La paliza mortal de dos vigilantes de seguridad blancos a un cliente negro aviva el debate del racismo en Brasil
- El suceso tuvo lugar en un supermercado poco antes de la conmemoración del Día de la Conciencia Negra
- El vicepresidente brasileño ha señalado que "no existe racismo" en el país
Un hombre negro de cuarenta años murió el jueves víctima de una paliza propinada por los guardas de seguridad de un supermercado en la ciudad brasileña de Porto Alegre (sur), justo en la víspera del Día Nacional de la Conciencia Negra, que se celebra este viernes para combatir el racismo.
El soldador Joao Alberto Silveira Freitas 'Beto' murió como consecuencia de los golpes recibidos por dos guardas de seguridad en las instalaciones de un supermercado de la red francesa Carrefour en la capital del estado de Río Grande do Sul, fronterizo con Argentina y Uruguay, han informado este viernes las autoridades.
La Brigada Militar, como es conocida la Policía Militarizada de Río Grande do Sul, ha indicado que el incidente comenzó después de una discusión entre la víctima y una cajera, quien llamó a la seguridad del supermercado.
El hombre, que estaba en compañía de su esposa, fue sacado al exterior del establecimiento donde recibió una fuerte paliza registrada por otros clientes y cuyos vídeos circularon este viernes en las redes sociales.
En un comunicado divulgado este viernes, Carrefour Brasil ha atribuído la responsabilidad de las agresiones que terminaron con la muerte del cliente a los guardas de seguridad y ha anunciado la ruptura del contrato con la empresa que presta ese servicio en Porto Alegre y la solidaridad con la familia de la víctima.
Los dos guardas, uno de ellos policía administrativo militarizado en carácter temporal y que realizaba el trabajo externo fuera de su horario oficial, fueron detenidos por las autoridades, que indicaron que el agente, además de responder ante la Justicia civil por homicidio, será sometido a una investigación interna.
Muerte comparada con la del estadounidense George Floyd
Las agresiones y la cobertura mediática de la muerte del soldador fueron comparadas en las redes sociales y en los medios brasileños con la de George Floyd, el afroamericano asesinado por un policía blanco el pasado mayo y cuyo deceso desató una oleada de furia y protestas antirracistas en todo Estados Unidos.
El caso ha tomado más repercusión por ocurrir en la víspera del Día de la Conciencia Negra, una fecha que recuerda el asesinato en 1695 de Zumbi dos Palmares, un negro que gobernó una posteriormente fracasada "república" de esclavos libres en el noreste del país. Brasil fue la última nación de América Latina en abolir la esclavitud.
En el Día de la Conciencia Negra, fecha declarada como festivo en varias ciudades, entre ellas Sao Paulo y Río de Janeiro -las mayores del país-, se publican una serie de informes sobre el combate al racismo, la discriminación y la desigualdad racial, además de una serie de eventos culturales y artísticos.
Este año, sin embargo, por la pandemia del nuevo coronavirus, la programación de actos ha estado limitada a eventos en las redes sociales y a los informes divulgados por diferentes organizaciones no gubernamentales.
Bolsonaro dice que la violencia es vivida "por todos" tras las protestas
Por su parte, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, ha afirmado este viernes que no hay que "dividir el sufrimiento del pueblo brasileño en grupos" y que "problemas como la violencia son vividos por todos", tras una jornada de protestas en el país por el brutal asesinato.
En una serie de publicaciones en su cuenta de Twitter, el mandatario ha afirmado que existen grupos políticos que buscan sustituir la "esencia" del pueblo brasileño que "conquistó al mundo" por el "conflicto" y el "odio".
"Hay quien quiere destruir (la esencia) y poner en su lugar el conflicto, el resentimiento, el odio y la división entre clases, siempre disfrazados de 'lucha por la igualdad' o 'justicia social', todo en búsqueda del poder", ha expresado Bolsonaro, aunque no ha mencionado directamente la muerte de Joao Alberto Silveira Freitas.
"Un pueblo unido es un pueblo soberano, un pueblo dividido es un pueblo vulnerable. Un pueblo vulnerable es más fácil de ser controlado. Y hay quien se beneficia políticamente con la pérdida de nuestra soberanía", ha señalado.
Ha agregado que no hay "un color de piel mejor que los demás", pero sí "hombres buenos y hombres malos", y que son las "elecciones y valores" de cada uno que hacen la diferencia.
El vicepresidente brasileño señala que "no existe racismo" en el país
Horas antes, el vicepresidente brasileño, Hamilton Mourao, calificaba como "lamentable" el brutal asesinato, pero ha afirmado que no se trata de un caso de discriminación racial porque "en Brasil no existe racismo".
"Para mí, en Brasil no existe racismo. Eso es una cosa que quieren importar, eso no existe aquí. Yo te digo con toda tranquilidad, no hay racismo", declaró Mourao a los periodistas.
Para el vicepresidente brasileño, la muerte de Silveira Freitas fue producto de un equipo de seguridad "totalmente sin preparación".
"Aquí no existe (racismo)", pero "existe desigualdad. Eso es una cosa que existe en nuestro país, tenemos una brutal desigualdad, fruto de una serie de problemas", señaló.
"Gran parte de las personas de nivel más pobre, que tiene menos acceso a los bienes y a las necesidades de la sociedad moderna, son gente de color", añadió el vicepresidente.
En videos e imágenes que circulan en las redes sociales, es posible ver cuando los dos guardias sostienen a la víctima y le proporcionan reiterados golpes, patadas y estrangulaciones, además de inmovilizar al hombre en el suelo. Así como ocurrió con George Floyd, testigos declararon que el hombre gritaba por ayuda y decía que no podía respirar, pero eso no impidió que los vigilantes siguieran con los ataques.
Pese a que los negros representan un 56 % de la población brasileña, los episodios de racismo en el país son habituales.
El 75 % de las víctimas de homicidio en Brasil en 2018 fueron negros, de acuerdo con datos del Atlas de la Violencia 2020 elaborado por el Fórum de Seguridad Pública. Asimismo, los negros son el 75 % entre los más pobres y tan solo un 5 % ejercen cargos ejecutivos en el país.