Carlos I reiteraba hace solo dos años, en agosto de 2018, que la donación de 65 millones de euros entregada seis años antes a Larsen era "irrevocable" y que su la empresaria no actuó nunca como su testaferro "al contrario de lo que dice la prensa española".