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Violencia de género

Rosell, sobre las denuncias por violencia de género: "No se les puede pedir heroicidad a las víctimas"

  • La Delegada del Gobierno para la Violencia de género cree que la protección "no puede recaer" en las mujeres afectadas
  • El 016 es el teléfono de atención a víctimas, gratuito y no deja huella en la factura; el correo: 016-online@igualdad.gob.es

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Victoria Rosell: "Nunca hay suficientes recursos contra la violencia de género mientras haya victimas"

En el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, la Delegada del Gobierno para la Violencia de género, Victoria Rosell, ha apelado a la responsabilidad social y al compromiso de las administraciones públicas para combatir entre todos una lacra que ha acabado con la vida de 1.074 mujeres en España desde 2003, sin cargar “sobre los hombros de las víctimas” todo el peso de su protección.

“La denuncia es necesaria, pero no suficiente. No se le puede pedir heroicidad a las víctimas”, ha subrayado en una entrevista con ‘La hora de La 1’ en la que destaca la importancia de cambiar el enfoque y dejar de exigir a las afectadas que denuncien para que se abra la puerta de la protección.

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En este sentido, ha argumentado que "empujar" a las víctimas a la denuncia es un error, si lo que les provoca es "más miedo e incertidumbre" y pide mejorar las medidas para protegerlas.

Necesitan soluciones habitacionales, ingreso mínimo vital, seguridad escolar (…) Necesitan encontrarse en sitios amables y seguros, y de ahí saldrá una buena denuncia asesorada, informada. Yo las he visto llegar al juzgado en blanco, sin información previa suficiente”, ha insistido Rosell.

“Si fuéramos los padres de la víctima de la manada, preguntémonos si habríamos hecho días después la denuncia”, ha planteado.

Aspira a un pacto de Estado más "participado"

Quienes también pueden contribuir a que la protección llegue a tiempo son los familiares, amigos o vecinos de mujeres que puedan estar sufriendo cualquier tipo de violencia en silencio. "Jamás se le van a pedir cuentas si llaman erróneamente o hacen un juicio apresurado sobre lo que está sucediendo en la vivienda de al lado y, sin embargo, a ella no se le puede pedir la heroicidad", ha señalado Rosell.

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Ese esfuerzo social, dice, podrá sumarse al impulso de unas políticas de protección más “proactivas” que están en marcha y que han de enmarcarse en un pacto de Estado contra la violencia de género “más participado”.

“2021 tiene que ser el año del diseño más participado de todas las administraciones en el Pacto de Estado. Hay que institucionalizarlo, hacerlo más vinculante y atribuir cada competencia a su institución”, sostiene.

La Delegada del Gobierno para la violencia de género también considera que, si bien el esfuerzo presupuestario destinado a las políticas de Igualdad es “notable”, “nunca hay suficientes recursos mientras haya víctimas”.

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Un "compromiso" para incluir a todas las víctimas en los registros

En cuanto a los asuntos pendientes, uno de los más evidentes es el que tiene que ver con ampliar de manera oficial concepto de violencia de género para que incluya a todas las que son víctimas por el hecho de ser mujer y no solo a quienes fueron asesinadas por sus parejas o exparejas.

“Se ha abordado ya ese compromiso que lleva un retraso de casi diez años respecto del Convenio de Estambul. Tenemos que cuadrar hasta el último posible caso para que surjan las menores discrepancias posibles y también estamos en contacto con organismos internacionales”, ha afirmado Rosell.

Respecto al registro oficial, que hasta ahora deja al margen a numerosas víctimas, ha precisado que no se van a incluir todas en un mismo listado. Serán dos registros diferenciados “para seguir manteniendo un análisis riguroso”, ha avanzado.

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"La base del iceberg son mujeres vivas a las que podemos proteger"

Rosell ha abundado en la importancia de ver más allá de las cifras, incidiendo en que las asesinadas son “la punta del iceberg” de la violencia machista.

“La base del iceberg son mujeres que aún están vivas y a las que todavía podemos proteger”, ha dicho la Delegada, quien considera que compartir bulos y negar la violencia contra la mujer es “contribuir” al encubrimiento del delito.

“Yo, que vengo de la magistratura penal, digo que es casi criminal. Encubrir es criminal y ser cómplice es criminal”, ha advertido.

Por último, preguntada por las políticas relacionadas con las visitas de padres agresores a hijos de víctimas de violencia de género, ha afirmado con rotundidad que “un maltratador nunca puede ser un buen padre” y ha apuntado que el Consejo de Europa alerta en un reciente informe de que la Justicia española “otorga demasiadas custodias y visitas a padres agresores”.