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China condena a cuatro años de prisión a la bloguera que informó sobre el coronavirus en Wuhan

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China condena a cuatro años de prisión a una periodista ciudadana por informar desde Wuhan al inicio de la pandemia

La periodista con ciudadanía china Zhang Zhan, quien informó sobre el primer brote del coronavirus en la ciudad china de Wuhan, ha sido condenada a cuatro años de prisión por “provocar altercados y buscar problemas”.

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La Fiscalía pidió una sentencia de entre cuatro y cinco años de prisión para Zhang por “publicar repetidamente un gran número de informaciones falsas”, así como aceptar entrevistas con medios extranjeros para “exagerar maliciosamente” la situación del coronavirus en Wuhan, que fue la zona cero de la COVID-19.

Finalmente, el juicio se ha celebrado este lunes en un tribunal de la ciudad de Shanghái, donde la acusada tiene fijada su residencia, y ha acusado a la periodista a cuatro años de prisión por la información que publicaba a través de plataformas chinas como WeChat y otras como Twitter o YouTube, que están prohibidas en el país.

Los riesgos de informar de la pandemia de COVID-19 en China

La acusada, en huelga de hambre

Zhang, de 37 años, fue detenida a finales de mayo e inició una huelga de hambre en septiembre que, según su defensa, ha provocado que su estado físico sea “muy débil” y que la periodista confirmó que continuaría "incluso aunque muera en prisión" si la condena era grave.

Ren Quanniu, uno de los abogados de la acusada, ha señalado a AFP que "parecía muy abatida cuando se anunció la sentencia" y ha advertido de que está "muy preocupado" por su estado psicológico.

El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos se ha mostrado "profundamente preocupado" por la condena y ha pedido la liberación de la "periodista ciudadana". "Tratamos su caso con las autoridades en 2020 como un ejemplo de las restricciones excesivas de la libertad de expresión vinculadas a la COVID-19 y seguimos pidiendo su liberación", ha indicado a través de su cuenta en la red social Twitter.

La organización Amnistía Internacional (AI) ha asegurado que la periodista se centró en informar sobre las detenciones de otros reporteros independientes y el acoso a familiares de víctimas del coronavirus.

Por su parte, la organización Chinese Human Rights Defenders (CHRD) afirmó en septiembre que Zhang fue detenida por informar de que los ciudadanos de Wuhan fueron obligados a pagar tasas para hacerse la prueba de la COVID-19 o que habían recibido comida podrida durante el confinamiento que vivió la ciudad durante once semanas.

Otros periodistas ciudadanos desaparecidos o detenidos

Las autoridades locales de Wuhan tardaron en ofrecer la información disponible sobre el brote debido a que necesitaban la aprobación de instancias superiores para hacerlo, según declaró el entonces alcalde de la ciudad, Zhou Xianwang.

En este sentido, AI aseguró que “los periodistas ciudadanos fueron la fuente primaria, si no la única, de información de primera mano y sin censura sobre el brote de la COVID-19 en China”. Asimismo, la organización subrayó que los reporteros independientes “se enfrentan a acoso y represión por publicar noticias y difundir informaciones censuradas por el Gobierno”.

Además, otros ciudadanos que narraron la situación del coronavirus en Wuhan han desaparecido o han sido detenidos a lo largo de este año, como el abogado Chen Qiushi, el empresario Fan Bing o el reportero Li Zehua, quien fue puesto en libertad en abril.

Críticas a la respuesta inicial de China a la pandemia

Pekín esperó hasta el 23 de enero para establecer la cuarentena en Wuhan, a pesar de que ya se había informado de casos en diciembre de 2019. Además, China informó a la Organización Mundial de la Salud (OMS) del primer caso transmitido el pasado 31 de diciembre de 2019.

Asimismo, Estados Unidos y otros gobiernos occidentales acusaron a China de ocultar información relacionada con la COVID-19, a lo que el país asiático contestó publicando en junio un libro blanco para registrar sus esfuerzos en la lucha contra el virus y en el que afirmaba que adoptó medidas de contención "extensivas, estrictas y exhaustivas".

Hasta la fecha en el gigante asiático ha habido 95.632 casos y 4.771 fallecidos, según el balance de la Universidad Johns Hopkins, la gran mayoría de ellos -cerca de 4.000 muertes- en la capital de la provincia de Hubei, Wuhan, una ciudad con alrededor de 11 millones de habitantes.