Trump alaba la recuperación laboral y promete 10 millones de empleos para 2021
- El desempleo, que se situó por encima del 14,4 % en abril por la pandemia, se ha desplomado hasta el 8,4 % en agosto
- Biden le acusa de "librar una guerra contra los sindicatos" y "elegir a ejecutivos de Wall Street por encima de los trabajadores"
El presidente de EE.UU., Donald Trump, ha asegurado este lunes que el país vive la "recuperación más rápida" del mercado laboral, y ha prometido crear 10 millones de empleos en 2021 si logra la reelección en los comicios del próximo 3 de noviembre, mientras su rival en noviembre, Joe Biden, busca reforzar su apoyo entre los sindicatos.
"Estamos siendo testigos de la recuperación del mercado laboral más rápida de cualquier crisis económica en la historia", ha asegurado el gobernante durante una conferencia de prensa en la Casa Blanca con motivo del Día del Trabajo, festivo federal en Estados Unidos.
Trump ha destacado que el mes pasado la economía estadounidense añadió 1,4 millones de empleos, lo que representa 10,6 millones de puestos de trabajo nuevos desde mayo pasado.
"En cambio, la tasa de desempleo se desplomó, realmente para sorpresa de muchos, hasta el 8,4 % en agosto", ha agregado el gobernante, quien ha destacado que se trata del segundo mayor descenso de ese indicador en un mes.
Y anticipándose al 2021, ha señalado que crearán 10 millones de empleos, “al menos en los diez primeros meses”.
Desciende el desempleo
El índice de desempleo, que estaba en el 3,5 % en febrero, el nivel más bajo en medio siglo, saltó al 14,4 % en abril, cuando la pandemia de coronavirus impactó más fuertemente a la economía, y desde entonces ha ido descendiendo gradualmente.
Esa tasa ha caído por primera vez en agosto por debajo de la marca del 10 %, que fue la registrada en octubre de 2009, cuando Estados Unidos empezaba a salir de la Gran Recesión.
Sin embargo, alrededor de la mitad de los 22 millones de empleos que se perdieron durante la pandemia, y está por ver si el mensaje triunfalista de Trump sobre la salud de la economía cala en los votantes indecisos de cara a las elecciones.
"Joe Biden y los socialistas demócratas radicales colapsarían inmediatamente la economía", ha insistido el magnate ante la posibilidad de que su rival llegue a la Casa Blanca el próximo enero.
Biden acusa a Trump de "librar una guerra contra los sindicatos"
Mientras Trump incidía en los datos macroeconómicos, Biden ha centrado su mensaje del Día del Trabajo sobre todo en los derechos de los trabajadores, al acusar a su contrincante de haber "librado una guerra contra los sindicatos en Estados Unidos".
"Esa guerra acabará bajo mi mandato. Firmaré una ley que hará más fácil que los trabajadores se organicen y negocien colectivamente, y seré el presidente más fuerte en cuanto a los derechos de los trabajadores que jamás haya habido", ha escrito Biden en su cuenta oficial de Twitter.
Biden también ha aprovechado para hacer algunas promesas electorales como aumentar el salario mínimo a 15 dólares la hora, poner fin al salario mínimo con propinas y al salario inferior al mínimo para las personas con discapacidad y asegúrese de que todos tengan grandes beneficios.
"Elegir a los ejecutivos de Wall Street por encima de los trabajadores"
La directora de comunicación de la campaña del candidato demócrata, Kate Bedingfield, ha asegurado en un comunicado que Trump ha demostrado a lo largo de estos cuatro años que, siempre que puede, "elige a los ejecutivos de corporaciones y a Wall Street por encima de los trabajadores".
"Ahora que tantos estadounidenses están en dolorosos aprietos financieros, Donald Trump está tratando de recortar fondos a la seguridad social, y todavía intenta derogar la reforma sanitaria y poner en riesgo los cuidados de salud de millones de estadounidenses en plena pandemia", ha alegado Bedingfield.
La compañera de fórmula de Biden, la senadora Kamala Harris, también ha intentado reforzar los lazos con los sindicatos durante su primera aparición de campaña sola desde que fue seleccionada como candidata demócrata a la Vicepresidencia.
En el estado clave de Wisconsin, Harris se ha reunido con empresarios negros y trabajadores sindicalizados del sector eléctrico, y ha aprovechado para reunirse con la familia de Jacob Blake, el afroamericano que quedó tetrapléjico tras recibir siete disparos de un policía blanco a finales de agosto.