Los demócratas de EE.UU. investigarán posibles presiones para modificar informes sobre el COVID-19
- Sospechan que los datos han podido ser manipulados para que se alinearan con la visión más optimista de Trump
- Concretamente han anunciado que se centrarán en la implicación de personas designadas por el magnate republicano
Los demócratas de la Cámara Baja de EE.UU. van a investigar supuestas presiones por parte de la Administración del presidente Donald Trump para cambiar o retrasar la publicación de informes científicos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés) sobre el coronavirus COVID-19, según han informado este lunes medios de comunicación locales.
Así lo han anunciado los legisladores progresistas del Comité Selecto de Supervisión de la Crisis del Coronavirus, liderado por James Clyburn, en una carta enviada al secretario de Salud y Servicios Humanos (HHS, en inglés), Alex Azar, y al director de los CDC, Robert Redfield.
"Durante la pandemia, los expertos han dependido de esos informes para determinar cómo se expande el coronavirus y quién está en mayor riesgo. Aun así, funcionarios de HHS han visto estos informes científicos como oportunidades de manipulación política", dice la misiva.
Presiones por una visión más optimista de la pandemia
La investigación de los demócratas se centrará en los informes semanales de los CDC de morbilidad y mortalidad, utilizados por los investigadores como fuente de información sobre el coronavirus.
El anuncio de estas pesquisas se produce después de que el medio Politico revelara el viernes que el director de Asuntos Públicos de HHS, Michael Caputo, y su asesor científico Paul Alexander presuntamente presionaron a responsables de los CDC para modificar esos informes, en algunos casos de forma retroactiva, para que se alinearan con la visión más optimista de Trump sobre la pandemia.
Politico ha publicado el contenido de un correo electrónico supuestamente enviado por Alexander al director de los CDC y otros funcionarios el pasado 8 de agosto en el que señalaba: "Los informes deben ser leídos por alguien fuera de los CDC como yo, y no podemos permitir que los informes sigan como hasta ahora, porque es escandaloso. Es una locura".
Según ese medio, los CDC han seguido publicando dichos reportes, pero han permitido que Caputo y su personal revisen los borradores de los artículos.
Investigación de personas designadas por Trump
En su carta, los demócratas indicaron que van a investigar la implicación de personas designadas por Trump en las presiones a los CDC, que tradicionalmente han publicado sus informes sin interferencias políticas.
En la misiva exigen al Gobierno que proporcione datos sobre los contactos mantenidos por Redfield sobre esos informes, así como documentos mandados por Caputo, Alexander y Azar, entre otros.
Este comité, que fue constituido en abril para evaluar la actuación del Ejecutivo frente a la pandemia, pidió además que a partir del 22 de septiembre se le manden las transcripciones de las entrevistas entre personal de los CDC y el HHS.
La semana pasada Trump reconoció que había minusvalorado deliberadamente en febrero y marzo la pandemia, pese a conocer la gravedad de la COVID-19, para evitar que el pánico cundiera entre la población.
El presidente de EE.UU. hizo estas declaraciones después de que medios de comunicación publicaran algunas grabaciones hechas por el periodista Bob Woodward durante una serie de entrevistas con el mandatario a lo largo de este año, como preludio a la publicación de su libro "Rage", que saldrá a la venta mañana, martes, en el país.
EE.UU. es el país del mundo más afectado por la pandemia con más de 6,5 millones de casos detectados y más de 194.000 fallecidos, según los datos de la Universidad Johns Hopkins.