La policía de Cuba detiene a un grupo de disidentes en huelga de hambre
- El Movimiento San Isidro es una de las principales organizaciones opositoras creada por el ámbito del arte y la cultura
- La huelga ha generado una fuerte repercusión internacional entre organizaciones como Amnistía Internacional
Agentes de seguridad cubanos han desalojado este jueves a un grupo de catorce disidentes, cinco de ellos en huelga de hambre, que se atrincheraban desde hacía diez días en una casa en La Habana para exigir la liberación de uno de sus compañeros, según ha denunciado el grupo opositor Movimiento San Isidro y han corroborado varios testigos en el lugar.
"Agentes de la dictadura irrumpieron en nuestros locales, golpearon salvajemente a nuestros compañeros, se los llevaron y no sabemos dónde están", ha anunciado el Movimiento San Isidro, un colectivo de artistas, académicos y periodistas, en su cuenta Twitter. "Tememos por su integridad física", ha añadido.
Sacaron a los activistas "a golpes", según testigos
El desalojo de los opositores, quienes permanecen en paradero desconocido, se ha producido en torno a las 20:30 hora local (1:30 GMT del viernes) en la calle Damas, de la barriada de San Isidro en la icónica Habana Vieja.
Dos vecinos que presenciaron el incidente han asegurado a la agencia Efe que los agentes sacaron a los activistas "a golpes", mientras que otro ha dicho que "con violencia". Sin embargo, todos los testigos han rehusado seguir hablando cuando se les ha pedido que ofrecieran más detalles sobre lo ocurrido.
Un hombre vestido de civil que se ha identificado como agente de la Seguridad del Estado ha negado cualquier tipo de violencia en el desalojo -ha asegurado que se produjo de forma pacífica- y ha declarado que las fuerzas del orden se llevaron a los opositores porque uno de ellos había "violado el protocolo anticovid".
Huelga de hambre para pedir la liberación de un activista
En la casona de la calle Damas permanecían recluidas voluntariamente 14 personas asociadas al Movimiento San Isidro -una de las principales organizaciones opositoras creada por disidentes del ámbito del arte y la cultura- para pedir la liberación de un activista antigubernamental, el rapero aficionado y disidente Denis Solís, que fue condenado a ocho meses de cárcel por "desacato".
Sus dos líderes, acostumbrados a poner a prueba los límites de la libertad de expresión, son el artista Luis Manuel Otero Alcántara, de 32 años, y el rapero Maykel Castillo, conocido como Osorbo, de 37 años.
"Responsabilizamos al Gobierno cubano por la salud de Luis Manuel Otero Alcántara, Maykel Castillo y de los demás huelguistas apostados en nuestra sede", ha publicado en Twitter minutos después el Movimiento, que además ha llamado "a respetar la vida y dignidad de todos los detenidos y dejarlos en libertad".
Su movimiento ha sido acogido con rara unanimidad por las cuatro principales organizaciones de oposición, que dieron su apoyo: la Unión Patriótica de Cuba (Unpacu), Cubadecide, Mesa de la Unidad de Acción Democrática y las Damas de Blanco.
Repercusión internacional
Cinco de los que permanecían en la casa mantenían una huelga de hambre -tres de ellos desde hace ocho días-, lo que ha generado una fuerte repercusión internacional al pronunciarse numerosas organizaciones cubanas y globales, como Amnistía Internacional, además del secretario de Estado de EE. UU., Mike Pompeo, quien denunció la "cruel represión" y pidió la "liberación incondicional" del rapero.
En su cuenta de Twitter, la Directora de Amnistía Internacional para América, Erika Guevara-Rosas, ha denunciado lo sucedido: "Hacemos llamado urgente a las Embajadas en Cuba y los gobiernos de la región y Europa a interceder por la vida e integridad de las y los activistas del Movimiento San Isidro, quienes han sido detenidos arbitrariamente y de forma violenta por agentes de la seguridad".
El allanamiento a la casa de San Isidro y la detención de los opositores ha coincidido con la caída temporal de Facebook, Instagram y Youtube, inaccesibles durante unos 40 minutos a través de la red móvil cubana.
En los pasados días los activistas atrincherados acostumbraban a transmitir en directo por la red social Facebook lo que ocurría en la vivienda, por lo que varios internautas atribuyeron el misterioso apagón a un intento del Gobierno de evitar que se divulgaran imágenes y vídeos del desalojo en tiempo real.