La familia de una mujer que murió de cáncer tras tres meses sin una consulta presencial: "La COVID no lo justifica todo"

• La Junta de Castilla y León ha anunciado que va a abrir una investigación
• Su hermana denuncia que acudió a urgencias del Hospital de Bilbao y le reprocharon que fuera en plena pandemia

Muere de cáncer después de tres meses sin una cita presencial por el coronavirus

Sonia Sainz-Maza, de 48 años, murió de cáncer después de tres meses de citas telefónicas y del paso por las urgencias de dos hospitales, según denuncia su familia. "Mi hermana se ha estado muriendo al otro lado de un teléfono mientras le daban una y otra vez citas telefónicas", asegura su hermana Lydia en TVE: "Se la ha abandonado, no se la ha escuchado, no se le ha mirado a la cara, no se le ha prestado la atención que merecía".

Lydia cuenta cómo su hermana pidió una primera cita con su médico de cabecera en el municipio burgalés de Espinosa de los Monteros el 17 de abril, y se la dieron por teléfono por la pandemia de coronavirus. Había comenzado a sentir un dolor en la pierna izquierda, "eran los primeros síntomas de ese cáncer de colon silencioso que ella padecía sin saberlo, a partir de ahí vinieron tres meses de citas telefónicas", denuncia.

Sonia ingresó en julio en el Hospital de Burgos, donde falleció el 13 de agosto, según denuncia su hermana, tras haber pasado por "tres meses de citas telefónicas, una consulta con el rehabilitador (que le daban) dentro de nueve meses y el paso por dos urgencias hospitalarias de dos comunidades autónomas diferentes en las que no han sabido mirarla a los ojos, el COVID no lo justifica todo, las consultas telefónicas tienen que acabar y no nos pueden abandonar porque haya coronavirus".

La historia de Sonia Sainz-Maza es una de las ponen la piel de gallina. Tras ser atendida durante 3 meses por vía telefónica muere con métastasis. Hoy en La Hora de la 1, hemos hablado con Lydia Sainz-Maza, hermana de Sonia. Nos ha contado que tras los análisis realizados "le sacaron de todo, todo venía con asteriscos". "Mi hermana lo que tenía era un cáncer de colon en estado 4", nos ha contado Lydia.

La familia de Sonia estudia emprender acciones judiciales y, según explica Sonia a TVE, ha recibido este lunes la llamada telefónica de la consejera de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Verónica Casado, para darles el pésame, "pedir perdón por los errores que se hayan podido cometer" y trasladarles que habrá una investigación.

El cáncer es una de las enfermedades que con la pandemia de coronavirus ha pasado a un segundo plano. Según la Sociedad Española de Oncología Médica, durante la fase más crítica de la primera ola de contagios, el diagnóstico de casos de cáncer disminuyó un 25%.

"En ningún momento consideró darle una cita presencial"

Sonia acudió primero a su médico de cabecera en el municipio burgalés de Espinosa de los Monteros, pero durante tres meses la atención fue solo telefónica. "En ningún momento consideró darle una cita presencial y explorarla, y tampoco consideró hacerle una analítica", pese a que llegó a perder siete kilos.

El médico de atención primaria de este municipio la envió primero al traumatólogo del Hospital Universitario de Burgos por el dolor lumbar. Sin embargo, en este centro sanitario "tampoco la atendieron" y le dieron cita con el rehabilitador para marzo del año que viene.

Antes de marcharse, ese mismo día, Sonia decidió acudir a Urgencias en este mismo hospital, pero según asegura su hermana, "le pusieron una inyección, no supieron ver que había algo más".

Al no tener respuesta decidió acudir a urgencias del Hospital de Cruces de Bilbao, donde, según denuncia su hermana, le recriminaron que fuese en mitad de la pandemia: "Le dijeron que como se le ocurría ir a unas urgencias que se estaba arriesgando a coger el coronavirus, ella que trabajaba en una residencia de ancianos".

"No se puede abandonar a las personas porque haya COVID"

Lydia ha explicado que tras los análisis realizados a su hermana "le sacaron de todo, todo venía con asteriscos", y reflejaban que sufría un cáncer de colon en estado 4 con metástasis.

"Quién me va a negar a mí ahora que mi hermana no iba a estar viva, si en lugar de tres meses de atención telefónica, se la hubiese llamado a la consulta, se la hubiese explorado, se la hubiese visto cara a cara como la veíamos la familia, qué estábamos viendo cómo se consumía", explica la hermana de Sonia a TVE.

Después de treinta años trabajando, denuncia Lydia, "cuando necesitas a la Seguridad Social, esta es la respuesta que te da, una llamada telefónica, ¿a dónde vamos a llegar?, ¿quién pone solución a esto?".

"No se puede abandonar a las personas porque haya COVID es que hay más enfermedades que el COVID, habrá que hacer una profunda reflexión sobre la Sanidad que queremos", añade.

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