Grecia promete construir un centro permanente para migrantes y pide mayor implicación a la UE
- Comienza el traslado de los primeros migrantes de Moria a un campamento temporal
- Aunque algunos países de la UE han aceptado acoger a migrantes, no hay acuerdo entre los socios
Grecia construirá un centro permanente de recepción de migrantes en Lesbos para reemplazar el campamento de Moria, devastado esta semana por un incendio y donde vivían alrededor de 12.000 personas.
Así lo ha confirmado este domingo el primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis, quien en una rueda de prensa ha reclamado mayor implicación de los socios europeos.
"Queremos convertir este problema en una oportunidad", ha señalado Mitsotakis, quien ha indicado que "Europa debería participar mucho más" en la gestión de este nuevo centro, al que se oponen algunos de los residentes de la isla.
El incendio del campamento de Moria dejó a miles de migrantes sin refugio, lo que obligó a la mayoría a dormir a la intemperie, sin saneamientos adecuados ni acceso a alimentos ni agua. Por ese motivo, las autoridades griegas han iniciado su traslado a un campamento temporal, levantando en unas instalaciones militares, con capacidad para unas 3.000 personas.
Este mismo domingo un primer grupo de unos 200 migrantes han llegado al lugar. Todos ellos deberán someterse a PCR para detectar posibles casos de coronavirus y aquellos que den positivo serán trasladados a una zona de aislamiento.
La nueva instalación está situada a unos dos kilómetros de la capital de Lesbos, Mitilene, en un viejo campo de tiro del ejército, cerca del pequeño campo de Kara Tepé, erigido a comienzo de la crisis migratoria en 2015 para acoger a los grupos más vulnerables y a enfermos.
Las condiciones en este campo están lejos de parecerse al infierno que era Moria, que en sus peores momentos llegó a albergar a mas de 20.000 personas.
"Prioridad" para los grupos vulnerables
Fuentes del Ministerio de Migración y Asilo han destacado que las familias y las personas de "grupos vulnerables" tendrán prioridad para su llegada al campamento provisional, si bien el citado medio ha indicado que hay migrantes que están negándose a su traslado y piden ser llevados a la Grecia continental.
El sábado se produjeron nuevas protestas de los migrantes evacuados del campo de Moria y algunos se enfrentaron a la Policía después de que intentaran marchar hacia el puerto de Mitilene, el más importante de la isla.
Según los medios locales, este domingo han llegado al puerto de Lesbos cinco nuevos escuadrones de antidisturbios y más camiones de la policía, así como varios vehículos blindados.
Mientras, la mayoría de los refugiados continúan a la intemperie acampados en las carreteras que rodean la vieja instalación, el sábado por la tarde llegó a Lesbos una barca con 21 personas de diversas nacionales.
Se trata del segundo bote que arriba en lo que va de mes. Todos fueron trasladados a una zona en el norte de la isla reservada para la cuarentena de los recién llegados.
"Una isla no puede soportar esta carga"
La situación de los migrantes está afectando también a los habitantes de la isla griega, uno de los principales puntos de entrada de la inmigración en Europa, que alcanzó su punto máximo en 2015-2016, cuendo alrededor de un millón de personas arribaron a sus costas.
"Una isla no puede soportar toda esta carga", asegura a Reuters Dimitris Koursobas, un alto funcionario responsable de inmigración en Lesbos y otras islas del norte del Egeo.
Aunque este año las cifras de nuevas llegadas están siendo inferiores, debido a la pandemia, algunos incidentes con los residentes de la isla y el sentimiento de abandono por parte de los socios europeos están colmando la paciencia del gobierno griego.
"La gente de Lesbos, Quíos y Samos es hospitalaria. Siempre habrá voces extremas, aunque en general son acogedores. Pero están hartos", señala Koursobas.
El sector turístico, en peligro
Uno de los sectores más perjudicados es el turístico, que había dado señales de recuperación tras la crisis migratoria de 2015 y que ahora se encuentra en grave peligro a causa de la pandemia. Según funcionarios locales, el turismo ha caído un 90% esta temporada.
En la UE, por el momento, no ha habido acuerdo para afrontar el problema migratorio, con países como Grecia o Italia que quieren que se reparta entre los países miembros y otros que se niegan a aceptar refugiados.
Varios países de la UE han accedido a acoger a 400 menores no acompañados tras el incendio. Este sábado, el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) ha recordado que "sigue habiendo demasiados niños y familias que se enfrentarán a otra noche al aire libre. Necesitan urgentemente refugio, protección y acceso a servicios básicos". Además, UNICEF ha pedido a más países que acojan a menores en mayor número.