Trump despide a su secretario de Defensa, Mark Esper, mientras sigue sin reconocer la derrota electoral

• El presidente sigue cuestionando los resultados de las elecciones dos días después de la victoria de Biden | Especial

Trump despide a su secretario de Defensa, Mark Esper

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha anunciado este lunes el despido "inmediato" del secretario de Defensa y jefe del Pentágono, Mark Esper, en plena transición tras su derrota en las elecciones de Estados Unidos. "Mark Esper ha sido despedido. Me complace anunciar que Christopher C.Miller, el altamente respetado director del Centro Nacional de Contraterrorismo (confirmado de manera unánime por el Senado), será el secretario de Defensa en funciones de forma inmediata. Chris hará un gran trabajo", ha anunciado en Twitter.

Dos días después del anuncio de la victoria de Joe Biden en las elecciones presidenciales, el republicano sigue sin reconocer su derrota y mantiene su ofensiva para disputar los resultados de algunos estados donde el recuento sigue pendiente. Y ajeno a los planes de transición del presidente electo, Trump opta por demostrar que sigue al frente de Estados Unidos durante los dos próximos meses.

El Pentágono se desmarca de la estrategia de "ley y orden" de Trump contra las protestas en EE.UU. .

Diferencias durante las protestas raciales

El nombre de Esper figuraba en la lista de posibles despidos por parte de Trump desde su oposición al despliegue del Ejército para sofocar los disturbios en distintas ciudades del país este verano tras la muerte bajo custodia policial del ciudadano afroamericano, George Floyd.

"La opción del uso de tropas en activo en el papel de garantes de la ley debería ser solo empleado como último recurso, y solo en las situaciones más urgentes y extremas. No estamos en una de esas situaciones ahora", afirmó entonces Esper en una conferencia de prensa desde el Pentágono.

Formado en la academia militar de West Point y con experiencia tanto en el Gobierno como en el sector privado, Esper fue designado por Trump como jefe del Pentágono en junio de 2019. Según fuentes consultadas por Reuters, el militar, que tampoco apoyó la estrategia de Trump con sus aliados de la OTAN, estaba preparado para su salida desde hace tiempo, especialmente si Trump lograba revalidar su mandato.

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