Lluvia de estrellas y fuegos artificiales para poner el broche final a la investidura de Biden

• Bruce Springsteen, Katy Perry, Bon Jovi o Demi Lovato protagonizan el acto para celebrar la toma de posesión del presidente
• La gala virtual, presentada por Tom Hanks, lanza un mensaje de unidad y esperanza a pesar de la crisis

Katy Perry, Bruce Springsteen o Tom Hanks, estrellas de la investidura de Joe Biden como presidente de EE.UU.

De Bruce Springsteen a Katy Perry, pasando por Ozuna o Justin Timberlake, Joe Biden se ha rodeado de lo más selecto del mundo de la música y el cine estadounidense en el acto final de su toma de posesión, una gala virtual "Made in Hollywood" retransmitida por casi todas las cadenas y que ha culminado con unos espectaculares fuegos artificiales.

El espectáculo "Celebrating America", presentado por el actor Tom Hanks desde el monumento a Lincoln, ha sido el broche final para el día en el que el demócrata se ha convertido en el presidente número 46 de la historia de Estados Unidos.

Desde el famoso monumento de Washington, Biden ha apelado de nuevo, como ya había hecho en su discurso de investidura, a la unidad del país para superar las múltiples crisis a las que se enfrenta. "Hay momentos en nuestra historia cuando se pide más de nosotros. Ahora estamos en uno de esos momentos. La pregunta es: ¿estamos preparados? ¿Estaremos a la altura del momento como hicieron nuestros antepasados?", ha dicho Biden a los pies de la estatua de Lincoln.

La gala, que también ha contado con actuaciones del violinista Yo Yo Ma, de músicos de reguetón como Luis Fonsi o estrellas del rock como Dave Grohl o Bon Jovi, se ha enfocado en lanzar un mensaje de esperanza. Sobre este concepto han girado unas canciones seleccionadas para levantar la moral de un país atravesado por varias crisis: "Here comes the sun", "Better days" o "I'm feeling good", para culminar con el apoteósico "Fireworks" de Katy Perry.

Primera intervención pública de Kamala Harris como vicepresidenta

Kamala Harris, que ha hecho historia al jurar su cargo como primera mujer vicepresidenta en la historia de Estados Unidos, se ha dirigido al público (virtual) por primera vez desde este cargo." "En muchos sentidos, este momento encarna nuestro carácter como nación, demuestra quiénes somos. Incluso en tiempos oscuros, no solo soñamos, hacemos", ha afirmado la vicepresidenta.

“La aspiración estadounidense es lo que llevó a las mujeres de esta nación a lo largo de la historia a exigir la igualdad de derechos”, ha añadido Harris, que ha pedido "ver más allá de la crisis" que azota Estados Unidos, tanto sanitaria, como económica y social.

"Celebrating America" ha hecho referencia en varias ocasiones a lucha contra el coronavirus, que este miércoles se ha cobrado más de 4.000 muertes en solo 24 horas, otro triste récord en el país más afectado por la pandemia. Han intervenido profesionales esenciales como sanitarios, profesores y lo ha hecho también el chef español José Andrés, que ha pedido unir esfuerzos entre toda la sociedad estadounidense para acabar con "la crisis de hambre".

"La comida es la manera más rápida de reconstruir nuestro sentimiento de comunidad", defendió, ha defendido. Además de él, el acto ha contado con otras estrellas hispanas, como la actriz Eva Longoria, Luis Fonsi y Ozuna.

Conversación entre los expresidentes vivos

Otro momento histórico de la gala ha sido un mensaje conjunto de los tres expresidentes que han asistido a la toma de posesión de Biden: Barack Obama, George W. Bush y Bill Clinton. Ante la ausencia notoria de Donald Trump, que, por cierto, no ha sido mencionado en ningún momento del acto, los exmandatarios han destacado la importancia de una transición pacífica de poder.

"Su éxito es el éxito de esta nación", ha dicho Bush a Biden, un mensaje clásico en el traspaso de poder entre los ocupantes de la Casa Blanca. Obama ha deseado suerte a Biden, quien fue vicepresidente suyo durante ocho años y a quienes les une una relación de amistad. Los tres han querido lanzar un mensaje de normalidad institucional precisamente cuando Trump lo ha roto al no asistir a la investidura de su sucesor, el primer presidente en no hacerlo en la historia reciente del país.