La polarización: una estrategia política perfectamente planificada
- El científico del CSIC Luis Miller revela en un informe cómo afecta la polarización política a España
- "La nueva política, basada en las emociones y en el uso de redes sociales, está acabando con el pensamiento reposado”
Mucho se ha hablado en los últimos meses de la tendencia de los partidos políticos a escorarse a posiciones cada vez más extremas. La polarización divide el Congreso y también a unos ciudadanos que se ven arrastrados por ella, a veces, incluso sin quererlo. Pero esta estrategia política no surge de manera casual, sino que hay alguien detrás que la planifica y se beneficia de ella. Así lo ha explicado Luis Miller, científico del CSIC y autor del informe sobre polarización en España de EsadeEcPol, en Las Mañanas de RNE con Íñigo Alfonso.
La polarización es una estrategia política que trata de dividir a los votantes en bloques y se alimenta de mensajes simples que apelan a las emociones de los ciudadanos. Luis Miller cree que los políticos siempre han tirado de la polarización para difundir sus ideas, pero lo novedoso ahora es lo “efectivo” que resulta hacerlo a través las redes sociales. La primera víctima de esta forma de hacer política es “la racionalidad” y el análisis de argumentos complejos.
“Los partidos han encontrado que apelar a las emociones es mucho más efectivo que apelar a las razones. […] La nueva política, basada en las emociones y en el uso de redes sociales, está acabando con el pensamiento reposado”, señala.
Estrategias de polarización en España
“La nueva política, basada en las emociones y en el uso de redes sociales, está acabando con el pensamiento reposado”“
El informe de Luis Miller subraya que la polarización ideológica y territorial en España es entre dos y tres veces mayor que la que existe en torno a otros temas, como la fiscalidad o la inmigración. El científico apunta que los partidos políticos son muy conscientes de esta cuestión y trasladan las discusiones en las que hay consenso hacia terrenos donde no lo hay, como es la división territorial, para poder así polarizar a los ciudadanos. Un ejemplo evidente es, para el científico, la gestión de la pandemia.
“Es una estrategia clara de sacar un debate en el que no hay disputa hacia otro donde sí la hay. Cuando hablamos de que la polarización se hace, nos referimos a que se utilizan este tipo de instrumentos”, añade.
“Los partidos trasladan las discusiones en las que hay consenso hacia terrenos donde no lo hay para poder así polarizar a los ciudadanos“
Frenar la polarización
El científico de CSIC cree que los medios de comunicación, los científicos y los líderes sociales tienen mucho qué decir en esta lucha contra la polarización. Su labor debería servir para “desenmascarar los argumentos polarizadores”, argumenta Miller, que además señala que las elecciones primarias es uno de los elementos que está sirviendo para polarizar dentro de los propios partidos. El científico propone, asimismo, establecer una especie de decálogo de buenas formas para “atar las manos al lenguaje polarizador” que utilizan algunos diputados en el Congreso.